ROCKS ON THE ROAD.- Ferran Sendra.-

 

   Libro determinante si en algún momento de tu vida te quedaste colgado de una portada de discos, sea cual fuera, y lo mirabas mientras lo tenías en tus manos casi compulsivamente, como una moneda recién hallada. Y sí además tu curiosidad te lleva más allá del concierto de turno, de la foto de rigor, si buscas bastante más... como carreteras secundarias de las que tanto hablan las estrofas de las canciones, de situaciones, de momentos, esos paisajes que evocan los versos que en ocasiones hemos tarareado sin saber muy bien cómo; e incluso callejones que nos admiraban por su aspecto donde llegados la década de los 80 se grababan vídeos de última hornada. Carreteras, cielos, calles, desiertos, trenes... de eso va Rocks On The Road.

 Ferran Sendra nos lleva a través de su cámara más allá de la foto del concierto, del instante fugaz de una estrella encima del escenario, nos recorre un mapa de territorio sentimental que no tiene precio.

 Ferran Sendra nos ha cautivado con las expresiones y delirios de personajes que se transforman en el escenario, alquimistas sobre las formas del verbo y las notas. Después de 4 décadas disparando a grupos, cantantes diversos, vio una forma de darle vida a cuanto material poseía; y quizás la casualidad le vino el día que observando la central térmica de Battersea Power Station, en Londres, fascinado unos minutos, cayó en la cuenta de la portada del disco de Pink Floyd: Animals en la que dicho lugar aparece, momento sublime para el artista que decidió ahí seguir la pista de carpetas de Lps, los Cadillacs que Springsteen canta en algunas canciones o aparecen en The River, en Amarillo - Tejas -; o el Mississippi de Johnny Winter, el Highway 61 Revisited de Dylan, el Cavey Island de Dr. Feelgood...

 Ferran Sendra nos lleva por carreteras, desiertos, callejones... huele a polvo, a sudor, a gasolina. Es pasión por la música hecha imágenes. Hay que contemplar el escaso texto y las fotos con la dignidad del profesional: despacio, lento, saboreando, como el mejor líquido que podamos trasegar por nuestra garganta.