JIMI HENDRIX : EL GITANO ZURDO
Era la primavera cuando alguien en el último
curso de bachillerato, sentado en las escalinatas que daban acceso a las aulas,
se quitó su cazadora negra y dejó al descubierto la camiseta de Jimi
Hendrix que lucía su torso masculino. No
sé si fue la primera vez que vi al de Seattle, es decir, su icono, pero sino
debió de ser de las primeras que aquel chico delgado, mulato, emigrado de los
USA a Inglaterra para poder demostrar que además era un buen compositor de
canciones y mejor guitarrista, se me aparecía ante mis ojos con una pelambrera
considerable, ropas estrafalarias adornada con collares, camisa floreada y una
enorme guitarra eléctrica en su mano derecha mientras con la izquierda parecía
acariciar sus cuerdas.
Había fallecido hacía unos años cuando vi la
camiseta en cuestión recubriendo el tórax de dicho alumno, pero yo por aquel
entonces no lo había escuchado más allá de algún tema suelto, estamos a
mediados de los 70; esto es España y yo vivo en provincias, como siempre cree
uno a esa edad adolescente que “ está en el culo del mundo”; luego con el paso
de las décadas uno descubre que hay
tantos mundos como culos… pero eso es otra historia.
Algunos meses después de conocer personalmente
al portador de la camiseta de Hendrix, por su puesto para él el mejor
guitarrista del mundo, faltaría más, a esa edad que ronda entre los 15 y 20
años, donde uno con toda la experiencia acumulada
es capaz de afirmar tales cuestiones sin pestañear, resultó ser un tipo que
además conocía su obra, pero en realidad de quien era fanático, y eso hay que
subrayarlo, era de Bob Dylan. Los pocos meses que restaban para que el curso
finalizase, “ el enterado “, iba uno por delante y cualquier homínido sabe que
1 año arriba o abajo marca tanto como unos ojos azules o 10 cms de + o de - .
El caso es que el tal Ricardo, si las neuronas no me bailan, me prestó dos
cintas de Jimi Hendrix : una original y la otra de 1 hora de algo así como
grandes éxitos. Yo, no podía imaginar en mi escasa cultura musical de entonces,
que el de Seattle pudiera tener algo aproximado a eso que se llama aceptación
masiva popular. El caso que un viernes por la tarde, mi nuevo amigo me dejó las
dos casetes con la advertencia clara, meridiana, de que si se extraviaban o deterioraban
pagaría con mi vida tal error.
Bien, después del partido de fútbol de todas
las tardes en el campo del instituto, sudoroso llegué a casa, ducha, merienda y
me encierro en mi habitación. En un pequeño radiocasete, en teoría era para
practicar lecciones grabándolas y yo atendiendo a mi propia voz para
memorizarlas; al menos así recuerdo que engañé a mi padre para que me comprase
tal artilugio. El caso que Hendrix empezó a chirriar con una guitarra eléctrica
que parecía una sierra metálica. En casa, si no había una radio o la televisión
puesta, en realidad nadie prestaba atención a nadie mientras la cosa no pasase
a mayores, así pues a mí me dejaban respirar. Estudiar estudiaba, nunca
destaqué pero no me quedaban en junio, así pues todos contentos con que el
chico se relajase escuchando a esos pelujos. No llego a vislumbrar que disco de Hendrix
escuché de estudio, ni el famoso grandes éxitos, el caso es que el lunes por la
tarde yo le devolví a mi nuevo “ amigo “ en una bolsita que utilizábamos para
meter el pan, las dos casetes del guitarrista. Todos contentos. Yo salvé mi
vida y Ricardo confió en mí para dejarme más material, de quien fuera…
Estando en COU, yo era capitán general, el
último curso previo a la Universidad o a la mediocridad, depende… me hice con
el 1º disco de Jimi Hendrix propio, un artefacto en forma de disco doble
publicado en 1972 en Vidalia Produtions edición USA con 16 temas, pero ¡ ojo !
y esto me alarmó, la 1ª cara del Lp tiene : Wipe
The Sweat-Segway partes I – II – III , unos 6 minutos con el mismo tema, ¿…
?. La 2ª coloca otras 3 partes del tema Under
The Table rondando también los 6 minutos. Bueno, bueno, ya no tenía al tal
Ricardo para que me explicase. El caso es que el disco rodó y se paseó por
alguna fiesta donde a mí me gustaba pinchar Good
Feeling o Suspicius . Sí, porque
yo disfrutaba llevándome a los partís una bolsa grande con Lps que según la
noche se ponían temas escogidos de unos y de otros y además, para qué perder
tiempo, mejor pinchar y observar que perder el espacio en tantos tejemanejes.
El nivel era alto en cuanto a música, los que deseaban pachanga no aparecían,
aquí había calidad. Y yo, la verdad,
con algún otro loco en esto del rock, disfrutábamos y se ligaba más. Muchas
mamás de ahora con hijos ya muy grandes venían con caras de tontitas y
morroñosas a suplicarnos pinchar tal o cual canción, y solo de verlas
derretirse merecía la pena;
a mí en las manos me faltaban dedos para complacerlas. ¡ Glub !
Pasadas algunas décadas. O sea, ahora, tengo que bajar al trastero de mi
casa para encontrar alguna revista de las cientos que acumulo en dicho lugar
para intentar encontrar alguna portada de Jimi Hendrix en el Rolling Stone
edición USA, más que nada para sacarles
algunas fotos y colocarlas en este artículo en forma de blog que ustedes tienen
la paciencia de leer, y quedar chulo.
Puede ser, y esto es mucho suponer, que a mi
Jimi Hendrix me gustase, pero les confieso, no era de mi incumbencia si era el
mejor o no. Desgraciadamente tuve que dejar espacio y tiempo para calibrar su
enorme obra, escasa, no se engañen, tiene 5 discos oficiales incluyendo un directo y 1 públicado póstumo a los pocos meses de fallecer, el resto mucha paja, mediocridad, que
intentaré razonar y desgranar aquí, pues hay algunas cosas muy interesantes del
de Seattle. No mitifico a nadie, y cuando escribo a nadie, digo a nadie. Sólo
me interesa la música. Springsteen,
en una larga entrevista de Rolling Stone, en los años 80, describía muy bien lo
que quiero afirmar: cree en el artista,
en su obra, no en él. Por lo que deduzco o creo entender, viene a decir que
lo importante son sus discos o conciertos, etc; a mí su vida personal salvo que
tenga una línea muy directa con lo que publica nada me incumbe. Digo, porque
con monstruos de tal calibre hay mucha literatura pajillera de falsos
adoradores que desconocen al personaje,
sus álbumes, etc; pasa con todos y con cualquier faceta artística; cine,
literatura…
No, definitivamente a aquella edad donde uno
afirmaba sin pestañear sus gustos,
Hendrix no era ni de cerca mi guitarrista favorito, de hecho en una entrevista
en NME realizada al propio Jimi, ante la pregunta ( estamos en 1970) cuando le
requieren por el número 1 en esto del rock, afirma: ¿ pregunten a Rory Gallagher ? , cuando éste todavía estaba en
Taste. Mi descubrimiento es posterior. Sí, tengo una docena de sus Lps, buenos,
ya afirmo desde aquí, pero hay que poner aire porque el maestro gitano zurdo es
un genio de la innovación y que su temprana muerte a los 27 años nos privó de un buen puñado de
futuras obras geniales, probablemente.
Jimi Hendrix era un bluesman psicodélico que
amasó su guitarra con destellos de rock, funk y jazz y todo pasado por el
estudio de las 6 cuerdas donde elevó la música, con mayúsculas, donde quizás
nadie ha llegado. Estaba tocado por los ángeles, eso no cabe duda y tuvo que
caer en el Londres más dinámico de finales de los 60 para poder explayarse en
todo su esplendor, amén de encontrar a los músicos suficientes que le acogieran
para poder desarrollar todo su enorme talento y plasmarlo en las obras que nos
ha dejado.
Good Feeling .-
Coronado como el guitarrista más innovador,
experimental y salvaje de la historia del rock. Hendrix renovó totalmente el
concepto de tocar la guitarra eléctrica marcando tras su paso un antes y un
después. Supo sacar a su instrumento registros, efectos sonoros y posibilidades
técnicas impensables sin su contribución genial. A su vez, la actitud de animal
escénico deslumbró a todos aquellos que asistieron a sus conciertos: Hendrix
era un músico que simulaba relaciones sexuales con su guitarra, se contorsionaba
tocándola en las posturas más inverosímiles y mimetizaba la antropofagia de un
Saturno afro al acariciarla con sus dientes.
Quizás solo era un bluesman camaleónico y
heterodoxo, síntesis viviente de las ramificaciones del más genuino sonido
negro, jazz, R&B, funk, soul y claro está, rock, integradas y reembolsadas
al sonido materno, el blues, y que
carnalizó en su persona la acepción de genio de la naturaleza que se adelanta a
sus contemporáneos en varias generaciones.
Cuatro décadas después de su muerte, habrá que
redescubrir su verdadera dimensión musical, lejos de la visión caricaturesca y
simplista que ha gustado vender a la industria discográfica y que en mayor
medida han parodiado los guitarristas de hard-rock de toda nacionalidad, edad y
condición, la lista es enorme, sólo se salva Stevie Ray Vaughan, porque además
éste al margen de ser un genio, tenía ideas propias y maneras muy particulares.
Sin caer en el racismo, hemos de poner también
en evidencia a los hermanos de raza, que aprovechando la pigmentación común,
han ido chupando rueda de la estela hendrixiana pasa así amparar sus montajes
comerciales de AOR, rock duro de FM y funk recalentado, puedo salvar a alguno,
y esto es criterio muy personal, claro. Vernon Reid ( Livin Colour ). Pero pocos
se pueden preservar de la quema
inquisitorial. Indicar también que los bluesman negros de nuevo cuño, con
bagaje previo rockero antes de jurar armas al blues, son los deudores naturales
de su legado, por ejemplo , Little Jimmy King, Donald Kinsey, Deborah Coleman…
Su vida no es más que la de un hijo del blues
en todo su esplendor, arrastramiento, ostracismos, estrellato, icono y
desaparición. Curioso que muriese con 27 años, la misma edad en la que cayó
envenenado Robert Johnson. En los últimos tiempos de su existencia Jimi
Hendrix, reclamó para sí la vuelta a las raíces, al blues, porque afirmaba que
de allí era de donde venía. En el último mes de su vida, septiembre de 1970,
durante la última comparecencia ante una grabadora, preguntado por la crítica musical
del momento acerca de su supuesta paternidad sobre la música psicodélica, tras
reírse de la etiqueta de marras, calificaba a su música de blues contemporáneo.
Pudo ser una estrella del rock, pero un cierto
estudio de su obra y con tranquilidad, tras calibrar las fases de toda su
carrera musical se descubren paralelismos con los bluesman negros que le antecedieron. El revolucionario
intérprete que puso patas arriba la escena sixteis londinense y noqueó a la
práctica totalidad de los guitar-heroes británicos, demostró que se podía tocar
blues moderno, y a su vez ir más allá del mero reciclaje de los licks
guitarreros de BB King a través de un enorme amplificador.
Autodidacta y zurdo, Hendrix dotó a su música,
enraizada en el blues de un espectro sonoro que superaba a todos los bluesman
contemporáneos suyos, blancos y negros: riffs veloces entremezclados con solos
efervescentes, enérgicos y sencillos a la vez, echando mano de la distorsión,
el feedback y un volumen ensordecedor, haciendo gala de una técnica tan
impresionante como irracional.
Good Times .-
Afirmo y creo estar en lo cierto, si digo que Hendrix fue el primer
músico negro que supo adaptarse al rock blanco y triunfar en él, anticipándose
en un par de años a B. B. King y poder disfrutar de un público mayoritariamente
blanco. Los 4 afluentes de los que manó
su talento: el jazz, el rhythm & blues, soul y rock and roll, dieron pie a
una fusión de estilos renombrada como el último eslabón, aún no superado, de la
cadena evolutiva del blues, Jimi, que estudió y escuchó a todos y cada uno de
los guitarristas de blues y R&B que hubiesen grabado disco desde los años
30 a 50, aprendió a dominar su instrumento curtiéndose en el circuito de
R&B del Sur Profundo de los USA, bajo el apelativo de Maurice James.¡
Joder! si pasó años muy amargos, de humillaciones continuas e incomprensiones
para con su óptica musical, con más oficio que de el triste mercenario a sueldo y con el único
beneficio de no desfallecer de simple inanición.
Cuando ya no pudo más, mientras era un negro
arrastrado algo estrafalario que sacaba un sonido “ tan raro “ a la guitarra en
USA, alguien, algo, le dice que su sitio está
en Inglaterra, que quizás tal vez allí con una Europa más abierta él
pueda encajar más que en la cerrada América donde ni los propios hermanos le
comprenden.¿ Qué hace ? No crea blues puro, ni rock… demasiado para mentes
estrechas. Pero Hendrix no llega al
contrario que otros muchos nombres dorados de bluesman: Muddy Waters, Howlin´ Wolf, Buddy Guy… al
estrafalario Londres en el paquete anual, algo folklórico a mi entender, que
asolaban el viejo continente, aquello que se llamaba: American Folk Blues Festival. No, Jimi viene como hijo prodigo del
blues, el reinventor del rock a través
de los 12 compases. Con este llamémosle blues progresivo, Hendrix superó las
encorsetadas visiones melódicas de la comunidad negra y alcanzó el estrellato
que de otra manera, siguiendo los cauces tradicionales, se le habría negado
sufriendo las mismas incomprensiones que otro genio, Buddy Guy en Chess
Records, donde ambos fueron rechazados por tocar con wah wah. Demasiado volumen en el amplificador hasta rozar la
distorsión, los jefes no querían eso.
Básicamente les recomendaron que tocasen blues ortodoxo, que no tocasen tan
alto y distorsionado; afortunadamente no siguió el consejo transformándose en
el músico negro más aclamado a lo largo de todo el planeta al nivel de Louis
Armstrong.
Una vez más, y van varias, Hendrix tuvo que ir
a Londres para poder volver a la América cual producto de importación. ¿
Recuerdan los Stones, Animals, Yarbirds, que versionaban a Muddy Waters,
Howlin´Wolf o Sonny Boy Williamson para que Estados Unidos supiese apreciar el
elevado pedigrí de sus más genuinos músicos autóctonos ?
Voice In The Wind.-
La leyenda del más formidable huracán que haya dado el rock desde sus orígenes, esa
tormenta que estalla en un segundo, llega a su climax y se quiebra en el aire,
en apenas 5 años es capaz de estremecer al mundo. En estos años, me atrevo a
hacer un pequeño resumen: 1) Penurias y frustraciones, 1961-1966. 2) Dos años
de gloria y éxito, 1967-1968. 3) Desesperación y frustración, 1969 – 1970.
ORÍGENES Y RAÍCES .- Aunque a Hendrix se le quiera presentar como un huérfano de familia pobre y desvaída, lo cierto es que nació en plena comunidad blanca y no exento de algunos privilegios no muy al alcance de su raza en esos momentos. Su padre podaba árboles, su madre era otra cosa, nada convencional, para empezar y no es coña, era india Cherokee y le daba a la bebida mientras el progenitor era algo calzones con el tema religioso. Eso sí, todos de Seattle, una ciudad en aquella época de apenas medio millón de habitantes en el estado de Washington.
Seamos breves en esto: con apenas 5 años
Hendrix ya sabe lo que es una familia no feliz, ya se sabe, las que lo son todas se parecen, la
gracia está en las que lo no consiguen. Ahi radica el intríngulis a mi modesto
entender. Y sé de lo que hablo. Hubo algún
niño más, pero Jimi era el mayor, eso me suena. Va como todos, quisiera o no, a la escuela, tuvo una formación aunque la
verdad, mucha atención no prestaba, al
menos salió sabiendo leer y escribir Se interesó pronto por la música, apenas
con 4 años tenía una armónica y un desvencijado violín que había por casa, pero
acabó interesándose por la guitarra que era lo que tocaba todo el mundo,
bastante raro era él ya para tener otro instrumento entre manos. Un tío suyo le regaló tal objeto sobre los 14 años, y
lo más cerca que tenía era escuchar a los grandes bluesman desde Robert Johnson
a Muddy Waters. Con apenas una escucha era capaz de sacar el tema casi al
completo, eso era una especie de magia, ¡ que oído ! Tanto que la propia
familia empezó a reparar en semejante cuestión. Nada más escuchar una canción
podía aprenderla y tocarla. Su adolescencia está marcada por ningún amigo, no
leía, así pues la vena creativa posterior era por su propio genio, nada
intelectual y lo único que despertaba su ilusión y concentración era la guitarra y una
profesora que le daba clases a los 15 años. ¡ Vamos, bastante normal ! estaba cansado de aprender y
aguantar a gente imbécil, así hasta que al cumplir los 16 abandona la
escuela y ayuda a su padre en la jardinería. Bueno, muchos entre los que me
incluyo pensaban igual, el problema era que mi padre no era jardinero y yo no
tocaba la guitarra.
Da un cambio a su vida y se alista en el
ejército, durante 2 años tocó con algunos grupos y practicaba R&R, cosa sin
importancia, para fiestas teenagers,
y curioso, su primera actuación fue para la Guardia Nacional, así pues no se extrañen que Jimi Hendrix en algún arrebato,
que los tenía, tocase de vez en cuando el himno nacional americano. En 1961,
con autorización de su padre, pues apenas tenía 17 años, ingresó en la Armada
como Paracaidista, en el escuadrón 101. Pese a que su guitarra quedó en su
cuarto, siguió tocando en algunos clubs de oficiales.
No busques razones técnicas ni políticas en la
vida y obra de Jimi Hendrix. Tan sólo razones humanas para ganar el combate de
su tiempo y de su circunstancia. Queda aclarado su coqueteo con los fenómenos
que le incitaban a destruir el sencillo transporte del tiempo. Tuvo 3
religiones, a mi entender : la guitarra, la droga y la mujer. Sobre este
triángulo montó y desarrolló su vida siempre con la terrible amenaza de tener
que estar vivo y justificar vaya usted a saber qué.
LA GUITARRA.- Cualquiera que haya estado en el
ejército, por convicción o por cumplir
con los deberes conyugales con la patria, como en mi caso, ( la mili) te hace
despertar sentimientos ambivalentes que hasta pasados algunos años no llegas a
encajar del todo en tus neuronas. La vida militar da igual el sitio al que pertenezcas
o creas defender, es absolutamente igual, cambia el idioma y algunos matices.
No hay enemigos más allá de los que cada uno tiene en su cabeza por razón de
fe, religión, educación errónea; etc.
Observando lo que conozco de Jimi Hendrix, hay
varias notas en su biografía que me son demasiado familiares. Ambos somos
fronterizos, nos cuesta mucho adaptarnos al medio en el que hemos crecido, nos
sentimos raros rodeados de tantos homínidos más allá de que mi pigmentación era
la misma de todos y cada uno de los que me rodeaban. No, el asunto estaba en la
“sensibilidad” por captar la realidad que siempre he tenido por muy vaga. No
dar por hecho nada, difícil de encajar en cualquier lado, huyendo de tu mente
que pone en duda todo, coloca críticas en las vallas que cierran el aula;
demasiados ruidos a mi alrededor. En el ejército, Hendrix se hizo llevar su
guitarra y dormía con ella, ¡ imaginen lo que era eso para una sala llena de
300 tíos !. Estamos a comienzos de los 60 y encima nuestro chico es mestizo, medio gitano y con sangre cherokee en sus venas. ¿ Se lo imaginan, sólo por un momento
? Bien, todos con el pelo rapado, vestidos iguales y éste era aun así muy
diferente a los otros 299 ? Me entienden ahora… pues eso, que yo también soy
fronterizo, me cuesta no salirme del entorno pero no soy oveja negra ni blanca,
y además cuando crees encontrar a alguien semejante a ti, recelas mohíno.
Cuando recibió la guitarra con remite
paterno, Hendrix estaba deseoso de intentar duplicar con su instrumento el sonido que percibía
cuando surcaba el aire rumbo al suelo. Y además imbuirse de los muchos sonidos
circundantes a su base, el country y el blues
autóctono que solía escuchar en los permisos de paseo. No tardó en darse cuenta
de que todo lo que quería hacer con su vida era tocar la guitarra. Sólo podía
comprender su existencia a través de ella, transmutándose en hermana, amante,
musa y método de subsistencia.
Donde aprendí a tocar la guitarra fue en el
Sur Profundo. Cuando descubrí una manera de poner fin a mi estancia en el
ejército, bajé más al sur y comprobé que todos los tíos de los alrededores
estaban tocando blues.
No sólo comenzó a dormir con su guitarra, sino
que además le puso nombre : Betty Jean. Todo el tiempo libre que tenía lo consumía
paseando por las calles de Nashville, Tennessee, villa situada a 60 millas
escuchando la música que brotaba de los distintos clubs, como el country, el
viejo y acústico blues así como un híbrido bailable y marchoso que poseían
grupos como Broker T.& The MGs o los Mar-Keys. Algo muy parecido pasa en el
siglo XXI, cualquiera que haya estado en esa zona de América comprobará in situ
los mismos lugares, algunos cambiados, pero fiel reflejo de lo que es el sur
profundo de USA y pieza angular de la música de Hendrix.
En julio de 1962 con 21 añitos recibe la
blanca, siendo licenciado con todos los honores, estableciéndose en Clarksville
durante 2 meses, esperando el licenciamiento de su único amigo hecho en el
ejército, Billy Cox. Ambos deciden ir a Indiánapolis, terreno que creo
conocer bien personalmente, en parte de un viaje veraniego siguiendo los pasos
del de Seattle, pero a las pocas semanas y viendo que nadie les contrata vuelve
a Clasksville y siguen viajando hasta Nasvhille tocando en clubs como Del Marocco.
En noviembre acuden a un anuncio del locutor de radio Bill Allen que buscaba
músicos de sesión para un set televisivo. A Cox lo cogen, a Hendrix no, ¿ por
qué ? Su salvajismo altisonante. Los dos amigos se separan, el guitarrista tira
hacia el norte en busca de alojamiento con su abuela paterna, en Vancouver.
En febrero de 1963 Jimi regresa al sur de
Estados Unidos y entra por fin, como músico a sueldo de los bluesman de la
talla de Slim Harpo y Tommy Tucker. Más tarde sigue en dirección más profunda,
de nuevo en Nashville mudándose en casa de una
novieta que se echa, Florence Henderson, y cambiando su amada guitarra
Kay-Danelectro por una flamante Epiphone, así pues mil besos a Betty Jean que había cumplido su ciclo.
Acabará reuniéndose con su viejo amigo el bajista Billy Cox y formando una
banda durante bastante tiempo, tocan en Del Marocco.
LOS RIESGOS DE TENER PERSONALIDAD.-
Jimi, ¡ ay la personalidad !, intentó innovar el repertorio, tocar otros
ritmos, pero Richard se lo impidió, no permitía competidor alguno que rebajara su ego. A sí pues, ¿ se come
caliente todos los días y me trago sapos? , ¿ oh, soy pobre y dueño de mi hambre? ¿ Qué elige? A su paso por St. Louis Hendrix
se salió de la banda y como bala perdida no intentó otra cosa la criatura que
ir a pedir trabajo al grupo de Ike Turner que tocaba en aquel momento en el
Chappie´s Lounge. El asunto le iba a Jimi, R&B del profundo sur, pero hay que joderse, su indumentaria y su música
no les gustaron, incluso lo humillaron. Como siempre que te caes te levantas (
si no se acabó el asunto, y ya no hay de qué preocuparse ), por allí cerca
andaba un enorme bluesman: Albert King, quien debió de apiadarse del muchacho,
a fin de cuentas mayor que él, negro también, debía de saber lo que es sufrir
en sus carnes tantos noes. Debió de quedar impresionado por la zurda maestría y
bluessie del novato. También hay que recalcar para algún despistado lector, que
King es zurdo, y que músicos guitarristas con tal “ matiz “ no había, así pues
debió de enseñarle algunos fraseos intrincados de un maestro común: T-Bone
Walker que no podía reproducir. Una de técnica: Jimi Hendrix era capaz de hacer
vibrar las cuerdas desplazándolas, empujándolas en sentido horizontal por el
mástil. Eso le daba un tono específico, diferente. Esto último, y es
apreciación personal, sólo se lo he visto hacer a otro que utiliza la izquierda
como arma principal: Otis Rush, bluesman del west side chicagüense.
Por aquella época, y ahora me entero, Hendrix
conoció al tipo que en mi primer Lp firmaba varios temas y los dividía en 3
partes, me refiero al saxofonista Lonnie
Youngblood Thomas con quien se
estrenará en los estudios de grabación. No vieron la luz hasta años más tarde
cuando tras su fama londinense se fraguó, y ahora sí, todo era de interés
general. Pero en estos años de frustración y búsqueda de las raíces, no se
encontraba, todo 1964 fue una larga tortura incluso pasando por los míticos
estudios Chess de Chicago donde Willi Dixon no le pudo dar acomodo ni pudo
entrar en la banda de Muddy Waters pues éste ya tenía cogidas las plazas. Eso
sí, Hendrix logró entrar en un cuarto y grabar sus cosas, debió de ser en algún descuido pero enchufó su instrumento
y tocó sus blues excéntricos con parsimoniosa seguridad, remarcando las
secuencias de bajo con regusto sureño. No debió de impresionar a nadie, ni
Compañía ni productor cuando hallaron tal artefacto sonoro, pero comentaron
subrepticiamente su manera de tocar sacando a colación los viejos tiempos.
Desalentado al no encontrar grupo y acomodo debió de coger un autobús de
regreso a Nashville y de allí dar un giro a su vida, llegar a Nueva York junto
a un conocido para intentarlo una vez más.
NUEVA YORK .- Jimi Hendrix llega junto a su amigo a la Gran Manzana y ambos alquilaron una destartalada habitación en el hotel Theresa, sito en la confluencia de la calle 125 con la 7ª Avenida, a pocos metros del Café Palm, refugio de los músicos que acudían o trabajaban en el Apollo, dotado de banda propia de jazz sedoso y firme en su contenido. Por allí pasaban todo tipo de especímenes, así Hendrix no desentonaría del todo pese a su indumentaria y maneras de andar tranquilas y de suave voz. En una de las sesiones para amateurs que se celebró en dicho sitio, Jimi ganó el concurso y los 25 dólares de la época, pero lo mejor fue que una exnovia de Sam Cooke lo viese actuar y le introdujera poco a poco en el ambiente del Harlem.
De esta estancia en Nueva York acabaría como
músico a sueldo de gente tan diversa
como Isley Brtohers, Wilson Pikett, Jackie Wilson y más tarde por un periodo de
otros 3 meses de nuevo con Litttle Richard. En todo este periodo conocería la
disciplina más rígida de las giras profesionales, soportando en alguna ocasión
broncas e imposiciones de vestuario; pero por el contrario íntima con
Lonnie Youngblood y Curtis Kinght. Sus primeras grabaciones datan de
este momento, canciones que llevan su guitarra con los diversos músicos que
tocó, la lista es larga pero nada significativa de lo que sería su gran obra.
Dura hasta noviembre de 1964 donde a su paso
con los Isley Brothers por Nashville se une a la banda del Gorgeous George, un
tipo que toca R&B. Año interesante para Hendrix al margen de poder vivir de
la música y curtirse en los escenarios
pues de un lado a otro, acaba llegando a la banda de los hermanos Womack
integrados en el mismo tour de Sam Cooke, otra estrella del lote, tocando junto
a éste último en Memphis, Tenessee. Era muy típico de esta época el que varios
artistas emprendían una largo tour por parte de los Estados Unidos. No sé qué
ocurriría ahí del todo, el caso es que Jimi debe de perder el autobús de ésta
comparsa y decide largarse a Atlanta
enterado de que por allí anda de gira
Little Richard; de nuevo con uno de los reyes del rock and roll de los 50
aguanta otros 3 meses. Todo el año anduvo así, con su maletín de la guitarra al
hombro como músico de acompañamiento teniendo a Nueva York como base de las
operaciones y sus múltiples contactos.
También sacó un segundo conocido que en el futuro
inmediato le sería importante, Buddy Miles, un joven batería que estaba en la
banda de Wilson Pickett y que conoció en el club Uptown de Montreal en Canadá.
Allí se daría cuenta del genio y soledad de Jimi Hendrix, un chico delgado y
taciturno, de pocas palabras, de aspecto extravagante que no guardaba ninguna relación con aquél que se subía al
escenario y tocaba la guitarra solista de manera tan peculiar. También descubriría
que se recargaba la energía tomando
cristales de metadrina que escondía en un biberón y que se pasaba las horas
muertas solo, tocando en su habitación.
Hey Joe .-
Expandía fuerza primitiva bajo un arco iris de
elegancia y presunción. Fue el primer negro pop, hasta aparecer él los artistas
de color, incluso los de éxito entre el público blanco, lo conseguían mediante
una música ligada a su tradición y su atuendo era tan timorato como los
límites modosos del esmoquin. Hendrix cambió todo eso. Venció a los blancos en
su propio terreno, adelantándose en términos estéticos con un original diseño
psicodélico de inexplorables efectos de fuego y carne. Su mayor gloria al
margen de las virtudes que introdujo en el blues, fue transgredir el gueto musical con un
lenguaje universal. Imágenes de confusión,
sexo y búsqueda. Hasta que llegó a formar su propio grupo, Jimmy James
& The Blues Fame en 1965 y se hizo asiduo a tocar en los clubs neoyorkinos
como el Café A Go-Go donde llegaron a verle tocar gente tan variopinta como
toda la cohorte de Andy Warhol, Dylan, parte de los Stones en una de sus
primeras giras americanas y echarse una novia,
siempre tenía una como la funda de su guitarra,
Fanny Pigdeon, una negra de armas tomar del Harlem que además extenderá
su manto protector sobre él; independientemente de su bonita figura tejió una extensa red
de contactos en todo Harlem. Una mánager personal perfecta para el tímido
Hendrix, quien se habría comportado como un gusano en su nido frente a la
ciudad negra. Pese a todo y de haber ya tocado para una pléyade importante de
músicos vinculados al R&B, seguía en el ostracismo y los propietarios que le
contrataban no estaban acostumbrados a tal tipo con sus extravagancias en
directo, si quería triunfar, no tendría más remedio que abandonar el gueto
negro donde ni sus hermanos, como ya he escrito, lo aceptaban del todo. Debería
explorar territorio banco, fuera del Harlem, algo que su novia no aceptaba,
pero chico, esta vez la guitarra tiraba más que las dos tetas de la señorita
Pigdeon.
Lo que no me gusta del negocio musical es que siempre intenta
encasillar a las personas, lo cual detesto.
Las grabaciones que aparecieron de los
primeros trabajos de Jimi Hendrix datan de estas fechas. Un disco póstumo, carroñero, de título irónico: Little Richard/Jimi Hendrix : Friends From
The Beggininng. En el otoño de 1965 su relación amorosa con Fayne se
deteriora sobre todo porque la mujer está muy apegada a las costumbres del
Harlem y pese a su belleza, canalizaba el estereotipo de mujer negra, abandonar
dicha zona neoyorkina significaba para Jimi renunciar definitivamente a dicha
muchacha. En octubre se unió a Curtis Knight And The Squires, una banda que no sólo
tocaba en el circuito, sino que extendía sus tentáculos al Greenwich Village,
Times Square o el Upper East Side, las zonas vips por excelencia. Al menos aquí
le dejaban explayarse con dos temas a su
gusto, a saber, el Killing Floor, con ese picoteo inicial, atrayente y sincopado, y
una versión de Albert Collins, donde las raíces más negras salían a flote. La miscelánea
instrumental Drivin´South.
Todo lo que acontece antes de dar el salto a
Londres se resume en tocar como músico de acompañamiento, unas veces en las
giras con Curtis Knight, otras en una banda de twist por la zona de Bostón con
Joey Dee & The Starlighters, otras con el saxofonista King Curtis que hacia
funky compartiendo las tareas de leed guitar con Cornell Dupre, En abril
grabará con el vocalista Ray Sharpe clásicos como Linda Lou o I Cant´t Take It.
Atlantic Records para quien salen dichas
canciones dará en mayo una fiesta y Hendrix como miembro del grupo de King
Curtis All Stras Band se le puede ver al lado de monstruos del calibre de
Wilson Pickett. Sigue tocando en el club
Cheetah de la calle de Broadway y luego en un café folkie, de nombre Wha
? ; allí bautiza a su banda como Jimmy James & The Blue Flames con Randy
California a las guitarras, se fragua
algún tema memorable de ahí que lo mencione: Hey Joe, Wild Thging, Sout Gun.
A estas alturas, Jimi Hendrix tiene un plan
secreto: dejarse descubrir por el público blanco y de paso acceder al mercado
del rock. Ya conoce de sobra los entrecejos del rock anglosajón contemporáneo,
basado en gran medida en una fuerte expoliación del blues norteamericano y camuflado bajo el marketing que ofrecían
las refrescantes caras de jovencitos paliduchos. Pronto adquirirá fama entre el
público folk que lo ve y de ese goteo creciente al observar al genio eléctrico
nacerá poco a poco la leyenda, hasta que una noche los Stones aparecen en masa,
quedaron admirados de la maestría guitarrera del desconocido músico negro y su tremenda
versatilidad para el R&B, el pop y el rock más visceral. Único.
Era ante todo impresionante, pura subversión, sus vistosas pintas eclipsaban las fantasías de Carnaby Street. Expandía fuerza primitiva bajo un arco iris de elegancia y presunción. Con sus casacas entorchadas y trajes de rayones coloristas apareció de pronto en Londres, convirtiéndose en menos de 1 año en la más fulgurante estrella del zoológico pop, los eclipsó a todos, la naciente crema de guitarristas no daba crédito a sus ojos, algunos desistían de actuar ante la inviabilidad de reproducir en directo sus sofisticadas grabaciones, allí estaba aquel negro, zurdo e insolente, extrayendo los más insólitos sonidos.
LONDRES.-
Tras una búsqueda incesante, Chas
Chandler, un tipo que estaba en The Animals, pero que en realidad quería ser
mánager, convenció a Hendrix para trasladarse definitivamente a Londres e
intentar alcanzar el sueño que el americano tenía, o al menos ser respetado en
su música y el entorno, que creía tener a su aura de estética y misticismo
alrededor.
Jimmy
decidió cambiar su imagen en 1966, perdió ese interés tan ciego que tenía en el
blues, no más discos de BB King, Little Walker y Howlin´Wolf que solían
volverle loco. Se introdujo en discos de blancos, como Bob Dylan y frecuentó la
casa de John Hammond y su familia. Estableció un nuevo orden.
Hendrix aterriza en el aeropuerto de Heathrow de Londres el 24 de septiembre
de 1966 y cruzando el Atlántico deciden que su grupo se llame The Expieriencie y recortar su nombre al
emblemático de Jimi.
Algunas trabas puntillosas con los aduaneros
británicos que intentan restringir su estancia
pretendiendo que se confirme con un permiso laboral temporal de apenas 1
semana, en cualquier caso parece que el asunto se soluciona pues aquella misma
tarde su nuevo mánager blanco le tenía preparada una jam en un pub, el Scoth Of St. James en la que
sería su comparecencia ante el público británico. Apenas unos días más tarde se
coloca un anuncio en la prensa en busca de bajista y batería, como lo puso
Chandler, los que acudieron eran pensando en gente para una reformación de The
Animals, no un invento nuevo. El caso es que por allí apareció entre otros Noel
Redding que era guitarrista pero que al final convencido por el propio Hendrix
de sus habilidades se quedó con la plaza de bajo. La batería fue para el Blue
Fame del organista Gerorge Fame, Mitch Mitchell, con esto se completa el
trípode que deseaba desde un principio y en parte, para competir con Cream, que
unos días más tarde daban una jam en el
Instituto Politécnico Regent, donde instaron a Chandler a llevar a su pupilo y
tocar en directo con ellos. Nadie en su sano juicio hubiese optado por desafiar
a Clapton, la crema de los músicos ingleses del pop-rock. ¡ Ingenuos !, como
siempre los británicos consideran al resto del mundo como súbditos de su corona
rancia y todavía creen colonizarnos en todo, rock incluido, más si eres negro y
encima conquistado. Hendrix se encargó de dejar las cosas en su sitio y para
mí, aquí nació la leyenda hendrixiana. Acometió con tal fuerza un único tema: Killing Floor, versión lobuna, con un
visiblemente emocionado Clapton abandonando la escena y yendo a refugiarse a
los camerinos.
Pero Hendrix, noble y además nuevo en este
país, estableció un pacto digamos de caballeros. No quiso competición alguna
entre ellos, para él el británico tocaba en la onda de BB King mientras que
Hendrix partiendo del blues iba más por el estilo de Elmore James.
Entonces surgió Jimi Hendrix y lideró todo
aquello. Se necesitaba a alguien que insuflara un soplo de aire fresco. A Jimi
le gustaban mis propios héroes musicales, Robert Johnson, Freddie y BB King,
Buddy Guy… Todo esto me emocionó, porque desde mi punto de vista yo era de 2ª
mano. Quiero decir que yo había aprendido a tocar sacándolo de los discos. Pero
este chico había estado entre ellos, era
una de ellos. ( Clapton ).
Ahí está la clave, era
uno de ellos.
A partir de aquí
ejercieron de teloneros la semana del 13
al 19 de octubre en locales parisinos de John Hallyday, Long Curtis y The
Blackbirds, entre otros tocaron en el Olympia, que siempre da lustre. La The Experience se va curtiendo en las tablas
y cayeron varios de los temas que iban colocando para su futuro trabajo: Mignight Hour, Have Mercy On Me Baby, Land
Of 1000 Dances, Hey Joe, la mezcla entre Chuck Berry y James Brown en
escena de Jimi Hendrix causó sensación, a veces cuando se colocaba la guitarra
en la boca y tocaba con los dientes, no me digan que no sorprendía en 1966.
Poco a poco van surgiendo nuevos temas de la pluma
de Hendrix, Can You See Me , Love Of
Confusión, You Wait. Consiguen su primer contrato discográfico con Polydor
y el 16 de diciembre se edita el 1º
single oficial: Hey Joe/ Stone Free ;
apenas 5 días después la puesta de largo en el pub Blaises que será reseñado en la prensa y donde
acuden viejos “ amigos “, como los Stones en pleno, Jeff Beck, Clapton,
Townshend a admirar al nuevo animal sobre las tablas.
Al
salvaje electrificado de Borneo, de gestualidad guitarrera fálica indecente que
saca a su instrumento sonidos propios de la edad del metal.
ARE YOU EXPERIENCED.- Mayo de 1967 .-
Al igual que sucedió con los
primeros 6 discos de The Rolling Stones,
existe una edición americana y otra británica, que de paso fue la publicada
para el resto de Europa. Bien, la yanqui contiene 11 canciones entre las que se incluyen Purple Haze, el huracán guitarrero que
anticipa el hard-rock y esa
maravilla que es Hey Joe más The
Wind Cries Mary. Los otros temas se duplican en la edición europea.
Comienza con rhythm & blues fogoso, racial,
contemporaneizado en Foxy Lady, donde escuchamos a Hendrix utilizar la voz
como un instrumento más. La distorsión, el largo solo, el sonido psicodélico
aparece en toda su dimensión en Manic
Depression. Donde demuestra todo su nivel, clase, estilo, su verdadera
identidad como bluesman de ley, Red House,
un blues puro y duro. Llevamos 3 temas y todos diferentes, para no desentonar,
la avalancha popera la encontramos en Can You See Me. La psicodelia lisérgica
la hallamos a continuación, Love Or Confisión. Una de las muchas
innovaciones de Hendrix se produce en el tema que cierra la cara A, el
cuadriplicado de guitarras con distorsión de I Don´t Live Today.
May This Be Love abre la 2ª cara, una canción con magia y maestría, un pseudo sinfonismo
marca del genio de Seattle en esa búsqueda de sonidos que tenía en la cabeza y
que era capaz de expresar a través de la guitarra con voz aterciopelada. De
nuevo aparece el trallazo de rithman and blues en Fire, espectacular, desde este primer álbum Jimi tiene ya cogido el
sonido que desea, buena prueba ésta canción. El nuevo cambio, el marasmo
jazzero lo encontramos a continuación con 3Rd
Stone From The Sun un largo
desarrollo instrumental que tanto le gustan con pequeños "gruñidos" para
tener al oyente despierto, no sea que se nos vaya. Todo lo gran músico que era
lo vuelve a probar aquí, innovación, búsqueda de raíces, sonidos, ecléptico. El
punteo claro, limpio, el soul psicodélico en Remember. La canción que cierra el disco y que da título al mismo, Are You Experienced , es un pequeño
juego, Hendrix nos invita a viajar con él en la experiencia del caos de su
música, en el desmantelamiento del rock.
Jimi compone todo el disco, da importancia a
las letras, ellas fueron las causantes de muchas de las depresiones, quería
escribir todo lo que imaginaba y pensaba,
su mundo estaba hecho de experiencias.-
The Jimi Hendrix Experience
- Jimi Hendrix: guitarra, voz y piano
- Noel Redding: bajo y coros
- Mitch Mitchell: batería
Fire .-
Hay que
dar tiempo y espacio a las obras, sobre todo a aquellas que con el paso del
tiempo se van agrandando como todo objeto una vez te vas acercando más a él. Lo
más insignificante va tomando importancia a medida que la vida pasa, el rock
como cualquier otra faceta artística nos ha dejado maravillas como este 1º
disco de Jimi Hendix que se valora y se potencia mejor cuanto más espacio de
tiempo existe desdes su publicación. Son de esas historias que carecen de
importancia cuando las escuchas al principio, también tú como oyente debes de
ir mejorando y perfeccionándote en el exquisito placer de ir formando tú propia
obra, que no será otra que aquella discoteca que con el paso de las décadas
vayas guardando y atesorando para futuras escuchas bien propias o ajenas.
Es muy posible que para entender en toda su
dimensión las grandes obras de rock, antes es necesario haber adquirido un
sistema de pensamiento, en este caso en concreto, muchas horas de escucha y
atención y tal vez a solas, en tu sitio de escuchar música sin nadie alrededor
que te distraiga para obtener las esencias que se desprenden de los discos de
Jimi Hendrix. Está repleto de matices, oquedades que deberás rellenar con tus
silencios.
Dejando al margen toda parafernalia que
acompañaba a The Experience,
incluyendo las lisérgicas, groupies , mercadotecnia, un mánager ansioso por
sacar canciones que pudieran ser sencillo y ascender a las listas, una vez se ha
llegado, mantenerse como el saltador de pértiga sobrepasando el listón, pero
sin descender, imposible según las leyes físicas; el caso es que la publicación
del Lp Are You Experienced encumbra a
Jimi Hendrix y el éxito es inmediato en Inglaterra como, y eso es noticia,
en su propio país. El verano de 1967, psicodélico
con álbumes “ peculiares “ desde el Sgt. Pepper´s
Lonely Hearts Club Band, (
The Beatles ), Their Satanic Majesties Request ( Stones ) … Con Hey Joe y Purple Haze como singles de su trabajo
realiza un gira por Gran Bretaña, Alemania y Suecia, su prestigio sube como la
espuma aunque para la gran mayoría de la prensa especializada americana no deja
de ser un ave exótica y una rareza, en cualquier caso le admiten para que toque
en el Festival de Monterrey y en una gira americana con The Monkees como
máximas estrellas. No dejó de actuar como sólo Hendrix era capaz de hacerlo,
manejando en ocasiones la guitarra con doble intención y realizando ataques
sexuales a sus propios amplificadores. O a lo mejor no existía ninguna simple ni triple razón, simplemente
se hacía y punto.
AXIS
: BOLD AS LOVE .- Diciembre de 1967 .-
Si en apenas unos meses había conseguido
situarse, si sólo el anterior trabajo llegó al número 5 de las listas
americanas, lo cual es una barbaridad para lo que Jimi Hendrix había tenido que
padecer en su propio país para simplemente expresar su música, su arte, su feeling;
éste 2º trabajo sólo en USA llegaría al n º 3 mientras inundaba de su
magia y excentricidad a parte del planeta rockero. Para algunos todo parece que
caminaba demasiado rápido, si hemos observado con atención su biografía, ya
llevaba muchas tablas, escenarios y trabajos de manutención cuando a finales de
1967 tiene dos soberbios trabajos editados y colocados para quien quiera
escucharlos y degustarlos si sus mentes
están lo suficientemente abiertas, pues Axis:
Bold As Love no difiere en mucho al anterior, ahonda en sus muchas virtudes
y extiende por los surcos su marca de arco iris de varios colores que poder
ver.
Todas las canciones son composiciones de Jimi
Hendrix a excepción de una que firma a medias con Noel Redding : She´s So Fine.
En la grabación del Lp, el grupo no ensayaba, Jimi les hacía aprender la
canción, les decía lo que necesitaban, lo hacía todo él, no quería que nadie,
ni sus propios músicos, se metieran en su trabajo, así ni su bajista ni el
batería tenían más pistas ni por supuesto Chas Chandler, su productor siempre
al acecho.
Hendrix tenía todo en su cabeza cuando entraba
en el estudio, solía realizar 4 grabaciones con el bajo, después la batería y
la parte vocal con la guitarra rítmica. Siempre todo bajo su control. No paraba
de tocar incluso cuando se iba con alguna de las muchas chicas que se siempre
andaban por allí. Grabar para él era una obsesión, nunca trabajaron como un
equipo.
Exp
abre el Lp con Jimi distorsionando su voz y su guitarra, jugando con ambas, lo
cual no deja de ser sorprendente en 1967. Todo el álbum viene a confirmar la
evolución de un genio y su plena aceptación en el mainstream rockero. Posos de jazz saturnino en Up From The Skies y en One Rainy Wish . Desarrollos inusuales a lo largo del mástil en Spanish Castle Magic. Slides poliédricos en Wait Until Tomorrow donde además suenan 6 notas al unísono. ( hay
que prestar atención a lo que se escucha y en silencio, ya dije lo del cuarto
tranquilo de música ). Hay también como no podía faltar mucho R&B
enmascarado en Castels Made Of Sand y en If 6 Were 9.
Canciones cortas extraordinarias donde tanto
Mitchel y Redding forman una base casi perfecta cuando la ocasión es propicia, Little Wing, balada estrella de lo mejor
en su vertiente tierna. You´ve Got Me
Floating tema donde podemos escuchar la voz del bajista junto a la de
Hendrix, siguen guitarras distorsionadas y el único tema firmado por Noel Redding y
cantado por él mismo She´s So Fine. En Little Miss Lover Mitch Mitchel marca muy bien el ritmo con la batería
y Jimi coloca toda su habilidad haciendo vibrar la Stratoscaster; en Bold As
Love se tiene la sensación de que la grabación debió de ser muy dura
y fructífera y que el grupo buscaba un sonido que hallaría de pleno en el
siguiente álbum. Por faltar, no falta de nada, hasta vibratos alucinantes en Ain´t No Telling.
- Jimi Hendrix: guitarra, voz, piano, bajo y flauta
- Noel Redding: bajo y voz
- Mitch Mitchell: batería, glockenspiel y voz (y
entrevistador en "EXP")
Burning Of The Midnight Lamp.-
Tras la búsqueda
constante de sonidos, texturas, que significaron estos dos discos Are You Experienced y Axis: Bold As Love, es en Jimi Hendrix,
como si hubiese sacado los demonios que llevaba dentro durante mucho tiempo, nuestro
chico protagonista tiene un constante enfrentamiento con Chandler ¡Ay los
managers !, que contempla consternado como para las sesiones de su tercer álbum
el guitarrista se aleja de la búsqueda de la canción concreta o single, vaya,
para entendernos, y la disciplina en el estudio de grabación que hasta entonces se había dado, pasa a
sumergirse en la psicódelia menos domesticada.
A fin de cuentas y aunque esté en la cima,
Hendrix es un inconformista completo que busca constantemente, inquieto, su
cabeza no le deja estar mucho tiempo con
una idea o concepto, necesita mucho más, cansado de hacer canciones de 3 minutos en su cerebro bulle la idea de hacer
simplemente música sin la estupidez de etiquetas. Sin embargo, harto de un
público que aplaude hasta sus fallos y azuzado por su necesidad de progreso
musical, intenta desmarcarse del
restringido código del pop. Tras el enorme éxito de Axis: Bold As Love, avanza calladamente con inteligencia e
inspiración.
Todo lo que desarrollaba en directo quería
transmitirlo en los surcos de sus discos. Esa prestidigitación de que hacia
gala, ese sexo humeante con el que acariciaba su guitarra como si fuese una
mujer o una prolongación fálica, la amaba,
la ataba, la mordía con los dientes, a veces se la subía a su espalda arrancándole
sin cesar orgásmicos quejidos ante convulsiones pélvicas. Toda esa inimitable
técnica que poseía al pedal del wah-wah la hacía hablar mientras, ilusionista
óptico, emitía notas tirando de hilos imaginarios. Al margen de los trucos,
sostenía el tinglado con un puñado enorme de canciones creadas y compuestas por
él, más el cancionero tradicional de los bluesman que no perdía un ápice en su
cabeza y en sus dedos, todo esto tenía Hendrix en mente para acometer su más
grande obra y legado al rock, el doble Lp : Electric
Ladyland – 1968.
LA ESTRELLA .- Eurípides, un griego de la
Antigüedad, uno de los tres grandes autores de la tragedia griega junto a
Esquilo y Sófocles, que al parecer se supone murió devorado por los perros en
Macedonia, pero hay quien difiere. Bien, la característica de su obra radica en
que hay diferentes cosas que se van complicando las unas con las otras hasta
que cualquier movimiento se hace imposible. Salen muchos personajes, cada uno
con sus propias circunstancias, razones y quejas, todos persiguiendo, a su modo
la justicia y la felicidad. Lógico. Pero es imposible que prevalezca la idea de
justicia, que todos alcancen la felicidad. Y se produce el inevitable
caos. ¿ Entonces qué sucede ?. En realidad, algo muy simple. Al final aparece
un dios. Y controla el tráfico. Tú vas para allá, tú para acá, tú te juntas con
aquél, tú aquí un rato quieto. Todo se resuelve. A esto se le llama deus ex machina. En las obras de
Eurípides suele aparecer casi siempre, pero sobre éste punto la crítica está
dividida. ¡ Sería tan cómodo que apareciera semejante personaje a recolocar a
todo el mundo en la existencia real! ¡ Estoy atrapado! , un dios bajaría
deslizándose de lo alto y lo resolvería todo. Nada podría ser más fácil.
Woodoo
Chile .-
Habiendo actuado
ya en Estados Unidos, como teloneros de
The Monkees en una gira, en el Festival de Monterrey, en el Fillmore saliendo
antes que Jefferson Airplaine; Chandler consiguió un excelente contrato con la
Reprise de un cuarto de millón de dólares aunque a Hendrix lo que más gracia le
hizo fue que lo reconocieran por la calle y siendo un tipo importante en el
underground de la Gran Bretaña, todos
los pequeños dioses querían meter mano en la caja y hacer jugadas. Todo durante
el verano en el que grabó la mayoría de temas que compondrían Axis: Bold As Love y en la que dio
tiempo también a hacer un pequeño tour europeo con The Animals.
Pero estamos en enero de 1968 y se inicia una
gira por Estados Unidos con todo vendido y 54 conciertos por delante y donde
empezaron las desavenencias con Noel Redding
y con Mitch Mitchel. Pasadas las tormentas y con un cierto relajo durante
el verano escribió buena parte de los
que sería Electric Ladyland .
Hendrix, su cabeza que no paraba y quería ordenar el caos que veía a su
alrededor, deseaba entre otras cosas grabar un álbum con varios músicos como
así fue, aunque la The Experience
fuera la base, pero abiertos a otros campos que bullían en su interior. Deseaba
dejar atrás la época del ácido o psicodélica y convertirse en un tipo serio en
el escenario abandonando en parte el circo que él mismo había tomado como forma
de vida. A la semejanza de los viejos bluesman, recuperar sus raíces y sus
esencias y caminar por nuevos derroteros. No sabemos si se le aparecería en
algún momento un deux ex machina. El caso es que con otros profesionales grabó
en marzo varias cosas, gente como Mike Bloomfield, Buddy Miles, Stevie Winwood,
Al Kooper. La mayor parte en Los Ángeles, con Eddie Kramer de productor, con que quien
Hendrix estaba cada vez más identificado y deseoso de aprender y meterse en el
alma de los sonidos.
Grabado el disco con la base The Experience, Jimi estaba a gusto y
contento con el trabajo realizado e incluso antes de separar al grupo, en
noviembre de 1968, dio otro famoso concierto en el Albert Hall londinense, pero
los problemas se acuciaron y en febrero de 1969 se anunció oficialmente la
ruptura. La división de los pequeños dioses quedó de la siguiente manera:
Hendrix se llevaba el 50% de los beneficios brutos, el 25% para Redding y
Mitchel y el otro 25% restante para Chandler con su socio, un tal Jeffries.
Todo lo que pasaba por la cabeza de Jimi al
margen de algunas sustancias lisérgicas, mujeres y música, era regresar a los Estados Unidos y comprar unos estudios y volver al Village, en Nueva York.
Muerta The Experience, cansado de ella y de hacer el pasayo en escena, ya lo
tenía decidido. Quería ser lo que siempre había perseguido, ser un músico serio
y no aquél loco negro que incendiaba la guitarra, mordía sus cuerdas y
provocaba a la gente. Ese Hendrix murió en su interior , la primera escala para
demostrar quien era, sería en Toronto.
Rainy Day, Dream Away.-
Desgraciadamente su fama le precede y en
el aeropuerto le decomisan heroína en el bolsillo, aunque al parecer el no
consumía y simplemnte, apareció por allí, podría ser conociendo al personaje,
pues él lo que confesó que tomaba de manera asidua era hachis y LSD. Pasó por
la cárcel, pudo salir más tarde y el affaire quedó listo para sentencia el 11
de diciembre, donde ¿ adivinan ? Salió inocente. Exacto, han acertado.
Aunque su vida transcurre entre Londres y
Nueva York, incluyendo algunas novias a una parte y otra del Atlántico, que
poco me importan, el caso es que volvió a encontrarse con su amigo del ejército
Billy Cox y retener a Mitchel y en mayo ya estaban tocando los tres. De ahí
salió la banda en el Festival de Newport y en agosto actuaron en el mítico
Woodstock. Al mismo tiempo, Hendrix ya desembolsó la bonita cifra de medio
millón de dólares en lo que iba a ser Electric Ladyland Studios. Por
ahora no le iba nada mal el asunto económico, sólo en el festival de los
hippies se embolsó 18.000 dólares y otro tanto en el Festival de Denver. ¡ vaya
vaya , como cambian las fortunas de los dioses locos ! Aunque a mi entender,
muy merecidos.
Hendrix
busca y encuentra ese sonido que lleva un lustro persiguiendo para disgusto de
su mánager, Chandler. Las sesiones de grabación del 3º disco del guitarrista se
aleja de la persecución de la canción concreta, no hay obsesión por el hit
infalible, aunque lo tiene, y nace y crece gracias a la sinergia entre el
tándem Hendrix-Mitchel, un cada vez más incómodo Reddindg y los numerosos
invitados que están por allí, desde Stevie Winwood, Buddy Miles, Al Kooker, pero
el jefe de contratación del grupo debe de dar de cabezadas al poner en riesgo
la empresa que ahora también iba, sobre todo en rendimientos económicos.
Hendrix debía de estar muy a gusto
experimentando, de hecho en los Studios Olympic Sound londinenses, en octubre
de 1967, junto a Brian Jones y dos bajistas, el suyo : Mitch Mitchell y Dave Mason
( Traffic ) grabaron 2 tomas de la canción
My Little One, algo así como
fusión entre el rock y música oriental.
El País
De La Dama Eléctrica es un lugar sólo visitado por los mejores y Hendrix lo
consigue para grabar la obra cumbre de su carrera. Nueva York y Los Ángeles son
los escenarios de la grabación. En el verano de 1968 Jimi había hecho jams con
varios de los que intervienen en el álbum. Elecrtric Ladyland crea, a mi entender, una música que
corresponde a las visiones diabólicas de la imaginación sin límites de Hendrix.
Llega a la frontera de la perfección musical haciendo de su guitarra eléctrica
un elenco transportador de unas melodías sin parangón. El Lp supone un gran
cambio en su trayectoria musical, Jimi
lleva a fondo el desarrollo de cada pieza.
And The
Gods Made Love abre el disco y es síntoma de lo que nos espera, los temas del álbum aparecen
unidos. Croostown Traffic es un funk-rock
que anticipa los sonidos de varias bandas en los 70. Woodoo Chile en la que Hendrix hace un solo maravilloso debidamente
ayudado por el órgano, la batería es potente, electrificante, una manera de
decir y dar a conocer el universo hendrexiano, de aquí parto y hacia allí voy,
con la reformación del pedal del wah-wah obteniendo un sonido muy parecido al
de una trompeta con sordina, un blues evolucionado con la singular maestría de
un genio de la música. Still Raining,
Still Dreaming es de lo mejor del Lp, Jimi hace hablar a la guitarra
mientras Winwood crea un clima envolvente debidamente acelerado por la batería
de Mitchel . Lot Hot Summer Night es
una canción sensual para dar paso a la fulgurante All Along The Watchtower una
buena versión de una canción que Bob Dylan llevaría al éxito. Hendrix crea un ritmo contagiante con su guitarra y logra una fuerza rítmica felizmente secundada por el grupo. En la 2ª
parte de Woodoo Chile Jimi hace uso
del wah-wah de una manera magistral mientras el grupo se lanza a una orgiástica
mezcla de sonidos sobre la que emerge la voz del guitarrista.
Hay un clásico del R&B de Nueva Orleans: Come On, el suffle con predominio del
órgano eléctrico: Rainy Day, Dream Away, un buen uso otra vez del wah-wah en The Burning Of The Midnight Lamp,
algunas reminiscencias de Robert Johnson a ritmo de walking bass espídico en Gypsy Eyes.
¡ Que pase el siguiente !
Después de la resolución del tribunal de
Toronto, Jimi Hendrix regresó a Nueva York con la intención de trabajar en su
estudio con Buddy Miles y Billy Cox con quien grabaría el día final de año en
el Fillmore East, la banda no podía tener mejor nombre: Band Of Gypsies; su 2º
concierto fue a mediados de enero en el Madison Square Garden, la banda estaba
mucho más compenetrada. Aun así el disco que saldría unos meses más tarde sería
la sesión recogida la noche vieja de 1969.
The Jimi Hendrix Experience
- Jimi Hendrix: guitarra, voz, piano, bajo, clavicordio eléctrico y percusión
- Noel Redding: bajo, guitarra rítmica y voz
- Mitch Mitchell: batería
- Jack Casady: bajo
- Larry Faucete: conductor, conga
- Mike Finnigan: órgano
- Jeanette Jacobs: voz
- Al Kooper: piano
- Mike Mandel: piano
- Dave Mason: guitarra de 12 cuerdas, voz
- Buddy Miles: batería
- Fred Smith: saxo tenor
- The Sweet Inspirations: coros
- Steve Winwood: órgano
- Chris Wood: flauta
- Brian Jones: percusion
1969 .- Con 3 obras en el mercado y una
evolución muy clara en su música que se puede apreciar con los álbumes en
directo que poco a poco fueron apareciendo en años posteriores, 1969 fue un
cambio sustancial en cuanto al mundo del rock se refiere, una catarsis sin
igual. Los movimientos sociales eran importantes y en Europa la revolución
estudiantil de la primavera del mayo del 68 se llevó por delante al general De
Gaulle ; Jimi Hendrix se encamina en este año y medio que le queda de vida a
una actividad frenética en cuanto a su status de músico. Nada más hecharle una
ojeada a sus directos y escucharlos, por supuesto, para avalar su evolución.
Dejando de lado sus archiconocidos shows de Monterrey, Woodstock, Isla de Wight
o el Royal Albert All londinense, baste
oír los conciertos de Estocolmo ( 5 de septiembre de 1967), París ( 29 de enero
de 1968), más dos americanos San Diego ( 24 de mayo de 1969 ) y Atlanta ( 4 de
julio de 1970). Se aprecian las matizaciones evolutivas que Hendrix dotó a su
música conforme transcurría su carrera y cómo estructuraba el repertorio sobre
el escenario. De la crispación en formato de pop de apenas 3 minutos de duración
que hacía gala el 1º año, Hey Joe o The Wind Cries Mary del directo
escandinavo, a las mixturas del blues ancestral que tanto gustaban a los
europeos, en el show parisino injerta Killin
Floor, Red House o Catfish Blues.
Ya famoso en su tierra, el maremágnum sónico
fuerza a las canciones a convertirse en puras improvisaciones, jams
kilométricas para disfrute del respetable que asiste atónita en San Diego. Allí
empalma Red House con Woodoo Chile junto a clásicos personales
con temas ajenos al acervo del pop-rock sin que se noten las costuras
melódicas. Un año más tarde, ya en el show de Atlanta, Hendrix espoleado por
otros partícipes en el evento como Johnny Winter o The Allman Brothers hace
extensas jams improvisadas que es la regla de oro del directo. Ejemplo en Fire o Hear My Train.
Los
peores males son, a menudo, el resultado de no pensar por uno mismo, llevados
por las circunstancias, por el ambiente, independientemente de sus muchas
actuaciones durante 1969, creo que Hendrix se lo pasaba genial en su estudio
neoyorkino grabando y probando sonidos. No tenía urgencias de sacar nuevos
discos, con el doble había suficiente talento y música para escuchar y la
edición de Smash Hits- 1968, una
compilación de 12 temas que cumplía parte de los agobios de las discográficas.
El año le aclamó con varios premios, el finiquito de The Experiencie y la nueva The Gispy Band con quien publicaría el
último Lp en vida.
BAND OF GYPSIES-
Abril de 1970 .-
Diga lo que quiera Hendrix y su entorno
de que no estaba satisfecho con el resultado. A estas alturas de su obra y
vida, nada le dejaría bien pues su perfeccionismo le llevó a enfrentamientos
constantes con cuantos músicos acabarón a su lado. Es un genio de la
composición y ese halo de ángel sólo roza a algunos y a él le dio de plano.
Con Miles y Cox desarrolla lo que en ese
momento tiene en su cabeza, y la guitarra eléctrica simplemente es una correa
transmisora por la que va su luz y su fuego.
Como tenían contrato con Capitol y le debían
un disco, pues hala, éste Band Of Gypsies,
que además es estupendo. Desarrollos largos,
canciones sostenidas en unas largas partes instrumentales, hay 3 de los
6 temas que componen el trabajo. En Who
Knows ya nos permite valorar la nueva banda en la longitud del tema, más de
9 minutos, funk sincopado y ralentizado/estirado hasta el desmayo. En Machine Gun Hendrix quiere demostrar
cómo desea desarrollar una canción fuera del estudio, quizás menos técnico pero
con más riqueza sonora, puede que de este lote sea la joya y pase desapercibido
a las primeras escuchas, pero los desparrames huracanados que imitan el fragor sónico de una batalla
encarnizada, con su reproducción de silbar bombas cayendo, alarmas antiaéreas y
vómito mortal de las ametralladoras. Con
estas dos canciones-desarrollo se ventila una cara.
Changes es el único tema de Miles, pues todos los
demás son de Jimi Hendrix, abre la cara B. Crescendos vertiginosos en We
Gotta Live Together y las otras
dos composiciones largas también : Power
Of Soul y Message To Love.
Algunos debieron de aprender bastante de
discos como éste, me viene a la cabeza Neil Young sobre todo con Crazy Horse y
Sampedro en la guitarra, esos desplomes desarrollados durante largas
cabalgadas, aún hoy el canadiense lo hace en directo, no sólo en discos live.
Sólo describiré los discos que a partir de su
fallecimiento me parecen interesantes y que poseo. Antes de dejarnos Jimi
Hendrix tenía en la cabeza formar dos bandas: una en la que se incluyera una
gran instrumentación, no descarten que formase parte de la misma Brian Jones ( 1969), y
otra en forma de trío. Él iba a ser el gran ordenador, el que compusiera y realizara
los arreglos. Importante para él.
Todo el material grabado que dejó desde que
salió del servicio militar y de su base aérea hasta septiembre de 1970,
teniendo en cuenta que en vida sólo publicó 4 Lps y el que dejó acabado, The Cry Of Love, editado poco después de
la mano de Chas Chandler, podríamos decir que contabilizo 18 álbumes oficiales
o legítimos con un total de 150 canciones, obviamente contando con los
festivales de Monterrey, Woodstock, Wight, Newport y sus muchas colaboraciones
con otros músicos como Buddy Miles, Clapton y Steve Stills. No está nada, pero nada mal en tan corto espacio de vida. ¡ Que lástima !
THE CRY OF LOVE – Febrero de 1971 .-
Juego de malabares, momentos, días y noches, según se encontrase Jimi
Hendrix así salió este Lp póstumo que vio la luz con él ya fallecido, pero es
suyo de arriba abajo. Grabado donde más tiempo pasaba en la Electric
Lady Studios de Nueva York con Mitch Mitchell en la batería y Billy Cox
en el bajo más alguna ayuda tipo Stevie Winwood o Chris Wood.
Quizás ahí entre mezclas, monitores, pasase el
mayor tiempo posible y fuese realmente el músico y la persona que quería ser.
El disco representa una parte importante de su carrera, no por la música que contiene,
sino por la duda que confiere.
Rasgos demoníacos, guitarrazos en toda su
expresión en Freedom, Ezy Ryder, Straight
Ahead, In From The Storm.
Experimentales como en Drifting o Astro Man . R&B, guitarra ratonera en Night Bird Flying. Un blues a palo seco como debe de ser
con armónica incorporada en My Friend, o más duro aun con guitarra
slide y acústica en el tema que más me gusta y que cierra el disco: Belly Button Window. También
tenemos alguna balada como Ángel.
The Cry
Of Love encierra los diferentes estados de ánimo a juzgar por las letras de
las canciones. Hendrix iba de un mundo maravilloso a la catástrofe. Es un
trabajo inmediato, como si grabase según el momento de ánimo que poseía en su
interior en ese momento. Hay que tener en cuenta que Jimi había pasado un época
terrible con alguna detención y depresión, y estaba harto de tocar la guitarra
con los dientes como ocurrió en un canal de la televisión alemana porque venía
en el contrato; ya dije que eso en su interior quedó atrás hacia muchos meses:
como quemar guitarras en público o estrellarse en los amplificadores. El Lp
refleja cada instante, pues se grabó entre 1968 y 1970. En total 12 temas, casi
uno para cada estado de ánimo.
A Jimi le vi sacar de la guitarra en 5 años lo
que a otros les costaría 25. Algunos tipos creían que Hendrix estaba loco, no
podían entender la razón de que un hombre estuviese tocando constantemente la
guitarra y que la considerase como, poco más o menos, una extensión de su
cuerpo.( Billy Cox)
Hasta aquí su obra que vio publicada en vida a
excepción de The Cry Of Love. A
partir de aquí enumeraré aquello que creo merece la pena de un compositor tan
singular y especial como Jimi Hendrix.
En estudio.-
La banda sonora Rainbow Bridge- 1971, comprende 8 temas grabados por Hendrix, es
muy buena y los temas contenidos en la misma son excelentes, especialmente Hear My Train A Comin´en el cual Jimi
toca maravillosamente y grita su amor frustrado. En Eart Blues el trabajo de la banda parece más conjuntado y la labor
de Miles interesante. El Lp es una muestra post-muerte maravillosa y
recomendada especialmente en los títulos contenidos y la calidad de los mismos.
Al margen de Miles y Mitchel en las baterías, Cox al bajo, aparecen The
Ronettes, Ghetto Fighters o Juma Edwards en la percusión.
Loose
Ends – Febrero de 1974 , aunque carezca de buen sonido es un trabajo que se
puede escuchar, contenedor de ensayos de las dos formaciones de The Experiencie. La primera cara
contiene Burning Desire, un
maravillloso tema con espectacular cambio en su mitad. Born A Hootchie Man sigue la línea
del anterior donde la voz de Miles se confunde con la Hendrix. Aparece
hasta el clásico de Carl Perkins Blue
Suede Shoes y hasta un tema de Dylan, es un trabajo muy irregular.
CRASH
LANDING .- Marzo de 1975 .-
Aunque para la grabación de este disco su
productor ( Douglas ), tuvo que contratar a unos músicos de sesión para grabar
algunos temas. La impresión se hizo en los tiempos de Band Of Gypsies y la
música contenida es una sorprendente síntesis de jazz-blues excepcional para
todos. Este disco es la 1ª grabación oficial que dejó Hendrix antes de morir y
es un álbum fabuloso del primer al último tema, contenedor de diferentes
climas, exuberantes, espontáneos y magníficos. Sólo hay 2 canciones que ya
conocíamos: Message To Love y Stone Free Again, los 6 restantes son nuevos,
en temas como Peace in Mississippi la
guitarra de Jimi suena más fuerte que
nunca. Trabajo recomendable y comparable a cualquiera que hubiese
grabado en vida.
MIDNIGHT LIGHTNING .- Noviembre de 1975.-
Segundo Lp después del fallecimiento de
Hendrix, como el anterior un gran álbum con la mayoría de los temas inéditos.
Contiene el notabilísimo Machine Gun y temas destacables como Trasman, Hear My Train u Once I Had A Woman, desde luego un buen sucesor
de Crash Landing.
Destacar que Jimi toca con músicos nada
habituales en él, gente como el batería Alan Schawartzberg, Lance Quin en las
guitarras o vocalistas como Hilda Harris y Vivian Cherry.
WAR HÉROES.- Octubre de 1972 .- Restos de la buena Experience están contenidos este álbum. Hay temas nuevos y algunos
ya conocidos. Rock contundente como el que abre el Lp, Bleeding Heart donde Hendrix
hace hablar y gritar a su stratoscaster. Por supuesto contener la magnífica Highway Chile ya es garantía de que aquí
hay “ pomada “ , una canción llena de calidad. El primer instrumental es otra
joya, la apertura de bajo de Cox es excelente y el regateado de guitarra que se
marca Jimi difícil de superar, sólo al alcance de los elegidos, el tema es Tax Free. Le sigue otro juego de instrumentos extraordinario
con un arranque espectacular y que luego se para, con un Hendrix que se pone a
hablar con los músicos, ¡ no lo entiendo!; dejan de tocar y la voz del
guitarrista parece salido de una polka, cambia todo y para mí lo jode, me
refiero a Peter Gun Catastrophe. Stepping Stone es otra canción cazurra y
ratonera con un buen juego de bajo+batería+guitarra, haciendo alusión a los
queridos ácidos que tanto le gustaban; buen sabor de boca para cerrar la cara
A.
Midnigt es
el 3º tema donde interviene Mitch Mitchel con la batería, los otros 2 son Tax Free y Highway Chile, otro
instrumental a destacar, excelente rock sin contemplaciones, sólo calidad,
tema totalmente improvisado con la
peculiar entrada de la guitarra. Sólo Hendrix es capaz de sacar una canción con
una eléctrica que habla, susurra y se deja acariciar como una gatita, 3 Little Bears, a medio camino entre un
reggae y un vacile; para cuando quiere para mimar a su stratoscaster, y la hace
gritar cuando le apetece, es más, le pega un “peñisco”.
Distorsión semejante y cambios de ritmos constantes en otro instrumental: Beginning. Cierra el Lp Izabella, un tema coral con varios coros
acompañando la voz de Jimi y a su chillona guitarra.
Producido por Kramer & Jansen y por
supuesto, sacado de las cintas de Elecric Ladydand Studios. Curiosamente este disco
salió antes que los dos reseñados anteriormente.
NINE TO THE UNIVERSE .- 1980 .-
Jimi
Hendrix necesitó 3 años para imponer su propio estilo. Cobró popularidad
rápidamente gracias a su primera actuación en la TV inglesa, grabó su primer
single y posterior Lp con los cuales, si bien no encontró una música y una
cultura, si la definió. Ultrajó, sedujo, evocó a una generación, actuó en
cuanto festival se preciase. Así estaban las cosas cuando en 1969 apareció en un
escenario muy diferente, en un elegante club de jazz del oeste de Londres, el
Ronnie Scott´s, donde sólo gente con un cierto pedigrí, es decir, dinero
suficiente para poder entrar.
En 3 años Jimi Hendrix recorrió las
resbaladizas calles del Soho hasta llegar a tan selecto club. Su interés por el
jazz era evidente y sus contactos con Rahsaan Roland Kirk eran evidentes, éste
era capaz de tocar hasta 3 instrumentos a la vez; hicieron buenas migas y
planearon grabar juntos. Lástima, el guitarrista no vivió tanto.
Cuando Hendrix regresó a Nueva York continuó
quejándose de los condicionamientos en contratos y management que le impedían salirse
del mundo del pop. Bueno, él es y era un verso suelto y a pesar de estos inconvenientes,
inevitablemente derivó hacia una embrionaria fusión de jazz y rock.
En la
primavera de 1969 cambió de músicos, reclutando a Billy Cox como bajo y
a Buddy Miles como batería. Entre las sesiones de grabación de su último álbum
pop, Hendrix y su banda y los numerosos visitantes crearon e interpretaron la
música que luego sería Nine To The Universe,
en los Studios Record Pant, de N.Y.
Estos 5 temas que componen el Lp son el
resultado de grabaciones realizadas sin presiones y durante ratos de ocio, a lo
largo del año 1969. Suenan como sino estuviesen ensayadas, porque en realidad
no lo están. No estaba destinado a ser editado; lo que en ellas se oye es a
Hendrix en su máxima expresión como músico, divirtiéndose al tocar, por primera
vez rodeado de muy buenos músicos y no enfrente. De esto trata este disco,a Miles y Cox, se añaden los guitarristas Jim McCartey y Larry Young con un
enriquecimiento mutuo de intercambios generosos que agradecemos. Como en
cualquier jam el objetivo es el perfeccionamiento. Hay temas largos, a fin de
cuentas se trata de encontrar al Jimi más natural, fresco. Las sesiones se
desarrollan en el estilo usual de Hendrix: establece una pauta en lo que al ritmo
se refiere para bajo y batería, ellos la siguen, proporcionándole a él una
sólida base de arranque, desde el cual acometer no sólo su incomparable riffing,
sino su sorprendente carga rítmica. Su manera de entender al tocar la guitarra
es a veces plena, tan completa en alcance y matices, que suena como una banda
entera.
Lo produce Douglas que había trabajado con
gente como Muddy Waters, Duke Ellington, Charles Mingus …Gente a su alrededor
que no se intimidaba de tocar al lado de Hendrix. Se recalca la libertad y
generosidad de estas sesiones, se llega tan lejos que se decide etiquetar a este Jimi “ sin ego “, sorprende este Lp pues
nos encontramos con un guitarrista que es el Everest del rock.
Era la música que en 1969 tenía en la cabeza
el de Seattle, su naturaleza iba más allá del clásico formato de la canción pop,
que por otra parte él ya había ayudado a evolucionar. Por ahí caminaba y
parece que por aquí estaría un buen rato. Sus proyectos de grabar con grandes
del jazz quedan en hipótesis. Quería un desarrollo más imaginativo de lo que
aún conocemos, y sobre la que tristemente, no podemos especular.
El Lp es instrumental, 5 temas de largos
desarrollos: Nine To The Universe y Jimi/Jimmy Jam abren la cara A. Young/Hendrix,
Easy Blues y Drone Blues están en
la cara B. Grabados entre los meses de marzo, abril, mayo y junio de 1969.
En directo
.-
Comentaré algunas obras interesantes
de Hendrix, bien por la calidad o el momento en el que se grabaron, pero en realidad
me quedaré sólo con 2 de los muchos discos oficiales , bootleg o piratas que han
ido saliendo a lo largo de los años. En algunas ocasiones, simplemente por
curiosidad le he echado una ojeada a las estanterías de Lps o Cds de Jimi por
ver qué tenían, sobre todo en los grandes almacenes tipo El Corte Inglés o FNAC
, o tiendas especializadas de grandes urbes. En Amsterdam tuve en mis manos
Live In Stockholm que es una excelente grabación, pero contenía demasiadas
canciones que ya tengo en los oficiales.
Live In
París – 1968 .- Su paso por la capital francesa le recoge en un momento
espléndido con una gran repertorio y con el sonido clásico del caos que
generaba a su alrededor. Cóctel infalible manufacturado por el tipo que mejor
conoce la obra de Hendrix, su productor Kramer, eso ya es una garantía de que
el producto que tienes en las manos es recomendable.
Live At Woodstock- 1969
.- Hasta con The Star Spangled Banner,
con mucha lluvia caída a lo largo del día, barro, agua, unas condiciones higiénicas
de ríase usted, frío, y si le añadimos algún estupefaciente que nos
imaginemos ingerido en cualquier momento, para coger el punto, vaya. Hendrix
era cabeza de cartel y salió el último. Menos mal que era él, pudo sacar pecho
y poner aquello patas arriba. Para mí, tiene más valor histórico que musical.
Live At Monterrey .-
1970.- La presentación ante sus
paisanos cuando ya era un monstruo reconocido, es muy recomendable, el repertorio
de quitarse el sombrero: The Wind Cries
Mary, Purple Haze, Hey Joe …con esto basta para inmortalizar a un guitarra
como Jimi. Si se encuentra en vinilo mejor, es de una calidad superior.
Publicado en el sello Experiencie Hendrix.
Isle Of
Wihgt – 1970 .- Demoledor de principio a fin, hay alguna versión que recoge
Good Save The Queen, en una línea paranoide Hendrix llegaba
a lo mismo que hizo en Woodstock con el himno americano, así pues, se adelantó
un poquito a los Sex Pistols. En Along The Watchtower realiza un solo
estupendo; Freedom, Foxy Lady, Midnignt
Lightning…
HENDRIX IN THE WEST
.- 1971 .-
Un disco que empieza con una canción de Chuck
Berry no puede ser malo. Johnny B. Goode,
hasta salió de single, alcanzado números altos en las listas incluyendo España.
Llega un momento que el ritmo que impone Hendrix no es capaz de seguirlo la
banda que se ve desbordada por la increíble rapidez del guitarrista. El 2º tema
es Lover Man de cosecha propia, para
continuar con un clásico de Carl Perkins, el archiconocido Blue Suede Shoes, pero oiga, en una adaptación más bluessy que otra
cosa, medio tempo, nada que ver con el R&R original, “ le da otro aire “.
Un temazo como Woodoo Chile requiere
de toda la concentración del grupo, el guitarrista sabe sacar lo mejor de él
mismo con una guitarra que la hace gritar literalmente. Más ratonera y rockera
no puede ser.
The Queen abre la 2ª cara, versión muy sue géneris…
para pasar muy pronto a una adaptación del tema de The Beatles que como sucedía
con el de Carl Perkins, lo cambia casi por completo: Sergeant Pepper´s Lonely Hearts.
Ambos temas son “una broma de Hendrix” que rápidamente se pone a tocar, y lo hace con Little
Wing, vuelta a las raíces que nunca perdió. Blues y más blues. Como no
podía ser de otra forma cierra con Red
House donde Noel Redding y Mitch Mitchel se unen a Jimi en el viaje que éste
les ofrece con su guitarra, es el estado de ánimo llevado a la música.
La grabación y el sonido es estupendo, produce
Kramer & Jansen y por supuesto, en la Electric
Lady Studios de Nueva York.
Si Jimi
Hendrix hubiese superado el bache creativo y personal de 1970, habría llegado a
consolidarse en los años 70. Poco antes de morir dijo que estaba donde había
comenzado. Ya no era un payaso que hacía
cosas raras en el escenario y repetía siempre las mismas canciones, sino un
músico al que sólo faltaba una mayor emancipación respecto a la propia
industria. También reconoció que no podía extraer nada nuevo de su guitarra, y
eso para un rompedor nato que había cambiado el sonido del rock a partir de
1967 era demasiado terrible. Hendirx tenía una enorme voluntad de superación. Era
negro triunfador, surgido de la miseria y estaba habituado a luchar. Su muerte
cortó de raíz el futuro, sumió al rock en el dolor, pero convirtió a la
guitarra en un icono, el guitarrista
zurdo en una leyenda que el tiempo habría mitificado cada vez más.
Si sólo se quedan con lo estrafalario de
Hendrix, no han entendido nada. Como el idiota que se queda mirando el dedo que
señala la luna.
James Marshall Hendrix nació el 27 de
Noviembre de 1942 en Seattle, Washinton, USA y falleció el 18 de Septiembre de
1970 en Londres, Inglaterra.-
DISCOGRAFIA SELECCIONADA
DISCOS PUBLICADOS EN VIDA DE JIMI HENDRIX
AXIS : BOLD AS LOVE .- 1967
ELECTRIC LADYLAND .- 1968
SMASH HITS .- 1969
BAND OF GYSIES .- 1970
DISCOS PUBLICADOS TRAS SU FALLECIMIENTO
THE CRY OF LOVE .- 1971
HENDRIX IN THE WEST .- DIRECTO .- 1972
WAR HEROES .- 1972
CRASH LANDING .- 1975
MIDNIGHT LIGHTNING .- 1975
NINE TO THE UNIVERSE .- 1980
Comentarios
Publicar un comentario