MARY WEISS: Dangerous Game .-

 

You´re Never Gonna See Me Cry

  

Uno siempre está deseoso de ver en directo a aquellos artistas que de una manera u otra marcan tú camino en esto de la música, y desde luego aquella jovencita que uno pudo atisbar a través del tubo de imagen de  una televisión en blanco y negro siendo un crío, cuando Mary Weiss era parte del trío Shangri-La. Algo semejante te pasaba con otra coetánea de ella, Ronnie Spector y The Ronettes, y que paradojas de la vida, con escasos 2 años del deceso de ésta con la primera.

Pasados los años, Mary Weiss vino de tour por Europa y en un garito de rock and roll de Madrid pudiste verla en directo, tenerla a escasos metros de ti y saborear su todavía excelente garganta, buena forma y la presentación de lo que era su nuevo Lp: Dangerous Game, ella que se había alejado de los escenarios y todo el show que conlleva.

 Y parece que este Lp, es un ajuste de cuentas de la americana con ciertas personas, situaciones... que vivió, al parecer en épocas pasadas, tal vez también, sea una búsqueda de encontrarse a sí misma a gusto con lo que hace en este álbum.

Tell Me What You Want Me To Do

DANGEROUS GAME.- Abril 2007.-  

 Ya la inicial My Heart Is Beating ajusta las tuercas a quien en algún momento conciso le hizo daño, y no sólo eso: la engañó y le mintió. Todo con una excelente banda, su voz está prodigiosa, sincera y ese toque sesentero. 

 Todo el Lp respira calidad, una onda sonora de otro tiempo, pretérito sin duda, pero ajustado a los parámetros de la publicación del disco. canciones atemporales como Nobody Knows (But I Do), Stop And Thinl It Over.

 El órgano de Dave Amels comparte protagonismo con la cadencia del tono de voz de Weis en Breat It One More Time y que hermana perfectamente con Cry About The Radio. El tema que cierra la cara A, homónimo del título del Lp, es un dulce balanceo con el que te sumerges en sus versos.

 Luego están las canciones rock and roll pasados por la batería de la voz de Weiss, esos temas que pueden convertirse en eternos como You´re Never Gonna See My Cry, Don´t Come Back, Tell Me What You Want Me To Do; los toques especiales con coros en la hermosa HeavenOnly Knows; el inevitable sonido spector que flota por todo el Lp, en especial en canciones como I Don´t Care.

Un disco con ese toque "especial " después de tantos años alejada de los micrófonos de Weis, y anda generosa, 14 temas en total que divide demócraticamente en 7 por cada cara. Puede que sea un triunfo pequeño para quien asaltó las listas de éxitos en los 60, pero es un regreso maduro, discreto y desde luego, a la altura de quien graba parte de su leyenda.