DIAMOND DOGS: RETOMANDO EL R&B.-

 



 Charity Song

 Como si de una carrera de relevos se tratara y hubiese que pasarse el testigo al siguiente corredor, llegan sonidos nórdicos de la Europa más civilizada y socialdemócrata a comienzos de los noventa.
 Se nos queda en el subconsciente colectivo tipos altos, rubias, paisajes nevados, renos... tópicos, pero pensar en rock se hace algo extravagante aunque dominen el inglés como su lengua vernácula. Tardarás algunos años en asociar distintos conceptos donde el circuito americano, inglés y por supuesto el español, más a menos te entretienen y hasta llegar a dominar... 
 De toda la hornada nórdica, te quedas con alguno que sigues con cierto interés. Ninguno es mediático, ni llenará estadios. Bandas de garito, de sudor, cervezas y diversas sustancias lisérgicas y corporales. Puedes citar a un puñado, pero el viejo y trasteado sonido del r&b de los Stones, Faces, Rod Stewart o Ronnie Wood... acaban desgajándose en la garganta de un tipo alto, con el pelo pincho como si tuviese un enchufe en el culo, se llama Sören Karlsson pero al parecer sólo responde cuando se le nombra por Sulo. Formar una banda, bien estructurada, con temas interesantes y regarlos con semillas que florezcan como las que aporta Henrik Widén a los teclados, y estamos ante una formación con sonido decadente puesto al día.
 Para no desentonar, se colocan un nombre que hace referencia a un disco de David Bowie, lo  cual puede descolocar, su toque es de perro callejero, pero eso sí, con clase de diamantes y correa de colores... Diamong Dogs hace presencia en tu vida a comienzos del nuevo siglo y sus actuaciones corroboran lo que escuchas en casa. Sabor añejo como el buen vino reposando en barricas de roble, déjale respirar unos segundos antes de humedecerte los labios y degustar.
 Al parecer graban un Lps en los noventa, pero te empiezan a interesar a comienzos del siglo XXI, y con diversos cambios en su formación, cuando sale Too Much Is Always Better - 2002, la carrera de relevos toma forma y coge velocidad.


 Bound To Ravage


 TOO MUCH IS ALWAYS BETTER... Enero de 2002.- 

 No se puede empezar mejor sino se tiene ningún disco del grupo sueco. Canciones trepidantes. refrescantes en un momento en que el rock deja de significar todo aquello que había representado durante las 3 décadas anteriores. Sonido correcto, no sucio, pero si lo suficientemente arrastrado para que dejes atrás perjuicios y sumergirse en este excelente álbum.
 El piano de Henrik Widen abre con el magnífico Charity Song, temas que deben de tener muy desarrollados en directo porque varias canciones llevan el mismo esquema, muy trabajadas antes de entrar en el estudio.
 Pero el sonido correoso y setentero de los Diamong Dogs estalla en los oídos en temas como  Bound To Ravage, canción compuesta por Sulo, como la mayor parte del trabajo aunque cuenta en varios registros con los guitarristas Stevie Klasson y Anders Lindström, sin olvidarnos de Henrik Wilden. Al final se marcan 12 temas con un último instrumental: I Sall Not Be Moved.
 Entre tanto rock and roll de la vieja escuela y los tintes eternos de R&B, Somebody Elses Lord y Desperate Poetry rompen esquemas, unas baladas en toda regla. Pero hay más claro, los fogonazos campestres via country clásico en la estupenda y refrescante This One´s For My lady.
 El grueso del álbum transita en el R&B sucio de garito, ese que te hace mover los pies y la cabeza de manera permanente. All Strung Out, Every Little Crack, Blues Yet To Come.


 Hand On Heart


Amor al oficio.-  Llevan bastante tiempo en el negocio. De hecho todos los componentes provienen de otras bandas, unas con mayor o menor fortuna, pero experiencia tienen y esa acumulación de  ganas las trasladan al escenario para promocionar nuevo disco, acompañarlo con temas pretéritos y alguna versión.
 De hecho, cuando los viste por primera vez actuando ya tenían varios discos publicados, pero no les restaba presencia. Su sonido a torrente, tienen al rock and roll por su religión creando algunos temas que pueden ser coreados y traspasar generaciones.
Con el paso de los años habrá diversas formaciones del combo sueco, eso sí, hay cosas que permanecen como la duda, tanto el frontman Sülo como el teclista Henrik Wilden, con su peculiar forma de colocarlo entre las piernas, sentado, con una sempiterna sonrisa pícara, no abdican de su misión de seguir con los sueños húmedos de la música en directo, del siempre omnipresente R&B.
 No solo hay buenas canciones que defender en directo y poses auténticas, sentidas; riffs de guitarra y esas ganas inevitables de tenerles cerca en salas pequeñas, que es lo que da de sí el asunto. Ahora con la inclusión de Magic en el saxo, son un septeto en directo desde que publicaron Up The Rock - 2006.


 Come Away


BLACK RIVER ROAD.- Mayo de 2004.-

 Suenan a banda grande- de hecho lo son -, con la entrada de Magic a los saxos le dan otro aire a unas canciones que no dejan de ser directas. Los teclados de Wildén  lo dejan en su estructura perfecta. No se alejan de los 12 temas, que pueden ser 6 por cada cara si es un Lp, a la vieja usanza.
 Black River Road no desentona con su anterior álbum de estudio, para nada. Mezcla de temas trotones como la inicial Come Away; pero esa potenciación de los vientos se ve ampliada con trompetas, aportes de Magnus Johnson, Mats Gunnarsson o Cezary Tomaszewki, que obviamente no aparecen en su directos, pero ayudan a dar un toque compacto a un disco muy trabajado.
 Hand On Heart es un buen ejemplo de lo anterior comentado. Luego se marcan temas de deje rockero, a lo Rod Stewart de sus comienzos, con un destacable Sülo: You´ill Never Ever Gonna Wanna Do. El riff que da título al trabajo Black River Road, es una joyita, en un tempo curioso, con estribillo pegadizo; pero el grueso son canciones con un toque muy setentero, marca de la casa, sean New Set Of Wheels, Lift It Up o Corfirmation.

 




Generation Upstar


 Discos que atraen.-  Por casualidades de la vida, verás a Diamond Dogs cada 3 años en directo y te harás con unos cuantos discos, hasta perderle un poco la pista en la 2ª década del siglo XXI. Quizás porque sus trabajos no te parecen interesantes, después de It´s Mosk Likely - 2008 tardarán 4 años en sacar un nuevo trabajo, que será cuando los vuelvas a ver sobre el escenario en la presentación del Set Fire To It All - 2012.
 Sus discos tenían una cierta repercusión fuera de Suecia, lo cual les llevó a aquellos lugares en los que se publicaron con cierta asiduidad como España, Alemania e Inglaterra, y eso les trajo de gira en varias ocasiones hasta hacerse con una cierta parroquia ávida de sonidos clásicos. También en parte ayudó, a una cierta consolidación de los miembros del grupo, variable en sus primeros años, tenían la actitud necesaria, pero no eran el muro de sonido tipo Ramones, AC/DC o Motórhead; su toque rhythman and blues iba mucho más allá en busca de las coordenadas roqueras de los setenta, y en eso andaban cuando sacan su siguiente álbum.


Turning A Shack Into A Chapel
 
UP THE ROCK.- Septiembre de 2006.- 

 No se andan con rodeos ni con el título del álbum ni en el inicio del mismo, las reglas están muy claras: sonar como siempre sin repetirse ni ser monótonos.
 Rock con clase, energía, riffs, teclados envolviéndolo todo el sonido... Generation Upstar, One May Not Have Tomorrow; viejos toques honky-town: Down In The Alley Again.
 No hay concesiones a nadie, el viejo y entrañable R&B regado con vientos y teclados, los cortes precisos de guitarra eléctrica, la voz de Sülo para 12 temas muy bien llevados, con alguna suavidad en el entorno para reposar, tipo la acústica Where Are You Tonight o Come  Easy, Come Slow.
 Up The Rock va como una apisonadora con pequeños resquicios a tomar aliento. Ya el título es significativo. Otro buen disco de los nórdicos.
 



Roll This Motor Home


No perderse.-
 
Con las claras referencias de Sülo y Henrik Wildén, Diamond Dogs sigue adelante, unas veces con el gran guitarrista Fredrick Fagerlund otras solo con Lars Karlsson, sus variantes en la sección rítmica, pero ahora parece que con el saxo de Magic Gunnarsson de manera duradera y efectiva, tanto en la grabación de discos como en los directos. También hay que tener en cuenta de que muchos de los músicos que pasan por el combo nórdico tienen otros proyectos paralelos, pero con la base del cantante y el teclista como referentes esenciales del grupo, esos no cambian.
 Los volverás a ver en formación de septeto. Son un grupo muy hecho, no en vano ya llevan 2 décadas en este negocio y atrás quedó su disco It´s Most Likely - 2008, venían con el recién publicado Set Fire To It All - 2012; pero lo suyo sigue siendo la fiesta del rock and roll con sudor y cervezas y ese toque rollingstoniano con Stewart a la voz que Sülo sabe tan bien llevar sobre el escenario.
 Siempre suenan un puñado de clásicos en sus shows: Honked, Lift It Up; las aportaciones de Magic Sunnarsson al saxo también con maracas y hasta un cencerro. Los nuevos temas sonaron estupendamente como el honky tonk  On The Sunny Side Again o el propio Set Fire To It All.
 Desde luego hay que seguir creyendo en bandas como los suecos.


Far From Getting Close


IT´S MOST LIKELY.- Septiembre de 2008.-

  No pierden los toques honky - tonk, incluso que de los 13 temas que componen el disco, una docena está compuesto por Sülo, nada desdeñable teniendo en cuenta que unos meses antes el sueco se marcó un álbum en solitario, debe de ser que las musas llegan a borbotones.
 Grandes canciones en su línea más roquera, sean Raise A Holler, medios tempos como Casanova´s Cryin´que cierran como la E Street Band con un apoteosico Magic Gunnarsson.
 Luego uno encuentra esos temas que un día - o noche -, no sé, te hicieron acercarte a este grupo. El toque bluesy de Roll This Motor Home, con una armónica de Sven Zetterberg y unos coros femeninos muy seductores. Cold Blue Summer, Far From Getting Close; la colaboración de Ola Nyström en la hermosa Ladies And Gents ( Ballad Of A Dog ), una balada muy apreciada por el  matiz de lo sublime que supera en mucho a todos los medios tiempos que lleva este álbum. Chimes Of Love lo encuentro entre lo más granado del asunto, buenos coros y toque de guitarra eléctrica.
 Un disco aceptable de los nórdicos, pero que ya dan muestras inequívocas no sólo de repetirse, sino de cierta dejadez, tal vez porque las musas sólo le llegan al cantante.
 

Scars And Emblems


Como el Guadiana.-  No ayuda para nada los diversos cambios de formación que estos chicos se marcan a la hora de actuar y de meterse en el estudio para nuevas grabaciones. Con la base clara, el sonido boggie y R&B como fondo de armario, los volverás a recoger en septeto y con Fredrik Fagerlund en las guitarras eléctricas y ayudas vocales, que es en tu opinión, la mejor receta para el toque Diamond Dogs.
 No prestaste atención a su anterior álbum, más acústico, Te Great And Very Soul -2010 y los recuperas en Set Fire To It All - 2012. Tienes muy claro a estas alturas de su discografía, que el fuerte de esta gente son sus demoledores directos, pero lo que te queda en los oídos pasados los meses son sin duda los discos que te puedes llevar para tu entretenimiento.
 En cualquier caso será el último trabajo que atesores de los suecos pues toda la 2ª década de este siglo, los ves muy desgajados en cuanto a crear nuevas canciones salvo Recall Rock´N´Roll And The Magis Souk - 2019, un pastiche curioso en su envoltorio  y ejecución. Media cara de rock y la otra de adaptaciones de soul, clásicos en la voz de Sülo de gente a la que siempre ha admirado, Sam Cooke.
 El grupo se disuelve en 2015, quizás por eso tenga más miga el regreso discográfico y a los escenarios. También el deceso inesperado de su saxofonista Magic Gunnarsson, hicieron que el combo pasaran malos momentos.
 En el disco mencionado hay buenos temas como en la 1ª parte con los roqueros Recall Rock n roll, Heavy Swing o Valentina. La 2ª parte al margen de los temas de Sam Cooke, cuenta con la voz del cantante The Quireboys - Spike -  en Good Times; hay más ayudas, como la del rapero sueco Papa Dee en Sugar Dumpling; dejando un  disco muy apañado para su vuelta.
 De momento y hasta nuevo aviso, me quedo con Set Fire To It All.


Nothing Can Change This Love


SET FIRE TO IT ALL.- Enero de 2012.-

  Con alguna que otra colaboración como el cantante de The Quiroboys, Spike o Dan Baird, el septeto sueco se mete en el estudio para dejarnos un buen disco, en su línea de R&B que también se les da.
 Acordes del piano de Henrik Wilden en el inicial On The Sunny Side Again, entre los pilares del disco se encuentra sin duda Scars And Emblems, un cañón en directo sin duda, en pequeños clubs, booggie de taberna... alguna novedad como el instrumental Bad But Not Ruined, una música ratonera que decían los mayores, ahora que tú lo eres, sigues pensando lo mismo, cuanto más alta mejor. Toque muy setenteto, la verdad.
 Las guitarras acústicas también hacen acto de presencia en algunos cortes, destacaría Ball Of Lightning. Canciones con unos claros matices clásicos en el R&B The Inner Jukebox Blues; el buen trabajo de Magic Gunnarson en el saxofón con Burn One Down y uno de esos momentos sublimes del álbum, el soul de Nothin Can Change This Love.
 Diamond Dogs obviamente no inventan nada, como todo lo publicado después de la década de los setenta. Lo curioso es que le dan matices, lo desarrollen con su personalidad y aptitudes, y de ahí pueden salir temas como el muy sureño Stand By The Rhythm con Spike también en la voz junto a Sülo.
 Cierran con In Each And Every Ballroom, otro tema de los clásicos del grupo que en directo funcionan como un cañón. Lo dicho, R&B en estado puro y sin filtros.


 Sören Karlsonn Sülo : Voz.
 Henrik Wilden: Teclados.
 Fredrick Fagerlund: Guitarra Eléctrica.
 Magic Gunnarson: Saxo.
 Lars Karlsonn: Guitarra Eléctrica.
 Martin Tronsson: Bajo - Voz.
 Johnny Drain: Batería - Voz.


DISCOGRAFÍA SELECCIONADA




TOO MUCH IS ALWAYS BETTER.- 2002          

BLACK RIVER ROAD.-2004

UP THE ROCK.-2006

IT´S MOST LIKELY.-2008

SET FIRE TO IT ALL.-2012











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