NEIL YOUNG: UN CABALLO LIBRE Y SALVAJE.- 3ª PARTE (2004 - 2016)
Far From Home
Vientos foribundos.- Este rockero de casta y orgullo, que
defiende con la guitarra como con el tractor su estados más íntimos a base de desarrollar
discos según esté en ese momento, granjero e impulsor de Farm Aid, que fue
capaz de negarse a cantar con patrocinadores potentes en los 70 y 80, llámese
Pepsi o Coca Cola, que defiende a los pequeños agricultores contra las grandes
corporaciones, puede tener cierta credibilidad en sus argumentos y sobre todo
entiendo en su actitud.
Con 38 Lps a sus espaldas, algunos años tarda
2 en publicar algo nuevo y en otras ocasiones es capaz de hacer esos mismos en
apenas 12 meses, según. El nuevo siglo XXI deparan sorpresas en forma de sufrir
un aneurisma cerebral que se vería reflejado en su trabajo, reflexivo y ecuánime,
como es Prairie Wind – 2005. Llegados
a este 2016 con casi 40 álbumes en el mercado, es lógico que haya saltos hacia
la nada y búsqueda constante en sus archivos, de ahí sacaré el volumen 2 : Live At The Fillmore East 1970, con
Danny Whitten en la guitarra eléctrica.
Neil Young amenaza con sacar parte de ese
conglomerado de cintas que posee grabadas en su rancho, publicarlas, yo me
quedo con dicho disco, del resto corramos un tupido velo. Hay todavía en estos
tiempos de electrónica e imbecilidad musical a raudales, buen rock, buena y
exquisita música de este canadiense irreductible y que sólo lo efímero de
nuestra existencia, acabará por quitárnoslo del escenario y de grabar nuevas
cosas, casi siempre necesarias para el devenir cotidiano.
Tras el monumental Greendale, a mediados de la década 0 del siglo XXI, no pintaban
bien las cosas para Neil Youg. Alcanzado su enorme status dentro de la música
americana y siendo como es un icono ya cultural, los serios problemas de salud
por los que atravesó con su enfermedad que estuvo a punto de mandarlo para el
otro barrio, se le diagnostica alzhéimer a su padre, a su deterioro físico ya
evidente, se unen más males que acabarán con su vida poco meses después. Young,
que siempre saca disco en función de su estado de ánimo en ese momento, nos regala,
más bien nos adentra, su nuevo modus vivendi, Prairie Wind es fiel reflejo de lo que siente en estos momentos.
No Wonder
PRAIRIE WIND .- Septiembre de 2005.-
Voces corales, la guitarra bien cogida a su diestra por Ben
Keith, nos sumerge en melodías profundas, en aguas tranquilas, Prairie Wind es un disco sosegado desde
luego, salvo algunas excepciones, como la hermosa Far From Home donde Young acompaña a su guitarra acústica con la
armónica o He Was The King. Con su
sombrero Stetson, con sus instrumentos y voz, con apenas algunos amigos que le
ayudan a trabajar este disco, se pone nostálgico, hasta simple, qué menos
viendo lo que le estaba sucediendo y encima la reciente muerte de su padre; y
todo el disco es una emoción continua, también le sirve como una terapia, que
siempre escribe sobre su entorno más inmediato, incluyendo ese motorcito que
todos poseemos llamado corazón, y que no es más que un músculo.
Sólo por Prairie
Wind que da título al disco, con sección de vientos incluida y dedicada a
su padre, merece la pena darse una vuelta por este álbum especial, muy digno.
Prairie Wind
Vivito y coleando.- Para satisfacción de propios y quizás de extraños, Neil Young salió bien parado de sus problemas de salud. Y como ocurre en toda su obra, el "salto del canguro" en esta ocasión va hacia la guerra de Irak, innecesaria como todas las demás por otra parte, mensajes envenenados a George W. Bush, y no sólo en el asunto bélico, sino también en la gestión desastrosa del huracán Katrina acontecido en el mismo tiempo.
Total, que Neil Young sale reforzado en su nueva misión. Living Whit War - 2006 deja poco lugar a las dudas de por dónde va el nuevo invento del canadiense. No contento con su nuevo Lp, mira a sus archivos donde al parecer debe de tener verdaderas joyas, o al menos suficientes alicientes para ponernos los dientes largos a sus seguidores. Con un nombre rimbombante, algo así como Archive Performance Series edita Live At The Fillmore East vólumen 2, recogido en los días 6 y 7 de marzo de 1970 en dicho sitio, pues es un directo que se edita con un DVD de la actuación con Crazy Horse.
Se supone que todo este armatoste trataría de armonizar la carrera discográfica de Neil Young de manera cronológica, pero edita el volumen 2 y luego sacaría 2 discos más en 2008 y 2009, comprendiendo los periodos que van desde 1968 y 1969.
Winterlong
LIVE AT THE FILLMORE EAST - Vólumen 2 .- Noviembre de 2006.-
Algunas consideraciones antes que nada. Neil Young con Crazy Horse inicia una gira entre febrero y marzo de 1970, recala unas noches en dicho lugar, más que nada para promocionar Everybody Knows This Is Nowhere, que era el trabajo que convenía darle publicidad. El concierto tenía una parte acústica y otra eléctrica, todo normal en el canadiense, aquí sólo se recoge la cuestión electrizante, pero tenemos curiosidades como Winterlong que es inédita y Wonderin´. Aunque una aparecerá en el recopilatorio Decade y la otra en años posteriores, en el álbum Everybody´s Rockin.
Acostumbrados a Fran Sampedro, otra novedad es la guitarra eléctrica del miembro original de Crazy Horse, Danny Whitten, por supuesto me refiero a discos en directo, y de Jack Nitzsche en el piano eléctrico.
Largos desarrollos en los tremendos Down By The River y en Cowgirl In The Sand, se recoge perfectamente lo que es un concierto de Neil Young, pocos cambios ya desde los inicios de la década de los 70 hasta entrado el siglo XXI, con más o menos fuerza y tono vocal, este At The Fillmore East es muy bien bienvenido al cajón de coleccionista.
Total, que Neil Young sale reforzado en su nueva misión. Living Whit War - 2006 deja poco lugar a las dudas de por dónde va el nuevo invento del canadiense. No contento con su nuevo Lp, mira a sus archivos donde al parecer debe de tener verdaderas joyas, o al menos suficientes alicientes para ponernos los dientes largos a sus seguidores. Con un nombre rimbombante, algo así como Archive Performance Series edita Live At The Fillmore East vólumen 2, recogido en los días 6 y 7 de marzo de 1970 en dicho sitio, pues es un directo que se edita con un DVD de la actuación con Crazy Horse.
Se supone que todo este armatoste trataría de armonizar la carrera discográfica de Neil Young de manera cronológica, pero edita el volumen 2 y luego sacaría 2 discos más en 2008 y 2009, comprendiendo los periodos que van desde 1968 y 1969.
Flags Of Freedom
LIVING WITH
WAR .- Mayo de 2006.-
Disco monotemático sobre la Guerra de Estados Unidos con Irak. Los periódicos
fueron la chispa que encendió la conciencia de Neil Young para elaborar el trabajo.
Los muchos avances científicos en cuanto a la evacuación de soldados fue el
detonante, pero no se hablaba nada de la explotación y sufrimiento de los muchachos. Vieja guardia ya empachada con el deterioro de la imagen americana en
Vietnam, “la policía del mundo al rescate del resto”, de los buenos, se
entiende.
Young firma 9 de las 10 canciones del que se
compone Living With War. Como es
habitual en los trabajos de Neil Young, temas bien elaborados y de largos
recorridos instrumentales, The Restless
Consumer, Let's Impeach Of President.
A lo largo del álbum caen bombas dialécticas sobre
el presidente americano en este momento, George W. Bush, no sólo el concepto
que éste tiene de la guerra, sino del maltrato que su administración dio a los
medios de comunicación mintiendo con las famosas armas nucleares iraníes, o la
gestión del huracán Katrina en su territorio. Living With War es un trabajo de su tiempo, politizado, que dividió
desde un primer momento a la opinión rockera americana, incluso su tour fue
controvertido entre detractores y afines al mensaje. No hay que olvidar que
lleva un sello inequívoco de reivindicación, pero que encierra grandes
canciones, Shock and Awe, Flags of
Freedom, Let's Impeach Of President.
El rock puesto al servicio de una causa, justa o no,
convincente o quizás dudosa, pero Young se enfunda su Old Black para dejar
testimonio de su entorno y limpiar, una vez más su conciencia a base de
guitarra eléctrica y punzantes textos. Es decir, coloca al rock en la frontera del sistema, y eso hay que destacarlo, no busca el aplauso fácil y la tonada sencilla.
Winterlong
LIVE AT THE FILLMORE EAST - Vólumen 2 .- Noviembre de 2006.-
Algunas consideraciones antes que nada. Neil Young con Crazy Horse inicia una gira entre febrero y marzo de 1970, recala unas noches en dicho lugar, más que nada para promocionar Everybody Knows This Is Nowhere, que era el trabajo que convenía darle publicidad. El concierto tenía una parte acústica y otra eléctrica, todo normal en el canadiense, aquí sólo se recoge la cuestión electrizante, pero tenemos curiosidades como Winterlong que es inédita y Wonderin´. Aunque una aparecerá en el recopilatorio Decade y la otra en años posteriores, en el álbum Everybody´s Rockin.
Acostumbrados a Fran Sampedro, otra novedad es la guitarra eléctrica del miembro original de Crazy Horse, Danny Whitten, por supuesto me refiero a discos en directo, y de Jack Nitzsche en el piano eléctrico.
Largos desarrollos en los tremendos Down By The River y en Cowgirl In The Sand, se recoge perfectamente lo que es un concierto de Neil Young, pocos cambios ya desde los inicios de la década de los 70 hasta entrado el siglo XXI, con más o menos fuerza y tono vocal, este At The Fillmore East es muy bien bienvenido al cajón de coleccionista.
Neil Young: Guitarra eléctrica y voz.
Danny Whitten: Guitarra eléctrica y voz.
Jack Nitzsche: Piano eléctrico.
Billy Talbot: Bajo.
Ralph Molina: Batería y voz.
Wonderin´
Let's Impeach Of President
Es como es.- Esta criatura es así, lejos de
emprender un tour para promocionar Living
With War, se embarca en una gira con Crosby, Stills y Nash y además se
filma dicho evento bajo el nombre, curioso de Déja Vu. Ahí podemos observar la clara politización de la clase
media americana, a favor y en contra, pero a Young y por añadido a sus
compañeros de fatigas, poco o nada les importa el asunto. Van a lo suyo, si te
gusta bien y sino también.
Ambos trabajos publicados en 2006, Living With War y Live At The Fillmore East se despachan muy bien.
Cuando vuelve a grabar, se retrotrae a su
pasado lejano, allá por la época del punk cuando lanzó American Stars´n Bars y nos coloca Chrome Dreams II – 2007, una especie, entiendo yo, de 2ª parte de
aquel y algún descarte de las sesiones de grabación de This Note´s For You – 1988.
En este destacable trabajo, es el soul el que
toma el protagonismo, sin abandonar los guitarrazos, voz y textos sobre la
sufrida clase obrera es lo que hace de este Chrome
Dreams II un álbum esforzado, pero que discográficamente hay que
encuadrarlo dentro del giro que Neil Young hace de vez en cuando, el juego ya es
viejo, cuando se ha exprimido mucho en los últimos años, descubre lo que ha
realizado en décadas anteriores, es lo que pasa por ser perro sabio y viejo, el
hippie caleidoscópico, versátil, sutil y arisco a partes iguales, vuelve a dar
una clase magistral de buen hacer, pero no conviene engañarse, este disco viene
a ser lo que en su momento fue Harvest
Moon a Harvest, bien, pues este Chrome Dreams II, lo es a American Stars´n Bars y algunas canciones
que quedaron en el cajón de sastre de This
Note´s Gor You.
Así pues tardará en darnos un trabajo de
acuerdo a sus nuevas inquietudes, nuevo, que no sea retablo de cuestiones que
han quedado en el tiempo atrás, y en esta ocasión el álbum será de temas cortos
y directos, textos nada complicados y
buen hacer.
Get Behind
The Wheel
FORK INT THE
ROAD .- Abril de 2009.-
No pierde el tiempo y no nos lo hace perder a sus oyentes,
siempre atentos a saber qué saca de nuevo este sabio. Neil Young estructura el
álbum como si fuese por una carretera, con un auto viejo pero de energía
renovable, y lo hace como quien va contemplando el paisaje, a conciencia, a gusto
con el entorno, y de ahí saca canciones suficientes para dejar un reguero
incuestionable de su calidad y habilidad, para meternos artefactos de este
calibre como es Fork In The Road.
El trabajo es el más fresco de cuanto lleva publicado en esta
década. Directo, rock contundente secundado por escuderos de la talla de Ben
Keith en el las guitarras, Rick Rosas en el bajo o Chad Cromwell a la batería.
Con ellos teje un sonido crudo, a veces trotón a ritmo de R&B, por ejemplo When Worlds Collide, Fuel Line, Johnny
Magic. Los arrullos también llegan,
Off The Road y Light A Candle (ésta última un llamamiento ecologista); las
guitarras hirientes de Hit The Road y
el soberbio Fork In The Road, que da
título al álbum.
Claro que cuando cambia el ritmo y su pose caleidoscópica es
buena, mejor atender a temas como Cough
Up The Bucks, detalles de rap-funk. Me encuentro con costalazos magníficos
de R&B que me hacen girar la cabeza y los pies al trote, hay queda la
maravilla de Get Behind The Wheel.
Neil Young había tardado un poquito en crear nuevas
y certeras canciones, pero se saca un excelente disco, lo suficiente para
seguir creyendo en él, atento a su tiempo sin duda.
Fork In The
Road
Polifacético.-
Durante la gira de
promoción de Fork In The Road, Neil Young colabora con el cineasta Jonathan
Demme, un documental sobre él y su show, al tiempo que invertía parte del año
en colaborar en el disco de Booker T. & The M,G.S: Potato Hole, más tarde lo haría
en de Elton John y León Rusell, The Unión
y en los Juegos de Invierno celebrados en Vancouver.
En lo referente a
nuevas obras, publica La Noise – 2010 y pierde al que había sido su guitarrista
en varios años, Ben Keith. Regresaría a ser filmado detrás de la cámara por
Demme, bajo el título de Neil Young Journeys.
No contento con esto, este culo inquieto y esa mente sorprendente, consigue
reunir antes de finalizar 2011 a su antigua banda, Buffalo Springfield, con
Stills y Furay, ofreciendo un puñado de conciertos, y todavía sacó tiempo para realizar una prospección interior
con una, llamémosle, autobiografía, un viaje interior a sus demonios y demás
fauna familiar, con el título de Hippie
Dream. Al parecer, según se cuenta, fue por esta época en que dejó de beber
y la marihuana pasó a ser un deseo más que una realidad.
Las buenas
noticias podían ser en modo de disco, la reunión con Crazy Horse, de ahí saldría
Americana – 2012, revisión de unos
cuantos temas de folk americanos, un disco menor en
cuanto al nivel cosechado en entregas anteriores y sobre todo a Fork In The Road, pero que sirvió de
acicate y calentamiento de motores para su nueva obra maestra, el soberbio
disco doble que es Psychedelie Pill,
millonario en ventas y en calidad.
Driftin´Back
PSYCHEDELIC PILL.- Disco Doble.- Octubre de 2012.-
Como un búfalo en
plena carrera o un bisonte de sus praderas, con una tonelada a cuestas y su
testuz indestructible, así arranca este doble Lp con Crazy Horse en plena
forma, 27 minutos, a ver quién hay hoy en día que haga semejante argucia.
Inmune a las argucias, a estos tiempos de rapidez y de placeres tan fugaces, Neil
Young se deja llevar por un hermoso viaje de tobogán, sube y baja constante,
parece que se pierde y llega de nuevo al punto de partida, Driftin´ Back, el inicio, ya es un disco en sí mismo. Todo comienza
con tranquilidad para ir metiendo las guitarras eléctricas e ir subiendo en
intensidad, como si Young ya tuviese tomada la medida a su rock, esa pieza
acústica como introducción, como si te dejase entrever la puerta por la que
saldrán los caballos desbocados hacia la tormenta eléctrica. Y no se perderán
en esos 27 minutos, aunque den rodeos y salten vallas, no sé extraviaran en su
camino.
La siguiente canción
y que da título al trabajo, Pschedelic
Pill, es áspera y dura, rock férreo y contundente. Los nubarrones arrecían,
no pararán tampoco en la hipnótica y larga Ramada
Inn, otro tour de fuerza en las guitarras Young/Sampedro. De lo mejor del
disco, música a contrapelo con la imperante rapidez, costuras bien cosidas y
aferradas. Born In Ontario rompe la
dinámica, una especie de himno, con el consabido cruce de las 6 cuerdas, tema
que encaja con la tradicional canción americana.
Nadie podrá echar
en cara a Young y Cía, el tirar su dinero
con este disco doble. Bien trabajado y cuidado, largo en duración, presenta
temas cálidos, de hojarasca y buena armonía sentados viendo el crepúsculo con
la claridad que raya al día hasta la salida, por fin, del sol. Twisted Road, corte tradicional que enlaza en el mismo tono y
armonía con She´s Always Dancing; como
si esta 2ª parte del disco fuese más habitual y entrase en los “parámetros comerciales”,
claro que esta supera los 8 minutos. La balada llega en la tierna For The Love Of Man. Las guitarras
eléctricas toman el mando en el
definitivo corte final, con silbido de caminante con polvo en las botas en y el
alma, Walk Like A Giant entra en la
tradición de grandes temas de Neil Young, sea Like A Hurricane o semejantes.
Pschedelic Pill cierra un fenomenal
trabajo, en una carrera tan guadianesca como la del canadiense, es muy de
agradecer los inventos y riesgos que toma a estas alturas de su trayectoria.
Disco correoso, áspero, duro, salvo For
The Love Of Man, el resto sembrado de guitarras eléctricas como sierras,
furioso y entretenido, y pese a todo con delicadeza, con clase.
Ramada Inn
Cerrando
el círculo.- Si es que eso es posible en un personaje tan
inquieto como Neil Young. Pero por pura lógica de tiempo, acaba de entrar en la
séptima década de su existencia, aunque el cuerpo aguante todavía ciertas giras
exigentes y el talento le sobrevenga de a poquitos, aún cabe esperar un gran
disco, lo normal es que al igual que Springsteen o Dylan, otros 2 diamantes, desde mi punto de vista, uno
con mejor fortuna creativa que otro, desde luego, no me hago muchas ilusiones,
aunque con el canadiense nunca se sabe nada a ciencia cierta.
Neil Young todavía
es muy capaz de coger una nota y sobre eso levantar con un simple riff de
guitarra y mantenerlo hasta la extenuación, y lo mismo le da en disco que en
directo, por ejemplo Who´s Gonna Satand Up?, o meterse en una cabina de
los años 40 y grabar un álbum, con la sola compañía, al margen de su voz, de
guitarra acústica y armónica, pureza folk, If
You Could Read My Mind. Pero ya pueden ser piezas sueltas y excelentes
directos, el asunto es un disco entero, bueno, grande, de calidad.
Tras el rotundo Psychedelic Pill, Young, aquejado de esa
irresistible tentación de grabar lo que se le pasa por la cabeza, imprevisible como
un tornado que cambia de dirección en unos segundos, no te puedes sentir a
salvo cerca de él. Es opinión personal, pero debiera de hacer como las gallinas en el
comedero, cuando meten el pico en el recinto esperan un momento para acometer el resto de la comanda. Debiera de espaciarse más en sus álbumes, pararse a repostar,
parece que tiene miedo de que si se para la “parca” le pille desprevenido. No
pierde credibilidad si se toma unos segundos, años tal vez en llenar el
depósito. Cancioncillas de hombre libre como es él, nos coloca a Letter Home – 2014 y no contento, a
finales del mismo año saca Storytone. Como
siempre, coetáneo en todo lo que sucede alrededor o con él mismo, nos saca
canciones de amor, de alguien que está fuera del circuito cinematográfico, pero
que ahora forma parte de su vida, la actriz Daryl Hanna, mezclado con temas de
automóviles y protestas ecologistas que tal vez pierden valor por la
reiteración en su discografía. Aderezado de arreglos sinfónicos, meticulosamente
medidos y suntuosamente ejecutados, aparecen canciones como Glimmer, When I Watch You
Sleeping; arreglos de vientos: Schmaltz,
y una casi vuelta a los 80, R&B semejante a los que ejecutó, magníficamente
según mi opinión, con Bluenotes, y el acogedor romance, con ukelele y todo en Tumbleweed.
Pero son dos discos más
atrayentes para moscas con escasa miel, no hay carne que llevarse a la boca
salvo bocaditos, una especie de montaditos, pero que te quedas con hambre, no
estás ni lleno ni satisfecho. Mejor no pasar por caja. Otra cuestión es que
este tipo saca Matrioskas de su guitarra y es capaz de asociarse con gente
joven, ya le fue muy bien con Pearl Jam
por los 90, ahora el truco es con Promise
Of The Real, esa donde hay hijos de Wille Nelson en la formación. ¡Ven
porque el diablo sabe más por viejo que por sabio! Y la jugada es redonda, de
escuadra y cartabón.
Wolf Moon
THE
MONSANTO YEARS.- Junio
de 2015.-
Disco arriesgado, de
libre recorrido. Nada nuevo por otra parte en la dilatada carrera de Neil
Young. Dejando atrás telarañas, caminos polvorientos, y a los Crazy Horse, en
esta ocasión recoge los frutos de sus muchos años y de esa calidad que atesora,
la saber quien no quiere colaborar con el canadiense.
Promise Of The Real es el grupo de Lukas
Nelson, guitarrista y vocal de dicho grupo, al que se une también su hermano
Micah, hijos del gran Willie. Y con ellos graba The Monsanto Years, nueva reubicación a su talento, a gente joven
que le dé el brillo, que no la fuerza que aún acumula el sabio de Young. En el
álbum se exprimen las premisas básicas de la música a la que nos tiene
acostumbrados, canciones de corte tradicional como la hermosa Wolf Moon, desgarros eléctricos: People Want To Hear About Love, pero
canta por el amor al único Planeta que tenemos, dejemos de bobadas etéreas.
Y de nuevo arriesga, Young
que podía estar tocando una y otra vez los hits más carismáticos de su carrera
y pasearlos por medio mundo en grandes pabellones, pero no, sigue
reivindicativo, en esta oportunidad el títere que le molesta es la franquicia Starbucks
y la administración de Obama, porque considera que las grandes multinacionales
manipulan los alimentos que comemos como les da la gana, sin que Gobierno
ninguno les ponga barreras. Y con esa fuerza, coraje y mala leche que se gasta,
nos coloca un disco muy bueno, que gana a cada escucha, lleno de matices, de “cositas”
que hay que ir prestando atención. Tampoco se queda corto en la duración del
trabajo, 51 minutos de nada.
Rastreamos situaciones como la atmósfera que desarrolla
en las guitarras en Big Box, mensaje
lúcido y rotundo, porque claro, doblando la esquina a las 7 décadas de vida,
para qué esperar. Una de mis favoritas, tema suelto, hasta alegre con silbidos
y todo, A Rock Star Bucks A Coffee Shop,
habrá que saber qué café se toma uno en estos templos de la maquinaria
capitalista. Enseguida encontramos al caballo trotón en el magnífico Workin´Man, buen rock, directo y a la
yugular. No desaparecen las guitarras sucias, como eslabones perdidos en el
tiempo, Rules Of Chance, tobogán de
subidas y bajadas, que enlaza con la
pieza que da título al disco: Monsanto
Years, con estribillos y todo. Pasajes extensos, casi garageros, sonido
pesadote, y más pulcro en el tema que cierra el trabajo: If I Don´t Know, casi con voces corales celestiales para adornar la
sutileza de las guitarras eléctricas.
The Monasterio Years es
otro acierto de Neil Young, en textos, producción y música, por supuesto. Si Living Whit War la temática era la
guerra con Irak, en Fork In The Road
declaraba su amor incondicional por su vehículo, Lincoln Continental y en Greendale se inventaba una aldea ecologista
con familia y todo de protagonista, The
Monasterio Years es de un gran nivel, los 10 temas que conforman el trabajo,
atizando a la cadena Starbucks, entre otras cosas.
- Neil Young : Guitarras y Voz.
- Lukas Nelson: Guitarra y Voz.
- Micah Nelson: Guitarra eléctrica, Charango
eléctrico y Voz.
- Anthony LoGerfo: Batería.
- Corey McCormick: Bajo y Voz.
- Tato Melgar: Percusión.
- Workin´Man
DISCOGRAFIA SELECCIONADA
PRAIRIE WIND.- 2005
LIVE AT THE FILLMORE EAST.- 2006
FORK IN THE ROAD.- 2009
PSYCHELELIC PILL.-
DISCO DOBLE .- 2012
THE MONSANTO YEARS.- 2015
LIBROS INTERESANTES
Jimmy McDonouhg : La Biografía de Neil Young
El Sueño De Un Hippie .- Neil Young
Neil Percival Young: 12 de Noviembre de 1945 - Toronto - Canadá.-
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