THE RAMONES : GABBA GABBA HEY



 Mientras colocaba el disco en el equipo de música, Roc ya se imaginaba que las canciones que iban a escuchar encantarían a su compañero. Los Ramones siempre hacían canciones muy cortas, tocaban a toda velocidad y repetían palabras  Hey Ho Let´s Go o Gabba Gabba Hey, algo muy divertido. Efectivamente, cuando la música empezó a sonar por los altavoces, Tocho abrió muchos los ojos y se quedó con la boca abierta sin decir nada.  ( La pequeña historia de Roc) Izquierdo/Del Río/Crespo.


 Algo parecido me sucedió a mi cuando tuve que hojear las fotos del viejo Disco Exprés. Blanco y negro, papel de periódico, reseñas de calles sucias, Nueva York como telón de fondo, unos tipos desgreñados, feos, apabullantes, con más pinta de delincuentes que otra cosa, y sin embargo… ¡ay sin embargo! Me atrajeron como la luz a las luciérnagas. Capaz de estrellarme, pero el impulso era súbito, instantáneo, para qué esperar a ver que opinaban los demás, si a finales de los 70 toman impulso una pléyade de grupos la mar de interesantes con la sana intención, no tan sana, de dar una patada en el culo al meloso rock que se ejecutaba en las oficinas de las grandes compañías.
 Si a una cierta edad no existe rebeldía y ganas de quemarlo todo, ¿ cuándo entonces…?, cuando el tobogán de la vida te llena de letras por pagar, eres un miserable en busca de tu destino y acomodo para tu cuerpo, el sistema te absorbe y hallas, a duras penas, tierra en la que hacer un hueco, te conviertes en un insecto de orden neuróptero, te camuflas para hacer trampas y sellar tu suerte, en la paciencia de que algo caerá al interior del agujero que has realizado en tu alma y poder subsistir de él.
 El rock, ese bendito predicamento que algunos hemos llevado a cuestas como la cocha del caracol, compuesta por la mayoría de sustancias minerales y que de paso nos proteja de inclemencias varias durante el trayecto que nuestro cuerpo, como correa transmisora que es de nuestra vida, nos la alargue cuanto pueda para beneficio propio.
 Hasta que te das de bruces con una banda de aquí te pillo y aquí te mato. Te líquido: rápido y conciso, rock de canciones cortas, divertidas, pegadizas si eres capaz de absorber en un par de minutos contenido y sustancia. Simples hasta la extenuación, The Ramones, no sabes así a primera vista, si tomártelos en serio, sobre todo cuando eres joven y aún conservas en tu cerebro la capacidad de sorpresa inmediata. Pero si puedes abrir los ojos como platos, es que es muy posible que te halles ante un nuevo descubrimiento, otro grupo que con el paso de los años, lustros, décadas, formará parte de la epidermis de tu ser.



Blitzrieg Bop




 En realidad ninguno de ellos se llamaba Ramón. Se llamaban Joey, Johnny, Dee Dee y Tommy, pero pensaron que era una buena idea hacer ver que todos ellos se llamaban igual. Así, demostrarían que eran como hermanos, que estaban de acuerdo en todo y que les gustaban las mismas cosas… Y su historia empezó en su barrio de Nueva York… llamado Queens…


 Los bajos de Aurrerá.-  Madrid a finales de la década de los 70 no eran Nueva York, pero iba camino de producirse una transformación de tal magnitud que en pocos años ahí estábamos. Desde luego Argüelles no era el Queens, sólo faltaba… Yo me inmiscuía algún viernes y sábado noche por los bajos de la calle Andrés Mellado, a fin de cuentas era mi destino natural si quería escuchar música, rock and roll atronador por los altavoces de los muchos garitos que por allí estaban ubicados. Cada uno tenía su fauna nocturna, su “gente”, y aunque el casi medio centenar de pubs parecían semejantes, nada de nada. Como mi persona se encontraba viviendo relativamente cerca, en la calla Donoso Cortés y a la Facultad iba en bicicleta, de chica para más señas, de una prima 2ª mía, todo lo demás lo realizaba caminando. Aurrerá era el sitio. Los Ramones, junto a la pléyade de grupos que por allí podía escuchar daban para pasar largas horas acompañado de escasas cervezas dado el presupuesto; pasados las semanas escogí un sitio y me hice amigo del que pinchaba. No por nada en especial, sino para dar lustre al asunto hablábamos de música, revistas, etc., y a poquitos me dejaba entrar con él en la cabina de disjokey, pasar el rato y no pagar ninguna Heineken que se posaba en la jamba de la ventanilla de trabajo.
 Como mi mundo era dicotómico, me podía pasar horas escuchando a Rory Gallagher, Stones, Led Zeppelin, Dylan… me abrí definitivamente a The Ramones, Dr. Feelgood, New York Dolls, Blondie, Flaming Groovies, Eddie & The Hot Rods… Podía aparecer por la cabina de mi nuevo amigo con ejemplares de Star, Disco Exprés, Vibraciones y Rolling Stone en edición americana, y en el colmo del narcisismo con ejemplares mensuales atrasados de New Musical Express que mi prima me traía del Corte Inglés de Princesa, donde llevaba más de 2 años trabajando. Y es que yo por aquel entonces, vivía en casa de sus padres, con ella y otros 2 hermanos… Y así fui introduciéndome en el punk y la nueva ola que se daba en las islas británicas y Estados Unidos, no sólo reseñas en papel, sino en los discos que escuchaba y en la radio, Radio – 3 y El Búho, por las ondas.  Lo que sucedía a mi alrededor, o sea Madrid, lo observaba atónito con mis ojos a diario, callejeando. Mi dicotomía se disuadía en clase donde estaba a lo que debía; la calle, a diferencia de cierto sector conservador del país, no sólo era mía, era de todos…
 Portada en blanco y negro, 4 tipos feos con flequillo, acordes mínimos, colocados sobre una tapia de un callejón cualquiera, Nueva York, que siempre me ha fascinado hasta los excrementos de los chuchos, sus calles, sus avenidas, su luz, sus inviernos, sus noches calurosas de verano, Manhantam, Queens, Brooklyn… Las ciudades con grandes grietas en su entramado social tienden a hacer avanzar un cierto tipo de rock and roll, el más salvaje e ingenioso que late bajo su subsuelo. Cuanto más grandes sean las fundidas fracturas, más aumentan las posibilidades para que brote el arte que pueda acrecentar un cisma de acervo cultural como lava de intenciones para asolar y deshacer convenciones.
 La segunda mitad de la década de los 70 en España fueron una época confusa y cambiante. El rock, como tantas otras cosas, se abría paso con fuerza. Ese ruido endiablado más propio de salvajes que de personas de bien afines al régimen, a la moral y las buenas costumbres, empezaba a penetrar con fuerza en las capas más dúctiles de la sociedad, los jóvenes. Ahí estaba yo, ahí... entre la maraña de grupos, solistas y demás, y la patrulla urbana de The Ramones. Eran viscerales y pasionales. O sí o no. Nada de sutilezas. Antes, mucho antes de que vieras una camiseta diaria con el anagrama del grupo, tú, los escuchastes en los bajos de Aurrerá.



I Wanna Be Your Boyfriend



THE RAMONES .- Abril de 1976 .- 
 ¡ Joder ! Ni siquiera llegan a 30 minutos de duración en este disco. No te das ni cuenta y ya debes de cambiar de cara. Minimización del riff, muro de guitarras de las catacumbas de Manhattan, 14 canciones, qué digo: píldoras, viñetas desquiciadas  para amar instantáneamente a sus autores, esencial Lp para diseñar la inminente rebelión de los imperdibles.
 La tribal  Blitzrieg Bop, la sofisticación, según ellos, claro, de I Wanna Be Your Boyfriend, la cazurrería de Chain Saw, Now I Wanna Sniff Some Glue ( es más largo el título de la canción que lo que dura ), Laudmouth, Listen To The Heart… la palpitación de Beat On The Brat, la maravilla que consolida su sonido: Let´s Dance.
 The Ramones descoloca y desplaza los parámetros hasta ahora conocidos para el rock, su primitivismo asusta. Convierten el CBGB en un laboratorio experimental de sonido, desinfectan las alcantarillas y se hacen con una cohorte de seguidores que desean el maná de la simpleza, de pocas ideas pero concisas, hipersensibilidad eléctrica urbana como una de las formas más extremas de entender y ejecutar el rock.





Let´s Dance


 Justo en el momento en que el rock se había vuelto un poquito aburrido. Los chicos y chicas más jóvenes no se lo pasaban especialmente bien, ya que los grupos más famosos de la época hacían canciones muy largas, muy difíciles de tocar, pensadas para ser escuchadas pero muy complicadas de bailar y cantar.
 Justo entonces, como te digo, aparecieron estos chavales. Se fueron conociendo en el instituto y en las calles de su barrio, y decidieron formar un grupo. Primero tres de ellos, y tras unos conciertos un poco desastrosos, se apuntó Tommy, el único que sabía tocar un instrumento, la batería.



 La fotografía.-  A mí siempre me impactó las fotos de los Ramones, no sólo las portadas, sino todo lo interior y exterior de los álbumes y reportajes sobre el combo neoyorquino. La cuestión es de una simpleza que aplasta. Difícil de conseguir que los 4 miembros posaran, pasaban del asunto. Estamos todavía en una época, no digo en 1974 cuando se formaron, sino cuando ya comienzan a publicar Lps a mediados de la década de los 70, muy alejados aún de los parámetros mediáticos actuales.
 Roberta Bayley, la chica de la puerta del CBGB que contó durante años con su cámara lo que acontecía en semejante antro, tanto fuera como encima del escenario, se llevó el alma de The Ramones en una instantánea, la que aportó a su primer disco. Sin saberlo, estas cosas nunca se saben, hizo una de las portadas más icónicas del rock. Nadie como ella para atrapar la esencia callejera del grupo, desafiante en su identidad visual, conseguía algo complicado: autenticidad,  termino tan manoseado pero que se llevaba el anillo al dedo correcto en cuanto a los Ramones se refiere; la vuelta a las raíces primigenias del rock and roll, fotos en blanco y negro, pantalones vaqueros estrechos, zapatillas de deporte, melenas desenvueltas, tal cual estaban por las calles y en los antros. Nada de pose, hasta las camisetas, las t-shirts, con los motivos más banales, nada de proclamas complicadas.
 Aparecen en portadas como la revista Punk, como personajes de historietas y en ese entrecruce de calles, captan la esencia de los Ramones, donde su hábitat natural son los callejones adyacentes al CBGB y aledaños.
 Pocos grupos son tan lineales como los neoyorkinos, las cargas de profundidad se alojaran en los más inverosímiles lugares de los temas, extendiendo la verosimilitud en las ráfagas fugaces de los riffs de Johnny Ramone, extractados en retorcidas amplificaciones de sus primeros discos: The Ramones, Leave Home o Rocket To Russia.



Swallow My Pride



LEAVE HOME .- Enero de 1977.-

 Algunos matices, Thomas Erdélyi (Tommy Ramone), aparece con su nombre de verdad, el único que tiene idea de tocar en estos momentos, cambio de productor: Tony Bongiovi, que producía a Gloria Gaynor y donde el batería ramone había trabajado. Aparece en la contraportada del Lp  el logotipo del águila imperial americana con el nombre de los 4 miembros de The Ramones.
 Las claras influencias de los 50 están desparramados por todos los surcos del disco. Otra vez 14 pildoras. Temas destacados: California Sun ( The Rivieras ), sonido directo y guitarras definidas; el tema de las relaciones con las chicas: Glad To See You Go; personajes extraídos de películas de los años 30, Pinhead donde aparece el famoso grito de Gabba Gabba Hey. Clásicos que forman su muro de sonido para los restos: Now I Wanna Be A Good Boy, Commando, Gimmie Gimmie Shock Treatment, algún matiz : Whats Your Game y alguna polémica : Carbona Not Glute.


 Al principio no les hicieron mucho caso. Algunos, cuando veían la portada de su primer disco, en blanco y negro, apoyados en una pared y con aires de ser poco simpáticos, decidían comprarse otro disco. Otros, lo escuchaban, opinaban que era trampa: ¡todas las canciones eran la misma ! Pero cada vez más, quien se detenía a escucharlo con calma se daba cuenta de que sabían lo que hacían, que de una manera muy sencilla y fácil de entender, estaban tomando cosas de canciones muy populares más antiguas y cambiándolas hasta lograr que parecieran diferentes.



Teenage Lobotomy


A veces el tren equivocado te lleva a la estación deseada.-  Como si estuvieses en un vagón de metro, mientras observabas al personal con una cerveza en la mano y a poder ser sentado en una especie de escalón junto a unas gradas, en parte para resguardarte de los envites del resto de los homínidos, que en algún arrebato en forma de manadas se te aproximaban dando saltos y girando como peonzas sobre sí mismos al calor del amor de un bar, y de los muchos litros de alcohol, escuchabas a The Ramones, The Clash, The Damned, New York Dolls… entre el humo de hachís y resguardando de que te estropearan tus zapatillas intentando no pisar el suelo enfangado de cerveza seca y pegajosa que se te adhería en las suelas… solías pasar muchos viernes a la noche y tal vez, según el humor, compromisos y cuestión crematística, el sábado, difícil repetir dos jornadas en el mismo garito si no subías a la cabina de disjokey y te instalabas.
 La Vía Lactea en Malasaña, era otro lugar donde pernoctar y echarse unas partidas al billar americano mientras por los altavoces sonaba a toda pastilla rock, cuando eran The Ramones reduciendo a su mínima expresión su mezcla de tonadas pop y la contundencia de su básico rock, puede que parte de tu integridad física pudiese sufrir algún desperfecto.
 Este submundo callejero noctívago, reunido en torno a unas copas y rock and roll, era el mundo del grupo del que escribo. Personajes salidos de todas las tiras cómicas imaginables, tejanos rotos por las rodillas y gastados, cuanto más lavados llevase, mejor, diálogos onomatopéyicos, zapatillas deportivas y a baliar el Rock To Russia.
 La efectividad con que The Ramones llevan su carrera es un caso único, quizás hasta llegar al 6º Lp, Pleasant Dreams – 1981, es la mejor, en parte basada en esa inagotable vitalidad juvenil, adolescente, rabiosa, y claro, el factor sorpresa, nadie en su sano juicio era capaz de asimilar al grupo dado sus escalones tan simples, tan llanos, no podía ser que a mediados de los 70 una banda tan limitada técnicamente fuese capaz de desarrollar un rock and roll tan de la década de los 50 y ser escuchados y respetados entre ciertas emisoras de radio, ser portada de revistas underground y años después en la entronizada Rolling Stoneñ; en 1977 eran taxativamente innovadores, el periodo que abarca de 1976 – 1980, es una aceleración continua para el rock, por sus nuevas formas de inferir, provocar y entenderlo.
 Por si fuera poco y viniesen de una década anterior, los 60, sacan 2 Lps en el mismo año.



Surfin´Bird




ROCKET TO RUSSIA.- Noviembre de 1977.-
 Parecen abonados a los 14 temas, y no, no es la misma portada que Ramones – 1976, pero si estuviese realizada en la misma sesión tampoco rompería esquemas. Curiosamente es uno de los Lps más aclamados de los de Queens e incluso, ¡sorpresa! Se coloca en las listas americanas, cosa absolutamente excepcional pues el grupo tiene su mayor aceptación en Europa que en el circuito yanqui.
 No olvidar de donde provienen es una de sus máximas, ellos que rayan el autismo y en el caso de Joey un trastorno compulsivo obsesivo, Cretin Hop abre el cotarro con un claro homenaje a sus seguidores en el CBGB. Himnos que quedan para la posterioridad, la magnífica Rockaway Party, nunca ocultaron sus sueños de surfistas, las playas, las chicas y la influencia de los Beach Boys. La tónica general son los rocks enérgicos, una de las máximas del punk: Locket Love, I Dont´ Care. Esta 1ª cara nos deja temas de los más coreados en los shows, me refiero a la peleona Shenna Is A Punk Rocker y ese estribillo Hey Ho Let’s Go. Para demostrar su lado punk nada mejor que destrozar en una letra irónica y machacona a la familia media americana, We´re A Happy Family, con la que dan carpetazo a la cara A.
 Temas tranquilos, parece mentira pero es cierto, Here Today, Gone Tomorrow es lo más cerca que nunca jamás The Romanes están de realizar una balada.
 Lobotizados, gritos mientras Joey sujeta el micro y lanza su mano izquierda al aire en los conciertos y acometen Teenage Lobotomy, el cantante aúlla por encima de los tambores de Tommy: Lobotomy. Abre la cara B. Rockanlean en Do You Wanna Dance? , tema compuesto por Bobby Freeman; I Can´t Give You Anything, Ramona.  Nos dejan otro tema inmortal: I Wanna Be Well, excelente para meter en los shows y “descansar”. La versión de The Trashmen de Surfin´Bird es una locura y maravilla de paso, cierran con una canción que es una provocación, te están llamado con ese monótono Hey –hey –hey de Joey, me refiero a Why Is It Always This Way?.



Rockaway Beach


 Todo va muy rápido.- Trato de meterme en la piel de aquel muchacho que era a finales de la década de los 70, e ir asimilando los muchos procesos creativos a los que era sometido, no sólo en cuanto al rock, que ha formado parte de mi vida desde la tierna infancia, sino en los distintos procesos de desarrollo como ser humano. No es el único, claro, hay más. Pero todo va muy rápido: opciones políticas en un país paleto de pandereta y folklore rancio y muy mal entendido, donde se mezclan churras con merinas y chorizo con salmón; parece como si a cada momento hubiese que tomar partido y eso no es lo peor, que si te decantas por un lado obvias el otro, y a mí, algo fronterizo toda mi vida, mira tú por donde, en la música siempre he estado centrado, en el término de que podía escuchar a Aerosmith y Sex Pistols al mismo tiempo y cambiando un disco de unos y de otros en la misma sesión. No existía ninguna dicotomía intelectual, era rock y como el arroz, si te apetece la paella cada uno la hace como sabe y quiere y si está buena, exquisita sabrá en tu paladar independientemente de los ingredientes empleados por unos y por otros.
 La discografía de los Ramones no me hice con ella, o parte de la misma, al mismo tiempo que se iban publicando sus Lps. Fueron entrados los años 80 cuando iba escogiendo un disco y meses después caería otro. Con la perspectiva que te da el tiempo, que es inexorable, y pone cada cosa en su sitio, escucharte de nuevo los álbumes de los neoyorkinos sigue siendo un chute de adrenalina sana a tu mente, no sé si a tu cuerpo, pero tomada a pequeñas raciones, es estimulante.
 Si encuadramos a los Ramones en el término del punk, que es mucho encuadrar la verdad, bien… pues es uno de los géneros musicales que te hace tomar conciencia de la rapidez y velocidad en que se desarrollan las cosas en el mundo de la música. Si estamos a finales de la década de los 70, el margen de movimientos y tendencias que existen cambian de un día para otro casi sin darte ni cuenta. Apenas están los Sex Pistols,  The Jam, The Clash, Buzzcocks… eso por lo que respecta a Inglaterra. En el mismo saco de The Ramones, todo el que se sube al escenario del CBGB se le sitúa en el mismo fardo. Pero qué va, anda que no hay diferencias entre nuestros chicos y Blondie, Television, Patti Smith Group. A lo que iba, es que a finales de la década de los 70 había una compentencia por ver quien era más extravagante, llevaba la cresta más alta y ahora de colorines: verde y naranja predominaban, al menos en Madrid. Pero en un chasquido de dedos del croupier, se cambían las fichas en un visto y no visto y ya asoma la new wave, el techo-pop, new romantics... Así pues centrados, para no descarrillar demasiado y que los aires de uno y de otro lado no te hicieran perder el pie y darte de buces contra el asfalto.
 The Ramones que para mí tienen un antecedente claro: New York Dolls, y 2 Lps de sus paisanos: New York Dolls – 1973  y Too Much Too Soon – 1974, son claras referencias, de donde unos acaban (aparcan momentáneamente su carrera luego reiniciada en la 1ª década del siglo XXI) y del comienzo de éstos. Si unos se perdieron en el mundo de las drogas, a los otros les iba la marcha anfetamínica y su catarsis quinceañera permanentemente.
 Examinando esta época de The Ramones, una de las más creativas y efectivas, esa efectivad basada en la inimitable vitalidad de la adolescencia y el factor sorpresa, quedó reflejado en un estupendo doble Lp en directo, nada menos que 28 temas. Si en los álbumes ordinarios salían a 14 canciones por disco, tiene su lógica que en este par en vivo, duplique el asunto. It´s Alive, grabado en la Nochevieja de 1977 en el Rainbow Teatre de Londres, resume perfectamente las cualidades de los 4 componentes del grupo y de paso pone punto y final al año, en el que el punk estuvo en boca de todos, desde medios especializados a otros mediáticos que nada tenían que ver con el mundo del rock, se hicieron eco de semejante movimiento musical y social.
 Los de Queens publicarían el doble Lp en abril de 1979 y sería el último en el que participa Tommy a la batería, siendo sustituido por Mark Bell ( Marky Ramone ), mientras el primigenio se dedicaría a las labores de producción hasta el final de sus días. El título del disco, It´s Alive, está cogido de una película de terror del año 1974, de Larry Cohen, una especie de engendro de la naturaleza, que yo no recuerdo haber visto. El álbum incluye los temas imprescindibles de su primera etapa y la originalidad del directo radica en que está grabado de un tirón, sin cortes, tal y como son The Ramones en sus conciertos, lo cual a la larga acabó siendo un acierto. Las 4 caras son una carga anfetamínica y como anécdota, recalar como Joey felicita el año nuevo al comienzo de la cara D. It´s Alive recoge no sólo el momento álgido del movimiento punk en directo, es uno de los grandes discos el rock and roll en general.



 Casi sin darse cuenta, se convirtieron en uno de los grupos más populares en su país, y cuando cruzaron el mar para actuar en Europa lograron que muchas bandas empezaran a querer ser como ellos.



I Don´t Care




ROAD TO RUIN .- Septiembre de 1978 .-
 En este disco hay un cierto pose de maduración, como que se nota un poco más de poso, de ciertas garantías de que su primigenio rock and roll va tomando forma y dotan a sus canciones de más nivel. Reducen a 12 temas el asunto y es el 1º con Marky en la batería. Curiosamente, su antiguo compañero es quien volviendo a sus orígenes, les produce el álbum, eso sí, con su nombre verdadero: Tommy Erdelyi.
 Sin sobre pasar mucho más de los 2 minutos cada canción, no vaya a ser que nos vayamos a hacer alardes técnicos, nos encontramos con piezas más depuradas, Don´t Come Close, Needles & Pins, Questioningly;  rock and roll ramoniano de siempre, es decir desde 1976 para acá: I Just Want To Have Someting To Do, I Wanted Everything, I Don´t  Want You, I´m Against It, I Wanna Be Sedated ( que jamás faltaría en sus directos convirtiéndose en otro himno ramoniano con el tiempo ).
 La portada, que siempre me ha gustado mucho, con esas zapatillas portentosas, sus peinados característicos, los vaqueros pitillo y rotos, The Ramones como seres de comics, es realizada por quien primero intuyó que serían un grupo que marcaría época, el editor John Holmstrom, de la revista Punk.





Needles & Pins


Se vende libertad por metros cuadrados.- No era un mal sitio, situada al lado del mar podías observas a los escasos bañistas que se daban un remojón o tumbados en la arena tomando el sol. Desde la atalaya de su ventana podías tomar un café, o unas cañas con aperitivo o algún Martini, rojo, claro y echabas una hojeada a las páginas del periódico mientras por el viejo jukebox sonaban canciones de rock and roll añejo.
 En el barrio de pescadores, un sábado a la mañana, te bajaste al viejo malecón, y pitillo en mano leías la crónica del concierto de The Ramones en la Plaza de Vista Alegre en Madrid, 1ª actuación de los neoyorkinos en la capital del reino. Con el olor al mar Mediterráneo de fondo, con unos chavales jugando al fútbol en la Playa de Zapillo, te encontrabas tranquilo y añorando no poder estar donde rezaba el título del diario: Trece mil personas aclamaron el "rock" agresivo de Los Ramones. No sabía que los del barrio de Queens pudieran aglutinar a tanto personal, pero la novedad y las nuevas fronteras y hambre de libertad que tenía el país, o sea, España, daba para esto y más; ellos que apenas congregaban a 300 almas en cada actuación en Estados Unidos y en garitos de 2º nivel. Pues bien, al grito de  Hey Ho Les´t Go  y abriendo con Blitzkrieg Bop caldean el ambiente como las calderas del infierno. Desde luego, alguien rentabiliza beneficios, se vende libertad por metros cuadrados.
 Si Road To Ruin coloca al cuarteto en el nivel superior, aunque todo hay que decirlo jamás serán una gloria nacional en USA, es en Europa donde la legión de seguidores se irá incrementando a medida que sus tours les traen por aquí. Su rock rudimentario y sucio, de calidad técnica limitada, pero sincera, al menos tratan de mejorar con éste último disco, lleno de matices, sin olvidar que The Ramones vienen de Queens, del punk, que las calles les sostienen, que habitan en pisos de hormigón prefabricado, que la mayoría de sus amigos están en paro y sin perspectiva de nada, que eso de la escuela está bien para un rato y desde luego el ejemplo de sus padres, tampoco les encaja mucho, la verdad.
 Todos los músicos o grupos que han triunfado, a estas alturas de los comienzos de la década de los 80, poco o nada tenían que ver con tu mundo. Escaso de presupuesto y lleno de ideas, las estrellas del rock que admirabas hasta ahora no te alimentaban con tu existencia diaria. Un chaval de clase media con problemas económicos para darse unas vueltas el fin de semana, nada podía ver de semejanza en Mick Jagger o Rod Stewart, y la rebeldía de Keith Richard´s, ejem… con un cuadro de abogados para sacar a este patán de sus muchas meteduras de pata. Así pues, considerando que el rock debe de ser algo asequible y no un privilegio de unos pocos, al margen de excelentes equipos de música y de luces y de los excesos técnicos, grupos como The Ramones recuperaron algo esencial en todo este asunto: “ el espíritu “, hartos de gritar de que no querían vivir en un mundo tan mezquino, y es que, te da la impresión, de que la gente se escandaliza en cuanto cree que algo puede poner en peligro su seguridad.


   Les llamaron para hacer una película, actuaron sin parar y, cuando ya llevaban varios discos publicados, quisieron hacer algo distinto. Para eso hablaron con un señor que había logrado que los Rolling Stones sonaran mejor que nunca, para que les ayudara a cambiar un poco sus canciones. Phil Spector, que así se llamaba el caballero, les hizo tocar como siempre, pero un poco más lento y les puso violines acompañando a la voz de Joey.




Do You Remember Rock N Roll Radio?



END OF THE CENTURY .- Febrero de 1980.-
 Tiene su miga el asunto. Para empezar y en lo que a mí respecta, el disco en cuestión lo compré en un supermercado, sí, de esos que acuden en manadas familias enteras, tipo Ñues cruzando las ciénagas del Serengueti y atravesando ríos caudalosos ante las fauces de los cocodrilos. Bien, se pueden observar varias cosas entretenidas en estos tugurios. Echar una ojeada a las estanterías de discos y libros es para mí un pasatiempo, a veces, sólo a veces, se consiguen objetos a precio de saldo y nuevos. Eso sí, paciencia, y mucha.
 El excéntrico de Phil Spector ejerce de productor, alguien totalmente ajeno del mundo del que provienen los Ramones. En un intento de alcanzar un hit, están en su derecho, colocan piano y órgano, saxo y voz de disc jokey en el tema que abre el trabajo: Do You Remember Rock N Radio?; las sesiones de grabación son muy jodidas, es que lo cuentan ellos mismos en el documental que publicarían posteriormente bajo el mismo título que el Lp. Hasta extremos de, pistola en mano de Spector, obligar a Dee Dee durante 8 horas, a realizar perfecto el acople de la canción citada. Si a eso unimos las múltiples paranoias de los componentes del grupo de Queens… no hace falta echarle mucha imaginación. Eso sí, queda un disco completito, intento de sacar un poco el pie de las alforjas y dar el salto a la 1ª división, vano intento, pero oigan, intento de avanzar.
 El trabajo es una entrega absoluta al rock n roll: Do You Remember Rock N Radio?, pone los dientes largos. Hay más, a saber : I´m Afected, Chinese Rock, Let´s Go,This Ain´t Havana, Rock N Roll High School.
 Cierta sofisticación en lo que empieza siendo una balada y luego toma cierta carrerilla: Danny Says. Violines, sí… tema excelente para colocarlo en la mañana y descorrer los visillos de tu ventana y observar que hace un día maravilloso: sol, luz, alegría, vida. Me refiero a Baby, I Love You; The Ramones buscan nuevos horizontes, caminos y senderos que les acerquen al pop más sofisticado. También son capaces ellos cuando se lo proponen.
 End Of The Century  hay canciones que pasan de los 3 minutos, aunque la media está en los 2.30. No deja de ser una novedad, desde luego impuesta por Phil Spector, buscador de hits. Buen disco, sin perder el prototipo ni la marca original, The Ramones nos descubren los senderos del pop y el rock and roll clásico, por ahora se abonan a los 12 temas por álbum.


Rock N Roll High School



En directo seguían siendo igual de rápidos y ruidosos, claro, y sus conciertos siempre estaban llenos de un público que les aplaudía muchísimo. Al marcha de Dee Dee fue cubierta por JC, aunque si alguien no les conocía demasiado bien no se daba cuenta, ya que sus ropas eran idénticas y sus melenas parecidas, aunque JC era más joven.



Cabezones.-  En el disco anterior, End Of The Century, quedó claro que la nueva dirección a la que Joey quería llevar a The Ramones era el pop luminoso, cuestión que el resto del grupo no sólo no estaba de acuerdo, sino que llegaba a odiar y ahí, en parte radica la primera clara escisión del grupo. Más allá de paranoias múltiples de los componentes, novias que te quito, alguna droga mal dirigida y evacuada por los canales naturales; ese alejamiento consciente y consentido a fin de cuentas del punk de sus inicios, hasta el punto que Dee Dee reconoce que la publicación del Lp fuese el alejamiento paulatino entre ellos y el germen principal de la separación.
 De hecho End Of The Century no alcanzó ese paso definitivo que les encumbrara entre las grandes bandas, ese cartucho se quemó con la producción de Phil Spector, y aunque el Lp es muy bueno, no les llevó al podio. A saber, los imperdibles de la reina nos dejaron un reguero de grupos y de discos excelentes, desde el inicio de The Clash con su álbum del mismo título o London Calling; The Jam con In The City o la enorme rentabilidad que sacaron Sex Pistols, más bien su mánager, Malcolm McLaren, a singles como Anarchy In The U.K o Gov Save The Queen recogidos en su único Lp, pero imprescindible para saber el salto que da el rock a finales de los 70: Never Mind The Bollcks Here´s.
 The Ramones lo intentan pero no sale, lejos de acercarse a esos parámetros o mejor sería decir, regresar a ellos, insisten con Pleasant Dreams – 1981, un descafeinado disco pop, con algunas canciones destacables desde luego, en los parámetros ramonianos tales como You Sound Like Yoa´re Sick o It´s No My Place. Menos mal que entre medias de éste Lp y el Final del Siglo tenemos al incombustible It´s Alive. Existe una cierta rectificación en forma de regreso a las raíces, conscientes de que jamás serán un grupo de élite, más bien unos currantes del shows bisnes, aglutinaran un buen número de seguidores en cada concierto, pero ya saben dónde les coloca su rock. Subterranean Jungle les devuelve a los parámetros que no debieron de perder, ¡ojo! Insisto en el buen intento que es End Of The Century, pero sin el productor adecuado y canciones concisas, es mejor que abandonen el camino del pop y regresen a los sonidos de comienzos de la década de los 70, a portadas que aunque sean en color, reflejen el ambiente cotidiano en el que se desenvuelven The Ramones: metro neoyorkino con todo los grafitis necesarios.




Time Has Come Today




SUBTERRANEAN JUNGLE .- Febrero de 1983.- 
 De nuevo 12 canciones, la mayor parte de los mismos compuestos  por Dee Dee Ramone, algunas versiones, 3 para ser exactos: Little Bit O' Soul, que abre el asunto e I Need Your Love y Time Has Come Today. También supone la despedida de Marky Ramone, problemas múltiples le alejan del grupo y en la portada, (algo que ya acontecía en el Pendulum de CCR, con Tom Fogerty ) aparece en una ventana del vagón de metro alejado de sus compañeros, muestra inequívoca de que aquello no va con él.
 Al asunto. Si las 2 canciones iniciales son adaptaciones, se supone de que no tenían suficiente confianza para llevar los originales a la cabecera. Un Lp marca mucho los primeros temas con los que el oyente se sienta a escucharlos, marca el sendero, y desde luego la alegría y las ganas por retomar los caminos del rock primitivo al que The Ramones nos tenían acostumbrados se ven claramente salvaguardados en Little Bit O´Soul e I Need Yoor Love. Sin pasar a la gloria como grandes compositores, Dee Dee Ramone se echa a la espalda la mayor parte del trabajo de composición, y si en las 2 citadas anteriormente con la que abren el álbum, son ajenas, Outsider inicia el camino propio, rock and roll en la línea de los de Queens de toda la vida. Senderos semejantes en lo que propone Joey Ramone en What´d Ya Da?. Algo similar ocurre en Somerbody Like Me, donde hasta hay un intento de solo de guitarra. In The Park, Time Bomb y Everytime I Eat Vegetables It Makes Methink Of You completan el asunto caracteristico del grupo.
 Recurren a los sonidos subterráneos de los que son unos maestros, no hacen la goma, van al meollo de su sonido en Psycho Therepy, de lo más destacado del trabajo en cuestión, curiosamente la 1ª aportación de Johnny a la composición aunque sea a medias con Dee Dee. Curiosidades al margen, se marcan un rock duro, poderoso, hasta Joey fuerza mucho más de lo acostumbrado en Time Has Come Today, donde lo que más aprecio es la contundencia de la batería a cargo de Billy Rogers, le da otro aire. En este apartado podría apuntar también a My-My Kind Of A Girl, un medio tempo interesante.
 Subterraneam Jungle está en el cajón de discos de The Ramones de banda clásica, aquella donde sin hacer una obra maestra, supera a la anterior y es inferior a la antepenúltima, pero mantiene la llama pese a los problemas que en estos momentos atraviesa el grupo, están tirando de sensatez y calidad escénica, aquella que aunque te duela algo todavía eres capaz de hacer un Lp consistente y llevadero, digno del nombre que lo firma.

Músicos adicionales


Little Bit O´Soul



Las grietas de la ciudad te absorven.-  Las cosas iban cambiando a un ritmo vertiginoso. A veces las oquedades del asfalto te hacían trastabillar, en otras, las numerosas calles te absorbían para convertirte en la nada que todos somos. Instalado de nuevo en la gran metrópoli tras unos largos meses de vida mesetaria y pueblerina, hasta The Ramones perdían el norte de su rock callejero. No sus pintas ni su edulcorada actitud ante la música, pero tras la publicación de Subterranean Jungle consiguieron hilvanar otro trabajo de enjundia, este francamente bueno : Too Tough To Die – 1984; pero luego descarriaron en cuanto a producción discográfica. Apenas 2 Lps dignos de llevarse al oído, a saber: Mondo Bizarro – 1992 y Adiós Amigos – 1995.
 Lejos ya del mundanal ruido de los bajos de Aurrera donde acudirás muy de vez en cuando a seguir escuchando a los muchos grupos que cada noche colocan en los platos y suenan en los altavoces, sin el disjokey amigo de antaño, ahora tus huesos suelen dormir a algún kilómetro de allí, en la Plaza de Olavide, en un 4º sin ascensor, cerca de las palomas que anidan en las jambas de tus ventanas a la luz del sol, que se han acostumbrado a escuchar música cada día y apenas se mueven cuando les golpeas los cristales y tienes que echarlas, literalmente, cuando con un estropajo limpias alrededor de donde aposentan sus reales.
 The Ramones siguen a pico y pala en esto que consideran la razón de su existencia, con la inspiración que tenían y que le aportaba la gran manzana, Nueva York, reduciendo a su mínima expresión sus tonadas. No habían cambiado mucho desde 1974 hasta mediados los 80; sus camisetas y vaqueros raídos, sus cazadoras vaqueras, sus pintas de urbanitas pobres y desangelados, no les hicieron perder el norte porque sus ventas de Lps eran escasas, sus múltiples conciertos si les dieron un pedigrí que no se vería jamás reflejado en las listas de ventas. Cosas que todos los componentes ya sabían de sobra. Casi como único estandarte, Ramones no están incluidos en ninguna categoría ni forman parte de la fauna del punk en las que se les quiso meter. Sus canciones, su actitud va un poco de inclasificable y eso no les ayuda  mucho, pero no pueden cambiarlo. Con unos Sex Pistols que son una tragicomedia, Malcolm MacLaren un pirata ventrílocuo, las barricadas de The Clash, cosa seria éstos, el curso del 77 iba entrando por el aro y una nueva generación era absorbida por las discográficas, que eran capaces de canalizar toda la rabia juvenil en un esperpento materialista.
 Al menos ahora, pasado el movimiento hippy, la contracultura, los nuevos grupos, la camada surgida a finales de la década de los 70 nos dejaba canciones cortas y directas, algunas muy potentes; ropa desgarrada, diseños cuando menos provocativos y desencajados y el último intento serio de cambiar algo.
 The Ramones tras la publicación en 1983 de Subterranean Jungle, último top – 100 del grupo, Marky abandona las baquetas del cuarteto y es reemplazado por un tal Richard Beau según consta en los créditos del siguiente álbum, Too Tough To Die – 1984, iniciando un claro descenso en cuanto a calidad discográfica con todos los trabajos que fueron publicando a lo largo de la década de los 80. Ni Animal Boy – 1986, ni Halfway To Sanity – 1987 lograran reverdecer viejos laureles. A todo esto, como suele ocurrir en la familias, buenas y malas, recopilatorio al canto por aquello de hacer caja, Ramonestamanía – 1989.
 Donde jamás defraudaban eran sus directos. La armonía que mantenían en Europa y especialmente con España erán superiores, sus tours dejaban varias fechas en la Península. Por fin consigues verlos y bailar al son de su primitivo rock a comienzos de 1989, su sonido en vivo de todas las canciones de Ramones puede antojarse muy parecido a quienes no las han escuchado previamente, pero los estribillos son claros y la virtud principal del grupo ha de buscarse en su fuerza comunicativa escalofriante. Sus canticos urbanos nos han cambiado, con todo el papel vendido las apuestas circulaban en el deje de si serían capaces de tocar 30 temas en 10 minutos.




Howling At The Moon 


TOO TOUGH TO DIE.- Octubre de 1984 .-

 El 8º disco de The Ramones tiene un título dedicado a Johnny que estuvo una larga temporada en el hospital a causa de las heridas producidas en una pelea a altas horas de la madrugada con un punk llamado Macklin, de ahí el demasiado duro para morir. Al margen de estas controversias, les paró la gira que estaban efectuando por Estados Unidos que llevaban 5 meses ininterrumpidos, y lo más curioso es que se produce en su barrio, Queens; el guitarrista sufre una fuerte conmoción cerebral y una fractura del cráneo que requirió de cirugía.
 Este incidente acontecido en agosto de 1983, hizo que el grupo no regresase a la carretera hasta diciembre y desde luego en muy buena armonía, cuestión que duró durante el resto del año. Incluso el acoplamiento de su nuevo batería, Richie, el regreso de Tommy para la producción, quien mejor les conocía, no en vano era el 4º miembro original de la banda, hizo que los hados y estrellas se pusieran de acuerdo en dejarnos uno de los mejores Lps de los Ramones.
 No hay tregua en los primeros temas, como si quisieran decir “aquí estamos, no nos hemos ido y seguimos tocando lo de siempre”. Mama´s  Boy, I´m Not Afraid Of Life ( algo más contenidos ), To Tough To Die ( que además da título al Lp), Durango 95 (instrumental ) y Warg Hog ( con Dee Dee en la voz),  no dejan silla en pie ni taburete en vertical.
 Rock and roll sincero es lo que escucho en Chasing The Night, Howling At The Moon (Sha La La ) con uso de sintetizadores muy bien acoplados al sonido Ramone y la maravillosa y bailable No Go .Daytime Dilemma coescrita a medias entre Joe Ramone y Daniel Rey, la 1ª colaboración de éste con el grupo. Y algunos giros curiosos, no escuchados en anteriores álbumes, tales como canciones que firma Dee Dee en Planet Earth 1988 y éste lleva la voz cantante en Endless Vacation, sacando su lado más chapero como si estuviese en la esquina 53 con la Tercera Avenida en Nueva York, ni los mismísimos Sex Pistols.
 Too Tough To Die es el mejor Lp de The Ramones por varias cuestiones. La 1ª es que no pierden su esencia, la acrecientan en rock and roll demoledores, giros inesperados, variedad de voz principal, a Joey le echan una mano muy correcta Dee Dee; más diversidad de composición y el uso de los teclados y sintetizadores que pudieran repeler, al revés, suman y enriquecen el producto elevando Too Tough To Die a su obra maestra. También es curioso, pero es el último disco que adquirí de The Ramones.


Joey Ramone : Voces
Johnny Ramone: Guitarra
Dee Dee Ramone: Bajo, Voces
Richie Ramone: Batería



Chasing The Night



 De acuerdo, muchas tienen cosas en común, y a ellos les gustaba tocarlas tan, tan seguidas en sus conciertos que no sabías cuando acababa una y empezaba la otra. Pero, sí escucháis los discos en casa, os daréis cuenta de que en realidad eran unos grandes compositores de canciones, capaces de tocar muy rápido, cierto, pero de conseguir que muchas de sus letras sean fáciles de recordar.


La vida en la carretera.- Se hizo algo más soportable al viajar en un autocar grande. Incluso hicieron algunos vídeos para acompañar a cuanto trabajo nuevo sacaban, cambiaron de sello discográfico y aún les recuerdo la 1ª vez que les vi en televisión a finales de la década de los 70, en Musical Exprés, que dirigía y presentaba Ángel Casas. Supongo que algún reportaje en Vibraciones y Disco Exprés apuntaló mi amistad con los Ramones y viejos Pop-Gramas ayudarían a hacerme una idea clara del grupo neoyorkino. Pero he de confesar que hasta que no los vi en directo, no tuve ningún Lp suyo.
 Probablemente tal situación se debía a que todo el mundo con el que me relacionaba tenía varios ejemplares, que los escuchaba en cualquier garito que tu cuerpo te llevase con la excusa de tomarte una copa, y que mi discográfica de The Ramones se empezó a cimentar en la década de los 90, hasta convertirse en un grupo mucho más importante de lo que parece a 1ª vista, que la verdad, ni técnica ni estéticamente gustan así de entrada.
 Pero los muchos matices de sus canciones, sus letras, algunas realmente duras, te indican que el asfalto lo han mamado, a veces incluso con sus cabezas boca abajo, y que saben de lo que hablan cuando escriben canciones para el grupo. Son capaces de evolucionar desde las primitivas Rockaway Beach, Rock And Roll High School, Sheena Is A Punk Rocker a estilos y temas más enriquecedores como Planet Earth 1988, Endless Vacation o Duramgo 95 de su disco Too Tough To Die.
 Estamos ante una gran banda que después de años de currar consiguen un autocar más cómodo para sus desplazamientos en cualquier tour americano, que desde su formación en el lejano 1974 hasta su disolución en 1996 se acercan a los 2.500 conciertos en 22 años de vida. Que pese a ser un 2º plato en Estados Unidos, Europa los acoge muy bien y de paso sus shows por Argentina y Brasil les acomodan en el primer nivel, llenando estadios de 30.000 almas para regresar a su país y patearse garitos de apenas 300 entradas, escasas ventas y muy mala la gestión del merchansing; y ellos cazurros y cabezones siguen pese a sus altas y bajas de distintos miembros, aunque agarrados al 1.90 de Joey y al mástil de la guitarra de Johnny, las salidas de CJ y Marky y los muchos, muchísimos problemas de ego, fantasía, paranoias, alcoholismo, drogadicción, falta de expectativas, el no hablarse y hasta la ideología de alguno que rayaba entre la extrema derecha y la izquierda más recalcitrante, y pese a todo eso, dejarnos un puñado de discos maravillosos, dignos de permanecer en nuestra vidas hasta el final.



Censorshit



MONDO BIZARRO .- Septiembre de 1992.-
 Con una portada un poco distorsionada, con la plena entrada de CJ Ramone pues ya sabemos que Dee Dee Ramone nunca volverá entre otras cosas porque ha fallecido, eso sí, deja unos cuantos temas para la banda, aunque a medias con Daniel Rey, Poison Heart, Strenght To Endure y Main Man. Por lo demás todos echan una mano a la hora de componer, como sabiéndose perdidos en este mundo y agarrándose al rock como medio de vida y tabla de salvación en esta tormenta cósmica. Joey y Marky Ramone componen y hasta adaptan un tema de The Doors, en principio alejado de su temario existencial, Take It As It Comes que abre la cara B.
 Realidad concisa con un soberbio rock de entrada: Censorshit, con dedicatoria incluida a Tipper Gore, sí, la mujer de Al Gore. Tranquiliza la fuerza que siguen entregando años después de su 1º Lp, las ganas que encaran en varias canciones, ya sea en The Job That Ate My Brain, Poison Heart, It´s Gonna Be Alright, Main Man, Tomorrow She Goes Away o Heidi Is A Headcase.
 Hasta Vernon Reid ( Living Colour ) mete su metralleta en Cabbies On Crack, solo esto ya es novedoso, como si al final de sus días quisieran abrirse a nuevos horizontes, ellos que tan cabezas cuadradas parecen, se marcan un soberbio álbum de punk – rock al nivel de muy poquitos, y todo eso llevando más de 2 décadas en candelero. Siguen haciendo lo que mejor saben sin perder un ápice de su autenticidad.
 Tranquiliza que a The Ramones no les falta perspectiva y en Mondo Bizarro recuperan el temple que a todas luces parecía perdido.




Poison Heart




 Cuando Joey se puso enfermo, grabaron su último disco como Ramones, que se llamó Adiós Amigos, en castellano a pesar de ser americanos. Lo hicieron porque en países como Argentina y España eran uno de los grupos más famosos que podía haber, y fue una manera de darles las gracias a todos los seguidores de esos países.



 Adiós amigos.- A estas alturas del partido The Ramones ya eran un icono y no sólo musical, sino mediático en cuanto a que 4 tipos, aunque cambiasen algunos miembros a lo largo de las 2 décadas de existencia, sino en sus atuendos de vaqueros rasgados, zapatillas de deporte, pelambreras abundantes, y lo mejor, con apenas 3 acordes crearon un sonido que iba desde el simple rock de los cincuenta al poderoso punk-rock de los setenta.
 Han sobrevivido a historias peculiares de cada uno de sus componentes, a modas, cuando ellos en sí eran todo un estilo de tocar y de vida. Ni siquiera el grunge en los 80 ni el cambo sintomático del rock durante la década que introdujo el videoclip como forma de promoción pudo con ellos. Aguantaron y muy bien en estos 22 años. Nos dejan un buen puñado de Lps, numerosas canciones y un último disco: Adiós Amigos la mar de interesante. Ya ni la ganas, ni las fuerzas físicas daban para más. Apenas unos años y todos irían desapareciendo del Planeta, no musical, sino físicamente. Como si sólo cuando estaban juntos fueran capaces de desarrollar su talento, pese a sus broncas, manías, etc.
 Siempre he sido de la opinión de que The Ramones representan a los marginados e individuos con serios problemas de ubicación en la más cruda realidad, y que el rock que emplearon no era nada más que una coartada para no ser apabullados en sus vidas cotidianas. Por supuesto, salidos de las catacumbas de Nueva York.




The Crusher




ADIÓS AMIGOS .- Julio de 1995 .- 
 Vaya vaya. Gabba Gabba Hey. Esto se acaba. Producidos por el gran guitarrista que es Daniel Rey, entre otros a dejado su buen hacer en bandas como Sour Jazz o Dictatiors; Adiós Amigos enlaza muy concretamente con Mondo Bizarro, su otro gran disco en los 90.
 Rock del de siempre, I Don´t Want To Grow Up, canción de Tom Waits ( no dejan de sorprenderme ni hasta al final ), para echar una mano en la composición también está Daniel Rey en Makin Monsters For My Friends entre otras, y en las voces CJ Ramone.  Existen más, temas que Dee Dee dejó y que el grupo aprovecha de su talento para meter varias canciones, la más pausada It´s Not For Me To Know o She Talks To Rainbows de Joey Ramone. Ametralladoras como The Crusher, claro que tampoco se muerden la lengua en Take The Pain Away, Cretin Family, Have A Nice Day o Got Alot To Say.       
 Tanto Joey como CJ se intercambian en varios temas en las voces principales.
 No está nada mal, pero que nada mal este Adiós Amigos, con 13 temas para cerrar una discografía única, personal e intransferible de un enorme grupo, mucho más complicado que lo que parece a simple escucha.
 Ellos supieron conservar todo su encanto y simpatía, y le añadieron su toque personal. Cuando las fuerzas ya no ayudaban, cerraron el grifo. Mejor morir de pie que arrastrándose en escenarios y discos insulsos. Adiós Ramones.



DISCOGRAFIA SELECCIONADA



 RAMONES .- 1976


 LEAVE HOME .- 1977


ROCKET TO RUSSIA .- 1977


 ROAD TO RUIN .- 1978


 IT´S ALIVE .- DOBLE DIRECTO .- 1979


 END THE CENTURY .- 1980                             

 SUBTERRANEAM JUNGLE .- 1983


 TOO TOUGH TO DIE .- 1984


 MONDO BIZARRO .- 1992


 ADIÓS AMIGOS .- 1995






BIBLIOGRAFIA INTERESANTE














THE RAMONES : DEMASIADO DUROS PARA MORIR (Marcelo Gobello )

















COMMANDO ( Autobiografía de Johnny Ramone )











  Jeffrey Ross Hyman ( Joey Ramone ) :  19 de Mayo de 1959 ( Nueva York ) - 15 de Abril de 2001 /( Nueva York - Estados Unidos ).-


 Douglas Glenn Colvin ( Dee Dee Ramone ) : 18 de Septiembre  de 1951.- Fort Lee- ( Virginia ) .- 5 de Junio de 2002 Los Ángeles (Estados Unidos )

 John William Cummings ( Johnny Ramone ) : 8 de Octubre de 1948 ( Nueva York ) .- 15 de Septiembre Los Ángeles ( Estados Unidos )


 Thomas Erdélyi ( Tommy Ramone ) : 29 de Enero de 1949 , Budapest ( Hungria ) .- 11 de Julio de 2014 .- Nueva York (Estados Unidos )


 Chistopher Josep Ward ( CJ Ramone ) : 8 de Octubre de 1965 - Nueva York ( Estados Unidos ).-


 Richard Beau (Richie Ramone ) : 11 de Agosto de 1957 - Nueva Jersey ( Estados Unidos ).-


 Marc Steven Bell ( Marky Ramone ) : 15 de Julio de 1956 Brooklyn - Nueva York ( Estados Unidos ).-







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