LUCKY PETERSON: LA ESPERANZA CONSUMADA
Lucky Strikes
Siempre fue muy correcto y hasta dicharachero en directo. Un perfecto gentelman alerjado de aquellos prototipos que le elevaban a niño prodigio en su niñez y a un excelso multiinstrumentista en su madurez. Como dicen que los dioeses los quieren jóvenes, se lo llevaron muy pronto, cuando creo tenía una carrera por delante longeva, y discos que poder degustar.
Caprichoso y niño prodigio para esto de la música, nada de extraño si tenemos en cuenta que su padre,James, tenía un garito de carretera, el Governor´s Inn, donde de vez en cuando se dejaban caer para tocar personal del nivel de Muddy Waters, Koko Taylor, Buddy Guy... está dicho todo. Por si fuera poco, tengo entendido que por manejos diversos de su progenitor, apareció en la televisión y que de renacuajo se decantase por la batería, pero con la apertura de mente y de años, la critatura le daba al órgano Hammond B-3. Cuando estirço un poco, no era exgtraño verle tocar ya en bandas de tipos pocos sospechosos, tales como Lightnin´Hopkins o Jimmy Reed
Nacido y crecido en Buffalo, en el estado de Nueva York, grabó pronto, singles con apenas 5 años. ¡Un poco pronto me parece !, pero al parecer nada menos que Willie Dixon, a la sazón amigo de su padre, lo pordujo y hasta grabaron un Lp juntos, progenitor y vástago. Our Future se llama el artefacto. La criatura, que se llama Lucky Peterson era un prodigio y tocaba y amansaba las teclas del Hammond B-3 como se masajea un cuerpo. Realiza varias jams sessions con quien se acercase al local y Little Milton, quiso que tocase en su banda. Con apenas 17 años se constituyó en un miembro más del combo hasta el punto de erigirse en el lider con el paso de los meses. Aquí estuvo 3 años hasta que saltó al grupo del magistral cantante Bobby Blue Bland, donde estuvo un trienio. Eso le abre las fronterzas pues viene a tocar a Europa, se profesionaliza y aprovecha para grabar un Lp, en un sello francés, Isabel-Evidence, Ridin - 1984, disco de crecimiento y desarrollo persosal y profesional de Peterson. Un lp de versiones donde cae lo más granado y trillado que uno pueda llevarse a los oídos, sean adaptaciones de B.B.King, Jimmy Reed, Willie Dixon; y curiosamente lo mejor del álbum es un tema propio e instrumental que da títullo al disco. Encontramos algún toque soul en la onda de Brocker T & The MGs, para variar.
Sólo toca el órgano, no sabe cantar todavía y la guitarra eléctrica, por ahora, la limpia.
Sigue como músico integrado en banda. Graba con Melvin Taylor en 1984 y ya, 4 años más tarde se instala en Tampa, Florida, y al sol del sureste americano pule su carrera en solitario mientras en los estudios King Snake, la critatura, prodigio andante, se perfecciona como hombre de sesión en diversas grabaciones de gente como Kenny Neal, Rufus Thomas, Lazy Lester... hasta que apareció en su vida el totem del blues moderno: Bruce Iglauer, y le ofreció grabar en solitario, en Alligaror, claro. Aqui me paro, porque el Lp en cuestión merece la pena. Es el 3º en su carrera, pero inicia el camino que le llevará, sin duda, a ser una esperanza consumada.
She Spread Her Wings ( And Flew Away )
LUCKY STRIKES.- Mayo de 1989.-
Echando los dados a rodar, la suerte en esta oportunidad le sigue fiel. En los estudios en los que Peterson ya se siente cómodo, graba este Lp. Derroche de órgano y guitarra eléctrica, la voz se estila. Así, la muestra alcanza todos y cada uno de llos 9 temas que conlleva el trabajo.
Estilizado, dando una imagen de modeno que deshace en la contraportada del disco, con un grupo solvente y práctico, Lucky Peterson se marca un álbum a la altura de la fama que le precede y que nunca antes, se vio reflejada en un vinilo.
Over My Head, Pounding Of My Heart, Can´t Get No Loving On The Telefhone...abunda en las 2 facetas de las que se componen sus canciones y sus estructuras, tanto da que lleve las manos a las 6 cuerdas de su Stratoscaster que a su Hammond B-3.
Luego, claro, hay temas en los que se esmera, a mí me lo parece, sin tener todavía la paleta de colores que asumirá en discos posteriores, quedan blues en toda regla: She Spread Her Wings ( And Flew Away ). Como si de una bing-band se tratara, a lo mejor era lo que pretendía, Lucky Strikes que da título al disco, se deja caer con un instrumental portentoso y arropado por una sección de metales, que le da consistencia al asunto. En la misma línea puede ir Ded Cat On The Line o el blues lento, clásico: Bad Feeling.
Repo Man
Sólo quiero tocar blues.- En medio de la veintena, Lucky Peterson tiene en estos momentos 26 años y ya empiiza a despuntar en esto de la música. Ha trabajado con un buen elenco de personajes que le superan en décadas e incluso, tipos como Kenny Neal coetáneo, le considera uno de los mejores interpretes del blues jóvenes. Escuela y talento tiene, y a raudales, como uj ego que irá creciendo a medida que cumpla años, giras y grabe discos.
Serio en el estudio de grabación, y dicharachero y showman en el escenario, a fin de cuentas se trata de entretener al personal mientras desgajas tus canciones. algo que debió de llevar muy claro en su cabeza desde niño, dado el privilegio que te da el que tu padre tenga un club de carretera y veas a tanta gente actuar desde que apenas levantas unos palmos del suelo.
Lucky Peterson pertenece a ese escalón de bluesman aparecidos en la década de los 80, dando un revulsivo al manido blues. Sus dotes como teclista y guitarista le diferencia en su mayoría de coetáneos que beben de las mismas fuentes, pero la originalidad se ve también en sus directos, bastante fogosos la verdad.
Al elenco de gente como Keb´Mo, Robert Cray, Joe Louis Walker, Shemekia Coopeland... hay que unir a Peterson, la reafirmación de su siguiente trabajo así lo corrobora. Repetirá la fórmula del anterior pero lo dotará de mayor empaque, consistencia. Parece que viene una nueva camada con hambre en esto del blues, el tiempo dirá.
I´m Free
TRIPLE PLAY.- Septiembre de 1990.-
Peterson experiementa, juega, añade, suma. Cada nuevo trabajo es un paso adelante. Sonidos que van más allá del blues tradicional, al toque de guitarra clásico se le añade el envoltorio de su Hammond B-3 que le da un toque especial, úinico diría.
El inicial Let The Chips Fall Where They May, donde extiende sus tentáculos como la araña precisa de su tela para recoger a futuras presas. La misma portada ya nos da una pista meridiana de que Peterson juega con teclados y gutarra. Y en esa recreación de su sonido, deleita con detalles finos al órgano en Your Lies. Como toca varias teclas, nunca mejor dicho, el R&B lo despacha en algunos temas, sea Repo Man, con vientos añadidos; Locked Out Of Love o Don´t Cloud Up On Me.
Tambien encontramos blues lentos, de esos de toda la vida, mientras Peterson juega con los teclados: Six O´Clock Blues o I Found A Love, ésta, una daptación de un tema de Wilson Pickett cuando estaba en Los Falcons; otros se esfuerza de forma contundente: I´m Free. Cierra con un insturmental: Funky Ray, con predominio de los metales.
Deja su impronta en este Triple Play, abre nuevos caminos en el trillado mundo del blues y su amplia paleta de colores, sabores y armonías fluye por el álbum.
Tribute To The King
Cierto estancamiento,. En diciembre de 1992 Peterson había abandonado Alligator y se fue a una multinacional, Polygram, lo que se traduce en más dinero y publicidad para sus futuros discos. A fin de cuentas abandona el círcuito de blues para situarse en el mundo y darse a conocer mejor.
I´m Ready- 1992 viene a corroborar lo dicho. Desde un punto de vista estrictamente musical, es un Lp bueno, pero dado sus anteriores discos observo un estancamiento, un fluir creativo que no tenía en Triple Play. Peterson tiene una vena intuitiva impresionante y le aleja de sus coetáneos, su versatilidad es una de sus armas, y aquí sale con adaptaciiones varias, cuando pienso que posee material propio mejor o cuando menos que no desmerece a lo qu aquí graba.
No falta de nada, blues lentos y excelsos: You Shook Me, una sección de vientos que le lleva en volandas, canciones muy cuidadas. Luego encontramos temas locomotoras como el instrumental Junk Yard; en la otra cara hallamos Who´s Been Talking.
La línea de guitrra eléctrica va tomando cuerpo y ganando cierto espaco, cortes de blues-rock y de toques soul no pasan desapercibidos. I´m Ready me da que es más un triubro a sus raíces y a lo acumulado hasta ahora, que un paso adelante y firme en su desarrollo, como si quisiera finiquitar algo y tomar impulso. En cualquier caso, Lp recomendable, sin duda.
Estamos ante un tipo que no llega a la treintena cuando saca estos trabajos, y desea ser él mismo, toca lo que le sale en cada momento del corazón, y le lleva al camino de un espléndido álbum, sin perder un instante en mirarse el ómbligo.
Your Good Thing Is About To Run Out
Se esmera. Encierra 12 temas de los cuales la mayoría son de cosecha propia, a veces de autoría compartida o en solitario, lo cual demuetra cierta madurez cretiva en su talento. Claro que ya puestos, en esa paleta que Peterson desarrolla, es capaz de coger una canción de Eugene McDanields, Hendrix, Warren Haves, Rooselvelt Sykes o Stevie Wonder. Pero en Beyond Cool todo suma.
Innova en Count On Me, Thas The Way It Ought To Be
Evoluciona adaptaciones para darles un nuevo motivo para escucharlas, que es lo que creo se debe de hacer, sino... ya está el original. Ya puestos: Compared To What ( E.McDaniels ); Up From The Skies ( Hendrix ); la vuelta de tuerca completa que le da a You Haven´t Done Notthin´ ( Wonder ) ; los metales de The Menphis Horns tienen mucho que ver el en redondeo final para que la cosa quede ... fetén.
Pero los temas que llevan la firma de Lucky Peterson no se amilanan con lo expuesto anteriormete, ahí quedan Pouring Money On A Drowning Love Affair, Betond Cool ( por cierto instrumental ). Your Good Thing Is About To Run Out o You Can´t Fool Me,para avalar lo expuesto. Más centrado en la guitarra eléctrica sin desmerecer el Hammond B-3, se suelta definitivamente en este álbum.
I´m Talking To You
¿ El mejor de la camada ? .- Las dificultades inherentes en tiempos pretéritos de sacar a un bluesman de su entorno familiar y social en el que se movía a comienzos del siglo XX, amen del problema de grabarle, a veces se perdía parte de la esencia, sin el encanto adicional de su crianza, el aroma, en algunas ocasiones se perdía y difuminaba, pero no había otra.
Aquellos equipos de grabación captaban algo de "la esencia ", pero la calidad brillaba por su ausencia. Los medios avanzaron, como todo se supone, una barbaridad y el blues de finales del pasado siglo, se centraba en 3 grandes selllos y zonas: Alligator de Iglauer en Chicago; Antone ´s Records en Austin - Tejas ; Hight Tone Records en California. Luego alguno más estaba y todos poseen, o intentan dar y dotar, de un sonido clásico propio a los interpretes de blues que graban en ellos.
Las distintas generaciones se intercambian y hasta incluso en la década de los 90 no es extraño que varios musicos graben conjuntamente. Les une una camaradería y hasta lazos de sangre, que es más dificil en otros ámbitos, como el rock. Judge Kenneth Peterson ya tenía a su padre que le enseñó a tocar la guitarra, adquirió conocimientos para manejarse con la batería y a estas alturas, ya era un maestro consumado con su Hammond B-3. Puede que esa versatilidad le convirtiera en el mejor interprete de blues a comienzos de los 90, respaldado por un sello potente, sus temas y discos llegaban a más gente. Y además, grababa en una multinacional y llega a más gente, alguna, ajena por completo al blues.
Más anclados algunos contemporáneos suyos en cuanto a la distribución de sus álbumes, pero no faltos de abundante trabajo. Un bluesman siempre tiene un garito en el que tocar cada noche. Así, fenómenos como Johnny Copelnd, Albert Collins y la maestría y talento de Robert Cray, que salía del circuito meramente de blues para abrirse camino en el seguidor de rock, graban juntos.
La camada de musicos blancos que se dedicaban en cuerpo y alma al blues, también empezaban a desarrollarse de manera inminente en la escena amaricana y de paso a festivales de diversos pelaje en Europa. William Clarke, Little Charlie & The Night Cats, y la trágica desaparición de Steve Ray Vaughan, que al parecer tenía relevo y desde luego, esa antorcha nadie mejor que para recogerla que Lucky Peterson, que a lo largo de los 90 consolida talento, buenas actuaciones y discos que le consagran sino como el número 1, nadie le desbanca de posciones altas. Desde luego de la camada, es el que más sobresale.
Las numerosas giras no le impiden tener excelente material cuando se mete en el estudio, invierte fuerte para invadir un mercado que cada vez le es menos ajeno. Arriesga... y gana.
Wash My Back
LIFETIME.-Marzo de 1995.-
Arriesga y gana. Explora nuevos sonidos y teje sonoridades que le llevan por otros caminos, su creatividad no conoce límites y hasta se esmera en la parte vocal, porque de las cuestiones instrumentales, Peterson, sino sobrado, sí es consciente de que es muy bueno.
Lifetine todo es muy cuidado: coros, la sección de metales, su guitarra, sus teclados y teje una tela de araña para suavizar: Bad Condition. Una de las características del álbum son los tonos de fusión con los que aborda las 12 canciones, casi todas de autoría propia, aunque se atreve, y sorprende con una adaptación de Sting: Wel´ll Be Together; el instrumental del maestro Freddie King: Hideway, y redondea el asunto con Sam Cooke: Change Is Gonna Come.
En el recorrido, tintes de funk: Shining Star que sobrevuela con las teclas modernas de su Hammond o Ham - Buger; pero cada vez gana más consistencia con la guitarra: Lifetime, Wash My Back, Bird In The Hand. Encontramos temas de empaque, duros, blues sin escarnio: I Ain´t Buyin´
Transita nuevos senderos con su hammond B-3: Blue Interlude y deja un sorprendente disco, muy bueno la verdad y como siempre, insisto, abriendo caminos en el sufrido y transitado blues.
Don´t You Even Care
La cosa se mantiene y sostiene.- La carrera metódica, consitente de Peterson se alarga a lo largo de la década de los 90. Entre medias sale unos esperiturales dedicado a Nathalia Jackson con Mavis Staples en 1995 y posteriormente saca otro gran disco: Move - 1998 lleno de blues, ciertos toques de gospel, Les´t Go Get Stoned, adapta algunos temas de contemporáneos, sean Robert Cray en Don´t You Even Care y ya puestos se calza el Purple Rain de Prince. No deja de lado el funky: It´s Your Thing y anda un poco parco en composiciones propias, apenas 4 de las 11 de las que consta Move. Precisamente el que da título al disco es una de las canciones emblemas, un R&B en condiciones con steel pedal, una de las joyas, en mi opinión, está en el blues Tin Pan Alley y I´m Back Again.
Se marca, otra vez, un gran trabajo, con el único matiz de demasiadas adaptaciones, cosa que uno con el tiempo se acabará acostumbrando en la discografía de Lucky Peterson.
De la cantidad de referencias y Lps que va sacanbdo Lucky Peterson a lo largo de las 2 décadas siguientes, hasta su tempreno deceso acaecido en mayo de 2020, destacaría a Double Dealing - 2001.
El disco con el que estrena milenio se encuentra entre lo más granado de su obra. Un buen montón de canciones llenas de blues, como que el da título al álbum, Peterson le da una vuelta de tuerca a esa veersatilidad de la que hace gala hace tiempo y en este disco, el blues urbano crece, sentimientos y emociones a lo largo de 12 temas, difícil destacar alguno en concreto. La lista es amplia: I´t Ain´t Safe
Además, ahora se ha convertido en un exclente narrador de historias que deja plasmadas en los textos de algunos temas, por ejemplo When My Blood Runs Cold, 4 Liittle Boys o RememberThe Day.
Ëste Double Dealin se haya en lo más alto de su punto creativo, lástima a que a lo largo de los lustros siguientes, su enorme talento no se concrete en obras tan magnifícias como las aquí reseñadas y tenga muy buenas canciones en Lps ligeros, difusos, aunque yo no me atrevería a descartar ninguno, así de entrada. Habrá que esperar a 2010 para captar de nuevo la esencia de Peterson, eso sí, dicho disco, salvo un sólo tema firmado con su padre James, todos son adaptaciones, pero vaya sí merece la pena tenerlo.
Four Little Boys
YOU CAN ALWAYS TURN AROUND.- Septiembre de 2010.- Que Larry Campbell forme parte del elenco de musicos que graba este disco, ya da idea de que calidad y buen hacer va a haber.
Lucky Peterson no se corta nada, y despacha 11 temas y va de un extremo a otro. Robert Johnson lo destripa nada más colocar el álbum, de ahí sale I Believe I´ll Dust My Broom y se calza las botas de vaquero para esgrimir una canción del folk singer Bill Callahan, la dulce I´m New Here, opereción que repite con Trouble, de Ray Lamontage. Pocos podrán decir que Peterson es un excelente interprete de blues, pero su paleta de colores y sonoridades es tan amplia que es capaz de explorar muchos sitios, el asunto está, en hacerlo tan bien como él sabe.
Toneladas de blues en varios cortes: Statesboro Blues, Why Are People Like That, Four Little Boys, o se echa manno de la pedal steel y se deja para los restos Death Don´t Have No Mercy, adaptación de Reverend Gary Davis
Trampled Rose la dota de un aire moruno y exencias árabes a un tema original de Tom Waits. Peterson toca la tecla del blues-rock, y nada mejor que echar mano de ún tema de la gran dama del sur: Lucinda Williams, Atonement deja huella. Toca varios palos y lo hace bien, y claro, vuelve a dejarnos otro excelente trabajo.
La 2ª década del siglo XXI nos dejará un reguero de discos de Lucky Peterson, algunos de ellos actuaciones en directo de las que tuvo muchas en nuestro país, pero no puedo opinar sobre esos trabajos al no tenerlos. Su Lp póstumo: 50. Just Warming Uo ! - 2019 cierra una obra de un tipo con un enorme talento. Lástima de su deceso tan tempranero, estoy seguro de que nos ha privado de unos cuantos discos que merecía la pena escuchar.
DISCOGRAFIA SELECCIONADA
LUCKY STRIKES .- 1989
TRIPLE PLAY .- 1990
I´M READY .- 1992
BEYOND COOL .- 1993
LIFETIME.- 1995
MOVE.- 1998
DOUBLE DEALING 2001
YOU CAN ALLWAYS TURN AROUND.- 2010
Judge Kenneth Peterson: 13 de Diciembre de 1964- Buffalo -Nueva York -USA.- 17 de Mayo de 2020 - Dallas - USA.-
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