RICKIE LEE JONES: Sermon On Exposition Boulevard

 

  Es bueno encontrarse de vez en cuando con gente que en otros tiempos seguiste la pista, o estabas atento por si sacaba algún nuevo disco que llevarte al oído. Es el caso de la americana nacido en Chicago pero con aires californianos. Allá en los finales de los 70 tenías el disco homónimo que publicó, luego cayeron Pirates - 1981 y Flying Cowboys - 1989, y le perdiste la pista, quizás por dejadez, porque lo que fue sacando tampoco te interesaba y escuchabas cosas nuevas... hablo de Rickie Lee Jones, esa excavadora de sentimientos que son sus canciones vuelven en forma de un álbum enternecedor, pero con pose de sentimientos encontrados, vida muy vivida y experimentada para llenar los surcos de Sermon On Exposition Boulevard.

 La muchacha que en un momento dado le escribió una canción a un estajanovista como Chuck E.Weis o el más conocido Tom Waits, con los que al parecer fue algo más que amiga, y eso se tradujo en colaboraciones musicales y canciones interesantes.

 Con el tiempo sus temas se han hecho más complejos, apechuga con la zozobra donde los sentimientos se entremezclan con la desesperación pero que la llevan a luces, que posiblemente le alimenten el alma y encuentre un cierto camino de redención personal que la haga más libre.

 Sus canciones las viste de vaporosas melodías folk, guitarras acústicas y una voz que parece envolverlo todo como la niebla en el horizonte.

Elvis Cadillac

SERMON ON EXPOSITION BOULEVARD.- Febrero de 2007.-

 Retahíla de temas llenos de zozobra, de mensajes ocultos donde la voz de Rickie Lee Jones sale como de las sombras, susurrando, como una caricia mientras sus dedos parecen deslizarse sus cabellos rubios. Así Gethsemane, Falling Up, Donkey Ride o Seventh Day, donde una parte de dolor se va desprendiendo de sus labios para hacernos canciones tiernas.

 Pero no todo es igual, claro, aparecen guitarras eléctricas para darle un toque más movido al asunto: Tried To Be A Man, Circle In The Sand; atraviese cementerios indios en Road To Emmaus, ciertos guiños con el pasado: I Was There, toma un trotecillo como el de un pony por la pradera en Elvis Cadillac y con una singularidad curiosa se desmarca de modas, tendencias, y deja un pose de sentimientos encontrados y confusos que tal ve te lleven a ver haces de luz, puede que con varias escuchas... sanes.