DEEP PURPLE : EL ROCK DE PALO DE ESCOBA
Tres idiotas bailan en una gran nave a los acordes de Smoke On The Water : dos de ellos agarrados a los palos de una escoba mientras un tercero lleva a lo largo de su cintura una raqueta de tenis; los tres a modo de guitarra recorren el supuesto mástil hasta la culminación del punteo de Ritchie Blackmore. A los pocos segundos se les une una cuarta persona, que lejos de quedarse mirándolos atónita se une al grupo simplemente bailando sobre sí misma pues ya no había ni más palos de escoba ni raquetas. De aquellos individuos, sé que todos siguen vivos (por terceros) pero salvo con ella, no los he vuelto a ver hace décadas. Uno acabó sus estudios de Enfermería y se hizo Practicante y está en un pueblo perdido de la ancha Castilla ( no me digan si es la vieja o la nueva), se llama Chuchi; el otro acabó entrando por enchufe de su padre en el Banesto, con los años llegó a director y está en un pueblecito de Extremadura, atiende por García Estévez; la tercera trabajó durante dos décadas en una fábrica de tabaco, hoy es madre de dos chicas veinteañeras y es con la única que mantengo el contacto, se llama Marta y conserva su esplendorosa cabellera larga y morena; el cuarto “guitarrista” es el que les escribe en este blog y ha seguido y seguirá hasta el final militando en el Rock, aparte de avatares personales y de ganancia del sustento, básicamente ha hecho lo que los otros tres pero sin cambiar de traje sustancialmente, lo cual no le convierte ni en mejor ni en peor, sino en sí mismo, suele atender al nombre de Mario.
Aquellos cuatro seres de mediados de los setenta conectaban sus vidas a través del Highaway Star con toda naturalidad mientras iban colocando las bebidas, los vasos de plástico, las botellas de wiski, ron, coca colas… sobre la tarima de una mesa y atronaba por los bafles de la nave Deep Purple en una fiesta que se previa dura y divertida, quizás hasta que el alba llegase o el cuerpo aguantase. Eran nuestros “guateques” fin de curso para gente rara, que escuchaba música ratonera y que tenía el extraño imán de atraer a su alrededor a seres desahuciados de las mentes del buen pensar. No me dejaba de resultar curioso que cuanto más estrafalario, colgado y variopinto colorido de personajes acudían a semejantes aquelarres a través de una música que nosotros considerábamos tan nuestra y acabasen la noche dando tumbos como zombies por entre las paredes; tenían sus derechos, también contribuyeron económica, logística y personalmente a que aquellas fiestas regadas de rock y de alcohol y de sustancias lisérgicas “inocentes” acabasen siendo un éxito y nunca un despropósito.
Todos estos recuerdos van unidos a Deep Purple. ¡Que le vamos a hacer! Hay una música asociada a un momento vital de tu existencia y la banda británica, pasadas algunas décadas todavía los sigo escuchando con el entusiasmo adolescente de aquél tiempo lejano. Menos visceral, con muchas horas de conciertos y de discos escuchados, con la perspectiva que te da el tiempo vivido, años después aún llegué a ver a Deep Purple en directo con una formación al menos “correcta”, aunque claro, la voz de Ian Gillan no era la misma, pero la instrumentación decente. Luego los dejé por imposible por aquello de que los años pasan y es mejor como otros muchos contemporáneos no menear más el árbol, si deseas vivir de la música móntatelo con otro nombre y sigue, no blasfemes en tus propios versos, no vomites en tu plato, no manches ni practiques el incesto. Déjalo sangrar y que corra por el desagüe…
Pero eso era adelantarse al futuro, rápidamente alguien daba la vuelta al Lp para saltarse el tedioso The Mule ,que escuchado un par de veces cansa para colocar sobre la aguja Lazy y seguir con el palo de escoba. Este Made In Japan debió de ser el primer disco de los británicos que aquellos adolescentes seguían como devotos fieles. Gillan, Blackmore, Glover, Lord y Paice formaban un grupo compacto, duro, de blues acelerado bajo la visión del organista que era el que más idea tenía del asunto; allí, sobre un lateral del escenario bajo una capa enorme de cabellos y barbas que recubrían su rostro contemplaba, sentado, sereno, al resto de sus compañeros en sus movimientos espasmódicos, como si recibiesen descargas eléctricas mientras él a veces se perdía en solos de clérigo de iglesia de pueblo.
Míster Jon Lord, el líder eterno de Deep Purple, el único con estudios de música, estudiaba piano desde los 9 años y poseía una amplia formación de jazz, acabó imbuido de los sonidos del rock de mediados de los 60 y a comienzos de febrero de 1968 formó la banda; sólo Blackmore y Paice llegarían al estrellato, pues la voz inicial era la de Rod Evans y Nicky Simper se ocupaba del bajo y de las segundas voces. Lord era el mayor en edad y conocimientos, llevaba la batuta y bajo su manto de guía grabaron un primer sencillo: Hush en junio de 1968, que les colocó en el número 5 de las listas americanas, nada mal para unos principiantes y además si tenemos en cuenta que la canción no era suya, sino del sureño Joe South. En aquella época las cosas se movían rápidas, el boca a boca, el trabajar en numerosos clubs varias veces a la semana, perfilaba el sonido de una enorme multitud de bandas y solistas hasta ir perfilando “su sonido”; en apenas tres meses
sacaban su primer Lp: Shades Of Deep Purple – 1968 y de octubre a diciembre se embarcan en una larga gira por Estados Unidos donde al parecer son más queridos que en su “isla”. Este disco lleno de voces melodiosas y juegos pantanosos de órgano, atractivo crisol de psicodelias, de blues-rock y latiguillos progresivos en el que Jon Lord ordena, manda y toca, hasta se permiten el lujo de hacer una reverencia en la versión de Help .
A comienzos de 1969 colocan dos singles: Kentucky Woman y River Deep Mountain High así como su segundo larga duración: The Book Of Taliesyn que más o menos les sitúan entre las mejores nuevas bandas. En este régimen de agradable mescolanza se mueve su siguiente Lp del mismo año: Deep Purple e incluso llegado a la ego manía manifiesta de Jon Lord graban con la Fhilharmonic Orchestra en el Royal Albert Hall londinense su siguiente Lp: Concerto For Group & Orchestra; poco podían imaginar aquellos chicos que saltaban y recorrían el mástil imaginario de sus escobas que sus héroes habían grabado apenas 6 años antes semejantes aquelarres estrambóticos, jurarían y perjurarían que aquellos no eran estos y como Pedro negarían la existencia y conocimiento de “sus salvadores”, que a imagen y semejanza de los británicos portaban cuan luengas melenas y escasas barbas en ellos, mientras nuestra brujita particular ondeaba hermosa y morena cabellera sobre sus espaldas.
Tras el tercer disco Deep Purple –noviembre de 1969- , Simper y Evans abandonan y entran Gillan en la voz y Glover en el bajo y con la formación clásica acometen el cuarto Lp con la Fhilarmonic Orchesta grabado en directo el 24 de septiembre de 1969. El ambicioso proyecto de Lord unía la fuerza de un grupo de rock con las pautas normales de una sinfónica y una partitura de la denominada música culta; es cierto que en aquella época era algo novedoso y no dejó de ser una exquisitez de su tiempo, pero raro… de echo giraron y en agosto de 1970 lo presentaron en Los Ángeles con toda la parnafelaría. Jon Lord, verso suelto, personaje curioso, siguió grabando por su cuenta y en 1970 saca su primer disco en solitario con colaboraciones de dos Purples: Glover y Paice; en principio era un disco para la banda pero él decidió desviarlo a lo clásico pues de nuevo graba en esta ocasión con la London Symphony Orchestra, edita Gemini Suite.
Por suerte para algunos de nosotros Ritchie Blackmore ya se ve arropado por Ian Gillan y Roger Glover y consiguen dar una definición más granítica al sonido de Deep Purple. No sólo eso, sino que el éxito de Black Night matriz de la nueva línea convencen a Lord; y la voz y la guitarra toman la delantera y es partir de aquí donde toma cuerpo lo que hoy conocemos como la gran banda que llegaron a ser. Toda esta magna obra se concreta en un periodo relativamente corto, de apenas 5 Lps que van del In Rock – 1970 – Fireball – 1971, Machine Head -1972 y Made In Japan -1972 doble en directo al Burn -1974 . Temas estructurados y modulares, rigurosos trabajos de composición, claves instrumentales muy bien coordinadas entre guitarras-voz-teclados, riffs limpios y por qué no, comerciales, un sonido claramente identificable en fantásticos singles como Highway Star, Smoke On The Water o Strange Kind Of Woman.
Ian Gillan: Voz
Ritchie Blackmore: Guitarra
John Lord: Órgano Hammond
Roger Glover: Bajo
Ian Paice: Batería
In Rock – Junio 1970.- LP iniciado con un apabullante tributo a Little Richard, "Speed King", que les aleja de sus inicios psicodélicos y progresivos, con un ritmo endiablado, Gillan cantando como un demonio y la guitarra de Blackmore machacando al paso fiero del combo rítmico. Una letra tremenda y el doble solo de guitarra y Hammond simplemente inolvidable. Esta es una manera devastadora de comenzar un álbum. Blood Sucker es una de las joyas ocultas, un tema poco conocido y poco usado en los directos de la banda. Gillan comienza a mostrar sus agudos y es Blackmore quien se lleva el gato al agua con un riff repetitivo que por momentos recuerda lo que un año después harían en Machine Head. Destaca la parte instrumental, con un solo de Lord corto pero preciosista y los cambios rítmicos apoyando el gustazo del trabajo de Blackmore.Terminar la cara A con Child In Time de casi diez minutos en una espectacular alarde de virtuosismo vocal de Gillan para continuar con el perfeccionismo ténico de Lord y Blackmore en Flight Of The Rat que abre la segunda parte; como parecen divertirse para que todos están contentos - los cinco firman todos los temas-cada miembro del grupo destaca en algunas canciones, así Paice marca el tono de Into The Fire. Recomendables Living Wreck y Hard Lovin´Man que componen en su conjunto un disco clásico, con temas impecables y un sonido particularmente duro, virtuosismos particulares sometidos al bien común del grupo, todos salimos ganando y ahora sí, "los chicos de la escoba" se reconocen en ellos.
La edición del disco a finales de 1970 les mantuvo de gira y fue el inicio de una espectacular carrera de la banda, el siguiente disco vino a confirmar las excelentes expectativas creadas alrededor del quinteto británico.
Fireball – Julio 1971 .- Como si formase parte de una trilogía que no era tal, emparedado en medio de In Rock y de Machine Head, con una portada con la cara de los músicos en forma de espermatozoide se presenta este gran Lp. Ya se observa a un grupo muy sofisticado y que le gustaba jugar con sus instrumentos; desde el inicio con Fireball del que toma el título el Lp con esas voces y ese juego de pandereta final parecen darle un tratamiento diferente a los temas “duros”; la paleta de sonoridades es muy rica, la fuerte sección rítmica que componen Roger Glover y sus poderosas líneas de bajo e Ian Paice y su temperamental batería, uno de los aspectos que mejor definen el álbum, conducen esta potente máquina de demolición a través de unas bases increíblemente blues y funky. Glover y Paice son el soporte perfecto para la acrobática guitarra de Ritchie Blackmore, más intensa y presente que nunca, marcando la dirección y el camino que debe seguir el álbum, del mismo modo que los teclados estratosféricos de Jon Lord añaden textura y profundidad a cada corte de "Fireball". Viene a corroborar lo que escribo la magnífica Demon´s Eye con una guitarra y batería machacona mientras la voz de Gillan sobrevuela, su sorprendente rango vocal se encuentra en la cima en muchos de los mejores momentos del álbum, su interpretación vocal casi se puede considerar perfecta en este disco. Anyoyone´s Daughter es una melodía country que rompe el molde del álbum, lo mejora, precioso y preciso el piano de Lord.
La cara B nos muestra The Mule parte más del lucimiento de Paice y Lord mientras el resto del grupo queda en un segundo plano, muy mesurada en la versión de estudio, nada que ver con el “solo” que aparecerá en directo. Esa variedad cromática del disco les llevará por derroteros ambiguos, sonidos espectrales, negros, envolventes con ese órgano que está presente en Fools, olvidada demostración del talento y la versatilidad de este grupo, tiene un comienzo alucinógeno,hasta que un riff eléctrico lleva al tema al terreno del rock grandilocuente y abrasivo en que se desenvolvían como nadie, juegan con sus instrumentos de nuevo y las voces de Gillan es de lo más destacado junto con la pandereta obsesiva, largo desarrollo de más 8 minutos. Asunto aparte es Blackmore, éste improvisa con el trémolo de su guitarra, es decir, en el puente (donde van sujetas las cuerdas) se introduce una palanca llamada Tremolo o Whammy Bar con la que se modifica la tensión de las cuerdas al gusto del guitarrista. El sonido que produce es un vibrato distinto al típicamente realizado con los dedos. En Blackmore da la sensación de estar escuchando un violonchelo. Esta parte de la canción será ampliamente improvisada en el concierto de Dinamarca del ’72, es una introducción mágica como en los mejores temas de Ángelo Badalamenti en las películas de Lynch. Cierran con No One Came un sonido similar al del viejo maestro Hendrix. En el final se introducen acordes de teclado invertidos, en la que pude apreciar un toque de “Tomorrow Never Knows” del disco Revolver de The Beatles (1966). En cualquier caso, un soberbio Lp lleno de matices para oídos audaces.
En julio de 1971 se embarcan en una gira por Norteamérica junto a la banda The Faces de Rod Stewart y Ron Wood. El éxito obtenido les otorga la solidez suficiente para crear en octubre de ese mismo año su propio sello discográfico: "Purple Records". Todo parecía ir bien pero los problemas estomacales de Roger Glover que fueron incrementándose con el tiempo les hacen poner en peligro varios conciertos y presentaciones y momentáneamente fue reemplazado en el bajo por Chas Hodges, antiguo compañero de Blackmore en la banda The Outlaws; finalmente tras unas sesiones de hipnoterapia pudo solucionar el problema. Todo se debía a una tensión subconsciente.
El 3 de diciembre de 1971 la banda llegó a Montreux, Suiza, para comenzar con las sesiones de grabación de su próximo álbum, las cuales se llevarían a cabo en un casino de dicha ciudad. Al día siguiente, el 4 de diciembre, mientras se presentaban Frank Zappa & The Mothers Of Invention una persona lanzó una bengala generando un incendio que arrasó completamente con el casino. Este desafortunado incidente obligó a Deep Purple a alquilar un hotel vacío por temporada para comenzar las sesiones de grabación de su nuevo álbum. En esta tarea utilizaron el estudio de grabación móvil de The Rolling Stones. Durante el proceso de grabación, mientras recordaban como se había quemado el casino, crearon el tema «Smoke On The Water», cuya letra narra lo sucedido.
Machine Head – Marzo 1972.- Emparentado junto a otros coetáneos en su publicación que con el paso de los años han resistido la prueba del paso del tiempo e incluso acrecentando su dimensión, está fuera de toda duda que este disco de Deep Purple junto al IV de Led Zeppelin y el Paranoid de Black Sabbath pueden formar la Santísima Trinidad del rock potente de Inglaterra a comienzos de los 70. Excelente de técnica, inspiración, la voz de Ian Gillan sigue en auge arropado por una grandeza instrumental soberbia. El disco mantiene toda la pureza y dureza del que el grupo era capaz de plasmar en un estudio, el Lp se grabó en Montreux, Suiza, entre los días 6 al 21 de Diciembre de 1971 con la producción de magistral Martin Birch que daba en el clavo con el sonido perfecto para el grupo; 7 temas en apenas 37 minutos y deja varias canciones inmortales hasta que el Planeta explote algún día.
“Highway Star” es el corte que abre, y mantiene unos ciertos parecidos con los que se inician sus dos anteriores álbumes, como son “Speed King” y “Fireball” tanto en temática como estructura. La base rítmica es impecable, con el bajo y la percusión compenetrándose a la perfección así como Gillan que cumple perfectamente, pero lo que sin duda ha hecho pasar este tema a la historia es el duelo que mantienen Blackmore y Lord durante la parte instrumental del tema, todo un derroche de calidad y virtuosismo en la guitarra y el teclado.
“Maybe I’m A Leo” cambia el ritmo a uno mucho más lento, pero tiene un riff increíble que nos invita a mover la cabeza de forma inconsciente. Destacan sobre todo Ian Paice y los dos solos de Ritchie Blackmore. Una breve introducción de batería da lugar a otro riff magnífico, como será tónica durante casi toda la grabación, con “Pictures Of Home”, machacón, de sonido compacto con una guitarra muy juguetona.
“Never Before” fue el elegido por Deep Purple para ser single de este álbum, pero nunca tuvo la repercusión que de él esperaban. A pesar de ello se trata de un gran tema con un Jon Lord excelente tocando piano eléctrico y Hammond. Podría dividirse en dos partes, una lenta, cerca de ser una balada y otra mucho más funky, al estilo de algunos temas de “Fireball”.
“Smoke On The Water” es sin duda la canción más conocida de Deep Purple y que posee el riff que cualquier aprendiz del instrumento de las 6 cuerdas ha intentado tocar alguna vez. La joya de la corona, contundente, con un ritmo cansino como gota a gota te va martilleando la cabeza con esa batería de Paice que señala el camino, cada uno de sus cuatro compañeros van a lo suyo hasta que explota definitivamente la guitarra y la voz calla por unos segundos para ir apareciendo y disolverse poco a poco entre la percusión y el órgano de Lord.
“Lazy” es sin duda otro de los temas que hace que este disco sea situado casi unánimemente entre los mejores de la historia del hard rock. Tras una introducción de Jon Lord casi sinfónica llegamos a un nuevo riff inolvidable. La mayor parte del tema es instrumental y además de esto incluye la novedad respecto a los anteriores de unos toques de armónica a cargo de Gillan. Una vez que acaba el soliloquio de órgano, quizás es el tema que más me gusta de Deep Purple, es simplemente sublime y sus 7 minutos se me hacen cortos. ¡Tremendo!.
Para terminar “Space Truckin”, uno de los temas más duros del disco, basando su melodía en la línea de bajo y batería gira sobre los viajes espaciales, muy contundente.
2 discos de oro en Francia, 1 disco de oro en Reino Unido y 2 discos de platino en EE.UU.
Deep Purple se dedicó gran parte del año 1972 a intentar conquistar América, grabado a finales de 1971 Machine Head y lanzado unos meses después la idea inicial se truncó por los problemas de salud de Roger Glover, hubo que cambiar de planes y tras iniciar la grabación de un nuevo disco en agosto de 1972: Who Do We Trink We Are – 1973; el grupo había pasado diez días en Roma con la unidad móvil de The Rolling Stones pero sólo habían grabado unas cuantas ideas, en ese momento veían la grabación de un disco en directo como un “plus” más que una forma de ofrecerle al grupo un respiro que tanto ansiaba. Existían grabaciones de la banda en directo antes de que se publicase Made In Japan – 1972, pero no se habían realizado con la intención de colocarlas a la venta, circulaban copias piratas. Deep Purple vuela a Japón para dar los primeros tres conciertos en ese país deshaciendo la idea inicial de hacer la gira en mayo, pero los problemas de salud obligaron a cambiar la tournée previa por EEUU lo cual también llevó a retrasar el viaje al país nipón.
No está muy claro si fue el grupo o su representante quien pensó grabar los conciertos de Japón, de hecho parece que la Warner Pioneer japonesa tenía interés; hay que tener en cuenta que Deep Purple jamás había actuado en este país y a la compañía le pareció una buena idea para promocionar al grupo y fomentar el resto del catálogo general. Grabaron con su propio ingeniero de sonido – Martín Birch – y se llegaron a registrar los tres conciertos: Osaka los días 15 y 16 y en el Budokan de Tokyo el 17 de agosto de 1972. Lo que acaba apareciendo en el doble Lp es la segunda noche, la primera no quedaron del todo convencidos pues acaban de llegar de Inglaterra y quizás les pilló algo cansados, la última fue el mejor concierto pero la calidad de sonido la dejó fuera y de hecho es la 2ª audición la que acabó formando parte del grueso del álbum, también se incluyeron dos grabaciones de Tokyo y una de la primera noche.
Made In Japan – doble Lp en Directo – Diciembre de 1972
Highway Star, Child In Time, Strange Kind Of Woman y Sapce Truckin´( Osaka 16 de Agosto de 1972); Smoke On The Water (Osaka 15 de Agosto de 1972); The Mule y Lazy ( Tokyo 17 de Agosto de 1972 . 25 Aniversario (CD) se incluyen tres nuevos temas añadidos al doble del álbum: Black Night y Speed King ( Tokio 17 de agosto de 1972) y Lucille (Osaka 16 de agosto de 1972).
Hay momentos en este disco que no se han superado nunca en la historia del rock. De hecho son las mejores versiones que jamás se han grabado de esas canciones; la gira fue uno de los grandes momentos del grupo, el poder dar la vuelta al mundo y encontrarse con un público que se conocía todos sus temas fue fantástico, la calidad final para un directo de esa época es muy buena, las cintas originales no se alteraron y no existen remezclas ni nada por el estilo. Martín Birch se llevó las copias a Londres donde realizó las mezclas y esperó a ver qué decidían las discográficas, de hecho en USA se decidió esperar a Who Do We Think We Are pues los Lps en directo no gozaban de buena acogida pero debieron de cambiar de idea al comprobar que las tiendas de Inglaterra estaban llenas de discos importados, así pues Made In Japan salió inmediatamente antes del disco en estudio y apareció en las Navidades del 1972 con un precio bajo para ser doble ( en Reino Unido a 3 libras con 10 peniques); el álbum de estudio salió al año siguiente.
La idea original era la de sacar el disco sólo en Japón y ellos diseñaron la portada, y para el resto del mundo la conocida de Roger Glover, muchos seguidores cogieron la nipona ante la escasez de fotografías. Aunque fue un éxito rotundo no llegó más allá del 16 en las Islas Británicas pero es que ha estado durante años vendiéndose muy bien; en USA hicieron un single combinando una versión editada en directo de Smoke On The Water junto con el original y se encontraron con un exitazo y ayudó al lp a colocarse entre los 10 primeros puestos de las listas.
Parece mentira, pero es el principio del fin para el grupo tal y como lo concebimos muchos de sus seguidores; al parecer las sesiones de grabación en el verano en Roma del álbum de estudio acrecentó disputas entre los miembros del grupo y añadido al impacto mundial del doble en directo lejos de buscar un descanso merecido, aumentara las disputas, el caso que primero Ian Gillan y meses después Roger Glover abandonan “la purpura profunda”; el primero para formar su banda y el segundo dedicándose a las labores de producción. La pugna de egos y un cierto encasillamiento estilístico no contribuyó a que la situación mejorase y la salida en enero de 1973 de Who Do We Think We Are se resiente, sólo aguanta a los muy fieles aunque destaquen temas como “Woman From Tokyo". Es el séptimo álbum de estudio de la banda británica y no consiguió alcanzar las cotas de calidad que habían tocado en sus discos anteriores a causa de las continuas discusiones en su seno, el disco fue duramente criticado por los entendidos musicales y en el ámbito comercial no alcanzó las cotas previstas, a pesar de haber llegado al cuarto puesto en Gran Bretaña y al decimoquinto en los Estados Unidos. Las únicas dos canciones grabadas en Roma que aparecen al final en el Lp son "Woman from Tokyo" y "Painted Horse", mientras que el resto fueron recogidas en la ciudad alemana de Fráncfort del Meno después de intercalar por medio una pequeña gira por Japón. Dejó a todo el mundo con el pie cambiado: crítica, seguidores y a la propia banda en ese afan de evolucionar.
Burn – Febrero de 1974. Es el octavo álbum de estudio de la banda británica grabado en Montreux, Suiza, en noviembre de 1973 con el estudio móvil de los Rolling Stones, es el primer álbum de la banda con el vocalista David Coverdale y el bajista y vocalista Glenn Hughes, en sustitución de Ian Gillan y Roger Glover respectivamente. De una tacada mete dos buenas voces así los otros tres se pueden dedicar a tocar con más precisión. Burn tema que abre y da título al Lp es todo un trallazo que mantenía lo mejor de los más reconocibles elementos musicales de los Deep Purple más clásicos: robusta, dinámica, agresiva y elegante a partes iguales, la máquina engrasada y perfecta. La batería de Paice con esos redobles magníficos, el teclado de Lord y esos interludios neoclásicos, la presentación de Coverdale al mundo, las partes de Hughes que estremecen y ese Blackmore tocado por la genialidad que muy poquitos tienen o han tenido. Temas diferentes pero muy buenos como la más pausada Might Just Take Your Life se convirtieron instantáneamente en clásicos indiscutibles o ese ritmo a medio tiempo y con un riff inconfundible, Sail Away’ o Lay Down, Stay Down, con su magnífica introducción de piano y guitarras y su posterior ritmo trepidante, con esa mezcla de reminiscencias de los Deep Purple de ‘Space Truckin , el boogie-blues con ese piano en Watt´s Goin´On Here bonito duelo vocal entre Coverdale y Hughes y el punteo de Blackmore; la originalidad de la percusión inicial de You Fool No One, así como el jugueteo guitarrero inicial de solo con wah-wah nos regalaba unos primeros guiños de una dirección que comenzaba a intuirse, y que nos llevaría en álbumes posteriores a crecientes toques funky y soul. Burn se convirtió en un clásico de la banda, aunque todavía en la senda del rock duro incluye ritmos más marcados de Blues, Soul y Rhythm & Blues, tendencias aportadas por la influencia de los dos nuevos integrantes. El último eslabón que le unía a los otros grandes Lps de comienzos de los 70, lo que viene a partir de ahora sólo se encuadra entre lo más fieles seguidores pero sin la calidad de anteriores trabajos.
David Coverdale: Voz
Glenn Hughes: Bajo y Voz
Ritchie Blackmore: Guitarra
Jon Lord: Órganos y Piano
Ian Paice: Batería
Con esta formación giraron gran parte de 1974 por USA con el disco Burn como principal repertorio al margen de sus ya muchos clásicos, en aquel momento el grupo utilizaba el equipo de sonido más grande y potente que se había conocido. Pero Ritchie Blackmore fue perdiendo peso en el quinteto; si en un principio el eje sobre el que giraba era Jon Lord la entrada de Coverdale y Hughes fue tomando cuerpo hacia derroteros diferentes a los que el guitarrista pretendía, de ahí que la grabación de el álbum Stormbringer editado en noviembre de 1974, tomó forma mezclando rock, soul y funk de una manera muy adelantada a su tiempo. En este disco destacan los temas :«Stormbringer», «Soldier of Fortune», «Lady Double Dealer» y «Hold On». Una pequeña gira europea en marzo de 1975 sería la última en la que se cuenta con Blackmore y a comienzos de abril se desvincula del grupo; parecía el final, pero aún habría un último coletazo pues cantante y bajista se empeñan en seguir en la nave pese al escepticismo de los dos más antiguos. Empeñados en buscar un nuevo guitarrista que estuviese a la altura de la leyenda, encuentran a Tommy Bolin un chaval de apenas 24 años que tenía cierta reputación de músico de Jazz, con él en la banda sale el 10 de octubre de 1975 al mercado el álbum Come Taste The Band, que puso en evidencia el tremendo talento de Bolin, a pesar de ser técnica y estilísticamente diferente a Blackmore, al combinar rock, jazz y funk. El sonido que caracterizó a Deep Purple quedaba atrás, sin embargo, los nuevos temas aportaban aire fresco a la banda. En este album destacan las canciones «You Keep on Moving», «Comin' Home», «Love Child» y «Gettin' Tighter». El serio problema no era solo, aunque esto es discutible, la nueva orientación de Deep Purple, en apenas 5 años habían cambiado mucho y estos nuevos “sonidos” eran extraños a sus miles de seguidores; el asunto difícil de llevar en una banda de rock es que haya un yonqui, y eso sí es un problema mayúsculo. Los británicos se trabajaron muchos conciertos hasta llegar aquí, pero Bolin era adicto a la heroína y eso impedía saber cómo se encontraría la noche de la actuación; era empañar tanto prestigio cuando el "directo" del grupo era de lo mejor que se podía ver en esos días . La gira posterior al disco fue bastante frustrante para los miembros de la banda, el último concierto de Deep Purple en los años 70 se realizó el 15 de marzo de 1976, en el Liverpool Empire Theatre , Inglaterra. Coverdale ya se había resignado e incluso contactado con su antiguo camarada de la adolescencia, Micky Moody, para iniciar un nuevo proyecto que a la postre derivaría en Whitesnake. Lord y Paice también cayeron en la cuenta de que la aventura de ocho años de Deep Purple había llegado a su final y habían empezado a planear su nuevo proyecto junto al teclista y vocalista Tony Ashton. Los únicos que no estaban enterados de la separación eran Bolin y Hughes. Finalmente, Deep Purple se separó en julio de 1976 y debió esperar hasta abril de 1984 para volver a reunirse.
Tommy Bolin falleció en Miami de una sobredosis a la edad de 26 años un 4 de diciembre de 1976; desperdiciando todo su talento. Deep Purple edita Made In Europe - 1976 grabado en abril de 1975, en los últimos días de Blackmore y recoge actuaciones de Austria, Alemania y Francia; cinco temas de buena calidad pero sin asomo del legendario In Japan. Abren con el cañero Burn, continúan con Mistreated para lucimiento de Coverlade. El siguiente tema da idea de lo que era el grupo en ese momento: Lady Double Dealer ; a continuación You Fool No One que nos sirve para escuchar las improvisaciones de Lord, la fuerza en la bateria de Paice y las muchas virtudes de Blackmore y acabar como se empezó, con un tema cañero: Stormbringer.
Tommy Bolin: Guitarra y Voces
David Coverdale: Voz
Glenn Hughes: Bajo y Voz
Jon Lord: Teclados
Ian Paice: Batería
Habían pasado unos cuantos años y uno de los chicos del palo de escoba, ahora con algunas décadas en sus huesos y rapadita la cabeza se dirige en su coche un sábado a la noche lluvioso a ver a Deep Purple, aun consciente de lo que puede oír, pero va contento pues puede pillar a Gillan con Paice y Glover al frente de la nave, ¡y oye, menos da una piedra!
Después de esperar más de horas escuchando a los teloneros… las luces se apagan y suena… Highway Star, vaya, si esto va así la cosa promete. Los cinco miembros del grupo bien iluminados, el cantante con camisa blanca y descalzo, todos luciendo sus sexagenarios cuerpos pero sin arrastrar la imagen y sobre todo la voz; el resto se disimula mejor si uno es un buen instrumentista, la parte vocal jamás por más técnicas que utilices. Womman From Tokyo y Silver Tongue continua con la fiesta ante un público entusiasta, muy intergeneracional. Strange Kind Of Woman y House Of Pain sonaron muy bien y apoteósico como no podía ser de otra forma cuando se lanzaron con Lazy ,que la verdad en directo gana muchísimo. Descanso para Ian Gillan pues siguen con el intrumental Contact Lost, luego continúan con Haunted, una canción tranquila para tomar aire y después sacudir al personal con la espídica Space Truckin, I got Your Number y Well Dresser Guitar donde “ los nuevos” se explayan tanto Morse como Airey.
Como hay que dejar un buen sabor de boca no se inmutaron para atacar piezas nobles de su repertorio: Perfect Strangers y como no y por fin escuchándola en directo: Smoke On The Water.
Como esperábamos más, para los bises se dejaron la nostálgica Hush y Roger Glover jugando con nosotros para introducirnos en Black Night.
Suficiente para dejarnos satisfechos y poder ver todavía en acción a una de las grandes bandas que han hecho del rock una forma de vida, una grieta para sobrellevar la existencia y mantener el sistema.
Ian Gillan – Voz
Roger Glover – Bajo
Ian Paice – Bateria
Steve Morse – Guitarra
Don Airey - Hammnond y Teclados
DISCOGRAFIA SELECCIONADA
IN ROCK - 1970
FIREBAL - 1971
MADE IN JAPAN - DOBLE - 1972
MACHINE HEAD - 1972
BURN - 1974
SCANDINAVIAN NIGHTS - DOBLE -
LIVE IN STOCKHOLM - 1970
POWERHOUSE - 1977
LIBROS RECOMENDADOS
LA SAGA - Jordi Bianccioto.
UN MUNDO PÚRPURA - José Galván.
La crónica del concierto de Deep Purple corresponde al celebrado en La Cubierta de Leganés el día 25 de Octubre del 2003, así como las fotografías que aparecen en el mismo.
Me ha gustado mucho, un gran trabajo......gracias
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