LUCINDA WILLIAMS: LA GRAN DAMA DEL SUR .- II PARTE.- 2014 - ...

 Protection

  Saben lo que ocurre cuando se lleva mucho tiempo escuchando al mismo personal, "que le coges el punto", pero también te adormecen como el tejido de una telaraña o el agujero en el suelo de la hormiga león.

 Lucinda Williams ha entrado en una etapa de plena madurez personal y profesional y en ese largo camino explora territorios amplios, bien el rock americano fronterizo para pasar sin ningún rubor al blues pantanoso, la mezcla de country-soul o el suave balanceo que se lleva en el folk.

 El Lp Down Where The Sprit Meets The Bone - 2014 le saca partido a todo eso y más. Es un disco doble, que pasa de la centena de minutos con 20 temas nada menos. En algunos aspectos, siempre muy cuidados los textos, faltaría más, por ser quien es y su formación, la hija del poeta Lake Charles canta con soltura, confianza, tablas en una palabra.

 Puede saltar del muy stoniano Protection a ese sonido americano que citaba antes en Foolishness, West Memphis, Stowaway In Your Heart las guitarras se arrastran en plan jam session tejiendo atmósferas envolventes.

 Canciones íntimas, que sola ella entiende y trata a través de un texto enrevesado y una música plácida, para llevarnos a su terreno personal: It´s Gonna Rain, Wrong Number.

 Something Wicked This Way Comes, Down Where The Spirit Meets The Bone - que da título al disco -, Everything But The Truch entra de lleno en el rock. Incluso diría que hay espacio para la lírica, esa épica versión de casi 10 minutos en los que se convierte Magnolia.  Apuntaré que destacar una canción sobre otra es difícil, en eso el Lp es lineal, con sus aspectos de mezcla, pero el "toque y sonido Lucinda" lo lleva como un hierro cada ganadería.

 Así como su anterior trabajo entraba bien, a medida que le vas cogiendo audiencias escuchas mejor a las sirenas. Ocurre lo que comenté anteriormente, que a veces te da cierto miedo y pudor, cuando alguien de la talla de Lucinda Williams se mete de nuevo en el estudio y saca otro nuevo álbum.

 Más allá de tu apreciación, deseas que sea algo digno y a la altura de lo publicado por esta  gran dama del Sur. Pero pese a que sigue siendo una de las mejores escritoras de canciones, desde luego de su tiempo y época, sin duda, que su voz siga siendo colosal y ciertamente embriagador en algunos momentos, The Ghosts Of Highway 20 - 2015 esperaba a una Williams más rockera, trotona, aquí en este Lp sólo aparece Bitter Memory. La mayoría de las canciones se  sumergen en su mundo personal, casi un susurro House Of Earth, I Know All About It, Place In My Heart

 El disco está marcada por un carácter viajero, personal por las muchas vivencias y cambios de país de su padre, profesor y poeta, que le marcaron en su infancia, eso unido al marcado acento de Williams que recoge una serie de conceptos en forma de lealtad, muerte, desolación salvación; etc que dejan una atmósfera curiosa entre los surcos del álbum, que por supuesto no es malo en sí, pero que me deja un poco frío y esperando una Lucinda Williams quizás menos introvertida, pero sí más rockera, sin dejar atrás esos pasajes country y suaves toques de jazz, demasiadas letras de amor como concepto, más que a una sola persona en concreto.

Malas noticias flotando en el aire / Malas noticias reposando en el suelo / Malas noticias subiendo las escaleras / Malas noticias en todo alrededor

The Man Without A Soul

Convertir al maligno en una cita.-  Todo lo que tenía en la cabeza lo puso en papel para canciones, que en menor o mayor medida, calzó en sus 2 discos anteriores - para mí, con desigual acierto -; pero ahí estaba lo que quería y cómo decirlo, Lucinda Williams. La fórmula parece agotada por ese camino, como si se hubiése llegado al final o sólo nos esperase un acantilado que habría que saltar o dar marcha atrás. Ni una cosa ni otra, parece haber expuesto, su nuevo Lp Good Souls Better Angels - 2020 vuelve a recoger sus notas y a tocar con el grupo, y de esas intuiciones que tiene Williams sale un especie de pacto obsesivo con el maligno. Demasiada depresión en el mundo e incertidumbre. Da en el clavo. Estos meses de pandemía nos han puesto en nuestro sitio a los homínidos, dejándonos claro lo insignificantes que somos y sobre todo, una vez más: lo efímeros.

 

De eso va el nuevo trabajo de Lucinda Williams. Y de intentaremos salvarnos, claro. El diablo como referencia, pero el cruce de caminos está en el blues y el rock, y hasta escribirá un tema en referencia clara a él: Bone Of Contention. La languidez que aparecía antes, va quedando atrás. Sus letras están muy lugadas a la actualidad de esta nueva época, la II década del siglo XXI, para bien... y para mal. Y hasta predice tiempos que vendrían en unos meses de grabar las canciones para dicho disco.

 Ahora también encontramos la presencia de Roy Kennedy en los mandos, con quien ya trabajó en décadas pasadas y sobre todo, a Tom Overby, su marido, con quien comporte textos al margen de la vida. Él le entregó Big Black Train donde Williams saca esa voz dulce, profunda, grave, que le da  empaque al asunto.

Bone Of Contention

GOOD SOULS BETTER ANGELS.- Marzo de 2020.- 

 Los diversos ritmos empantanados, el deje rock-blues pantanoso que recupera Walkin´Up, el grabar directamente con los músicos que completan el asunto de la banda para el Lp, dejan ese pose en el que respiran las canciones echas a fuego lento, como las comidas, que así saben mejor. Hueles los temas, y enseguida descubres la alegría, que la hay, la tristeza, el engaño, la desilusión, para dejarnos un gran disco.

 Walkin´Up me retrotae a la primeriza Patti Smith con sus voces machaconas y repetitivas, y eso no es malo, en la comparación ambas ganan. En esa languidez encontramos algunas más, caso de Pray The Devil Back To Hell, Shadowns & Dobouts o Big Black Train. 

 Luego claro, están aquellos temas que me parecen sublimes, muy buenos. El traje sucio del blues: When The Way Gest Dark; el rock callejero de Bone Of Contention, Qown Past The Bottom y Big Rotator, Entre el cruce de caminos lleno de minas quedan You Can´t Rule Me y Bad New Blues.

 Recuperación total de Lucinda Williams, como si el título fuera premonitorio de lo interesante que es, a fin de cuentas Buenas Almas Mejores Ängeles la devuelve al lugar privilegiado de los elegidos, gracias a su esfuerzo y talento desde luego, que aquí abajo, en esto que llamamos tierra, de regalos vamos un poco escasos.