B. B. KING: One Kind Favor.-

  

 Siempre es de agradecer que un monstruo como el gran bluesman del Mississippi tenga a bien regar nuestros oídos con una nueva grabación, y que sea nueva, aunque los temas son adaptaciones, pero bueno... mejor que refritos de directos, grabaciones perdidas y demás zarandajas con las que las discográficas, siempre ávidas de rascar de donde sea, con tal sacar tajada.

 Y eso es este One Kind Favor del eterno maestro del blues: B.B. King. 

 No suele ser lo normal. Sus obras son pura nostalgia, para pasar el rato, cuando no se le junta algún mainstream que hace de conductor de la nada. Pero la reputación ya la tiene, intachable lustre, ego subido y cuenta corriente saneada, aunque siempre dice que falta amor, música y dinero...

 Pero en el verano del 2008 nos sorprenda con un doble Lp, álbum casi perfecto de indudable calidad, sonido, que le devuelve al punto de partida, hace ya de esto 82 años, que son los que B.B. King tiene cuando saca dicho disco. Echa la vista atrás y recrea canciones que en un momento de su vida significaron algo, y que muy probablemente le ayudaron a ser la estrella en la que se acabó convirtiendo medio siglo antes.

 See That My Grave Is Kept Clean

ONE KIND FAVOR .- Agosto de 2008.- 

 No se puede tener más clase, estilo, que en el inicio, ese magnífico See That My Grave Is Kept Clean de Lemon Jefferson. A todo esto hay que añadir una sección de vientos importante, la enorme colaboración de  Dr. John y la producción del siempre eficaz T-Bone Walker.

 Lucille llora y reluce en el blues con mayúsculas, que se marca en la adaptación de Lee Walker: Get These Blues Off Me.  Hay varios temas en la misma línea: Waiting For Your Call, de T-Bone Walker. También hay que dejar constancia de Black-Water Blues de Lonnie Johnson

 Entre lo más movido del Lp destacar How Many More Years de Howlin´Wolf, tremendo está el maestro en My Love Is Down de Lonnie Johnson. Entre surco y surco, no podría faltar nunca una mención especial a otro héroe, John Lee Hooker, Blues Before Sunrise edulcorado para la voz de King con profusión de vientos; como le ocurre a Midnight Blues de John Wille.

 One Kind Favor, como era de esperar, no dejaba de ser el canto del cisne. El maestro se despedía con una obra magnífica, entre lo más granado de una extensa discografía, puede que éste sea el número 52 de sus Lps, ¡ ahí es nada !; pero mejor esto que la futilidad. El problema según lo veo, es que B. B. King tiene 82 años y el relevo parece distante sino equidistante.