AEROSMITH : LA HERMANDAD TÓXICA






  Entran en mi vida como los regalos que recibes en el día de tu comunión, que en mi caso jamás me consultaron si quería hacerla o no; no tocaba. O en el maremágnum de Navidades y demás fechas del calendario, te caen cosas a veces sin pedirlas. Me refiero que aunque siempre he sido consciente de los discos que acumulo, Aerosmith me fue llegando en ese atasco de atesorar Lps cuando uno ya tiene un buen montón e incluso dificultades para el acomodo de todos.  A comienzos de los 90 cuando eso sucede, me doy cuenta de que acabo de comprar en el Madrid-Rock el doble vinilo Get A Grip – 1993 y que hay algunos más de esta banda de Boston. Cuando la década acaba casi completo su discografía, pero ahora con cds.
 El asunto es que me fueron llegando discos de Aerosmith como de aquellas otras bandas americanas, casi sin querer, como los regalos a lo que hacía referencia. Consciente, claro, pero llegaban. Entre ellos Boston, Chicago, Kansas, New York Dolls, Peter Framton, John Cougar ( hoy Mellencamp)… y Aerosmith siempre me pareció una copia descarada de los Stones. Perry/Tyler eran cínicamente en su música y poses otros Jagger/Richard´s; y la verdad, siempre puestos a elegir, mejor el original que la copia, aunque luego hay matices, y muchos.



I Ain´t Got You



De aquellos Popular 1.- Por ahí me viene la esencia, su perfume, su música, sus primeras fotografías, sus poses, aunque ya digo que tardé un poco en cogerles el hilo y hasta bien entrado los años de rockerío en mi persona, Aerosmith no estaba en la línea de salida principal. Además eran tan lógicos en la destrucción del mito del rock and roll, que me daba un no sé qué.
 Han sido tantos los que han saboreado las mieles de la gloria, que no supieron asimilar tanto néctar que acabaron en la miseria. Generalmente cuando se alcanza el éxito en forma de ventas millonarias, giras extravagantes y de llenos en los estadios, se acaba en la última curva de carretera encontrando la bala absurda de la ruleta rusa; o se desliza en forma de Edén entre las sábanas de un hotel con la última jeringuilla aun colgando del brazo. Y es ahora cuando el público, ese circo que es el rock and roll los mistifica, siguen el guion estúpido de llevarlos a los altares de los mártires, se les canoniza en el sacrosanto templo del dólar. Sí, porque Aerosmith son muy americanos, pero mucho, eso de ser de Boston no es pasajero, no es baladí.
 ¿Pero qué pasa cuando vendes el alma al diablo, sales con contusiones pero vivo, te arruinas, pero sobrevives y relanzas tu carrera, y eres otra vez rico? Incluso hasta encuentras una hija, Liv Tyler, hoy convertida en excelente actriz. Sí, es obvio, es muy guapa, bella, hermosa, proyecta magnetismo sobre la pantalla. Es claro, el vástago de Steven, el voceras de los Aerosmith.
 Ese último as en la manga sale bien, lo saben jugar correctamente y cuando todo estaba preparado para unos fastos funerales, operaciones varias de merchandising y los buenos compositores que eran Perry/Tyler and Cía., supieron hacer un regate a la vida como Messi cuando se cose la pelota a su pie izquierdo. Curadas las heridas, estos hermanos tóxicos dejaron escapar sus múltiples demonios en la Caja de Pandora y parece increíble, pero en los 90 cuando me llevé a mi casa el Get A Grip, no había más que poner la MTV y allí estaban ellos con un vídeo protagonizado por una bisoña Lyv Tyler y volviendo a ser una de las bandas más admiradas de esta década.
 Su rock se ha ido convirtiendo en uno de los grandes pilares en los que se cimenta la historia de este género, sus directos son muy buenos, es un aquelarre de sonido y luces. Poco a poco encontré algo más que la chulería y entonación en Steven Tyler que los labios carnosos, las poses y el tono de Jagger; además me gustan esas bandas que llevan varias décadas en candelero con los mismos miembros que empezaron, lo cual me indica que deben de tener una cierta amistad y propensión a juntarse más allá de los estudios y giras. No abunda en el rock semejante hecho, así de memoria me vienen The Beatles, The Police, U2, ZZTop.



Sweet Emotion


 Tópicos .-  Mira que han caído revistas en mis manos, hojeadas y leídas hasta la extenuación. Grupos, solistas, descendidos por el sumidero de las adicciones unas carreras en gran medida interesantes. O más simple, qué hay más hermoso que la vida, agotarla hasta que tu cuerpo te traiciona y dice ¡basta, no deseo estar más en ti! Siempre acaba traicionándote, bien, démosle pocos motivos para enfadarse y que se quiera ir de nosotros, que sea la existencia la correa transmisora que nos mantiene unidos a este cosmos universal, esa línea imaginaria que al menos en mi caso, deseo extender todo lo que pueda.
 No entendí por qué una banda como Aerosmith tiraba tanto del hilo para perderse en el sumidero de las sentinas, invadidos en las cloacas del vicio y desperdiciar su talento, que lo tienen.  La suya es una carrera salpicada de tópicos, altibajos y excesos, tan de manual, que asusta de tan manoseada; esos desenfrenos químicos y los insalubres rigores del estrellato.
  En gran medida son hijos perdidos del rock de los 70, grupo que asciende al cielo como una traca de fuegos artificiales y sus pedazos se esparcen por un amplio radio de olvido y clínicas de desintoxicación. ¡Ay…! Cuantos tópicos, y muchos de ellos celebrados por una amplia plebe que desea ver en público semejante espectáculo, no veo la poesía de meterse un chute en el lavabo de un hotel y palmarla, o entre sábanas de satén con una mujer neumático a tu espalda observando como el iris de tus ojos se va cerrando de a poquitos, hasta que las respiración se escapa para no regresar a tus pulmones.
 Aerosmith es ese impúdico, lento y maloliente descenso por el inodoro del rock corporativo. Pero han vivido para contarlo, y tal vez eso que desde mis primeros años de escuchar a “pelujos”, me tiraba para atrás de ellos, no su música. ¿Cuántos iban cuando empecé a almacenar discos en mi habitación, luego en mi estudio, más tarde en el ático?  La práctica nos demuestra que sobrevivir al vicio suele ir acompañado de la extinción del talento, si es que alguna vez hubo alguno, por supuesto. Eso sí, originales no, pero tal vez ahí radique su riqueza. ¿Qué tienen AC/DC o Status Quo? Raca raca… supongo que algo más, sus esencias bluesereas, sus talentos al servicio del rock, sin inventar nada, pero manteniéndose, como buenos artesanos, conocedores de su oficio. En el caso de Aerosmith son capaces de hacer como el ave fénix, remontar una trayectoria hecha añicos por la que casi nadie apostaba. ¡Ah, claro…la habilidad de utilizar las nuevas tecnologías en la década de los 90 les relanza, los nuevos inventos en forma de MTV y colocar un tema en medio mundo! No está al alcance de cualquiera. Reinventarse, abarrotar estadios de nuevo y cubrir los oídos de varias generaciones, incluso grabar buenos discos, no muchos, pero algunos interesantes en 4 décadas de trayectoria.
 Sí, puede que sea un seguidor suyo, un oyente más de su rock de 2ª o 3ª generación; también los descubrí en los sótanos húmedos de las tiendas de discos de 2ª mano, recorrí con las yemas de mis dedos Lps antiguos en series de precio medio y cajones donde en ocasiones los de Boston, estaban por allí; tardes de sábados buscando en los estantes, billares con rock al fondo entre partida y partida con una jarra de cerveza en el borde de la mesa, donde a veces se colaba algún tema de Aerosmith.



Walk This Way



 Unas gotitas .-  Más que nada para saber de dónde venimos y a lo mejor somos capaces de averiguar hacia dónde nos dirigimos. Boston parte como cabeza de cartel donde arriman 2 guitarristas: Joe Perry y Brad Whitford; a la batería Joey Kramer, a las 4 cuerdas Tom Hamilton, el vocerío corre a cargo de Steven Tyler. Hacia finales de 1969 se forma el grupo, se mueven por todo Massachusetts, apenas son 5 músicos desconocidos que se inquietan por realizar un rock and roll agresivo que proviene del rhytman & blues. Comienzan a ganarse fama de banda dura y concisa, lo que termina por llamar la atención de la CBS ofreciéndoles un contrato que germina unos años después de patearse cuanto garito les contrata en un Lp: Aerosmith – 1973, un  trabajo un poco vacilón y donde encontramos piezas de resistencia de la 2ª generación del rock duro USA de los 70. Hay híbridos callejeros en la línea de los Stones y de los New York Dolls: Mamma Kin o baladas en el camino de flotación de Led Zeppelin: Dream On.
 No se hace esperar mucho el 2º trabajo, Get Your Wings – 1974, sigue los mismos esquemas que el anterior con unos buenos arreglos y pegada contundente, podemos destacar S.O.S, Woman Of The World o Pandora´s Box. Para mí con demasiados aderezos y una cierta grandilocuencia en algunos detalles, y menos fresco que su debut.
 Eso sí, se convierten en la gran esperanza blanca del rock USA, algunos lo sitúan al nivel de Led Zeppelin o The Rolling Stones. Mucho me parece, no había tantas nueces en el cesto como para semejantes comparaciones por mucha vena patria que salieran en artículos de la prensa americana. No se puede negar la ascendente trayectoria de un grupo bueno en esta época, su calidad, sus directos y una cierta alternativa estadounidense a todas aquellas bandas que se aposentaron en suelo yanqui; para mí todavía muy lejos a los citados anteriormente.
 Las giras por USA les acaban convirtiendo en el dinosaurio que perseguían ser con tan sólo 2 Lps en el mercado, y al igual que otros muchos, el éxito conllevó para la banda el billete gratuito para una espiral de sexo y drogas que sería el inicio de su degeneración como grupo y como personas. Pero antes de la debacle absoluta existen días de vino y rosas y para confirmar que no eran los parientes pobres de los Stones, primer Lp de triunfo masivo que confirma su gancho comercial de una fórmula construida de sueños húmedos de aspirante a groupie, mucha ambición y un buen arsenal de riffs sustraídos a la pérfida Albión. Por su puesto, tenemos “juguetes en el ático “.



Uncly Salty



 TOYS IN THE ATTIC .- Abril de 1975 .-
 Sería posible pensar que si la banda hubiera fracasado por la época en que se publicó este Lp, se supone que se habrían replanteado la situación, aunque sólo sea una suposición particular. Nadie es capaz de reconocer que anda por el mal camino de la autodestrucción cuando a tu alrededor tienes tantos adláteres que te aplauden con las orejas y te acarician con los pies, todo funciona relativamente bien y no faltan estadios llenos de escuchar tú rock, mujeres que se te ofrecen y te crees el centro de atención. Eso sucede cuando Toys In The Attic se publica en la primavera. No deja de ser un gran disco, con un buen puñado de canciones y además el álbum más vendido ese año en Estados Unidos.
 No está nada mal para un grupo de muchachos que apenas 6 antes se pateaban los tugurios para ofrecer su música y de paso lograr algunos dólares, no dejaba de ser un entretenimiento antes de profesionalizarse de manera rotunda.
 Reparto de firmas en el Lp en cuanto a la autoría de las canciones. No sólo Perry/Tyler, hay más, Aerosmith es bastante más que el guitarra principal y el carismático cantante. Existe algún trallazo, así de salida y que acaba por dar título al disco, Toys In The Attic, pero me quedo con melodías más trabajadas, elegantes y con ciertos puntos de finura: Uncle Salty , ese rock-blues callejero me llena más. Si el 1º lo firman el dúo Perry/Tyler, ésta 2ª es Tyler/Hamilton, lo cual nos lleva a un eclecticismo bien entendido en cuanto a composición y estructura de la banda. Los sonidos rockeros, aquellos por los que Aerosmith deben de figurar en los anales de la música los hallo en canciones como Adam´s Apple, excelente slide de Joe Perry; un intravenoso prototipo de funk-rap en Walk This Way;  R&B  tradicional Big Ten Inch Record ( más tarde recuperada por Barrence Whitfield ). Las influencias de los Stones son más que visibles en Swett Emotion, me refiero a la etapa psicodélica de los británicos y su Their Satanic Majesties Request – 1967. No perdemos los buenos riffs a los que nos empieza a acostumbrar Joe Perry, alguna gota echa en No More No More. El disco nos ofrece un último golpe de contundencia en Round And Round y concluye con la suave melodía al piano de You See Me Crying.






Last Child







1975: Toys In The Attic Tour .-  Su gira por Estados Unidos promocionando el disco de los “juguetes en el ático” les estaba repercutiendo muy positivamente en sus ventas, al fin y al cabo despachar 6 millones de copias no está al alcance de cualquiera y sus directos les colocaban en la línea de salida de los Stones y Led Zeppelin.
 A fin de cuentas, visual y genéticamente, Steven Tyler, es un ambiguo putón de labios abultados que canta muy bien, y Joe Perry parece un indio cherokee reencarnado en esa exposición mediática en la que otros habían legado antes, pongamos por no repetirnos, en David Johansen/Johnny Thunders (NYD). Una mutación clónica, un reflejo distorsionado a semejanza de Valle Inclán, que se vería recompensado con creces con delirios de fama y grandeza. También de un equipo de management interesante, pero debo de añadir que Aerosmith se había forjado su estilo y fama en la carretera, tocando de punta a punta del país para promocionar sus primeros 3 discos. Aunque la sede central seguía estando en Boston desde 1970,, tardaron 5 años en convencer a las plumas autorizadas de que tenían voz propia, al menos eso he sacado en claro bajando al trastero de mi casa y recopilando varios ejemplares de Rolling Stone  de esta época.
 Todos sus tours de primeros de los 70 están ubicados en Estado Unidos. Su farmacia a cuestas no era óbice que pasara por Europa, demasiadas trabas aduaneras llevando los laboratorios Sandoz a cuestas, no hay nada más que recordar las peregrinas actuaciones de Keith Richard´s con los Stones, mejor no tentar la suerte. Puede en parte explicarse que a esta orilla del Atlántico Aerosmith no tuviese apenas impacto por la carencia de tours y sus escasos discos publicados. Aun así van a pichón fijo, tras la consabida gira de nuevo se meten en el estudio para grabar su siguiente Lp, no pierden el tiempo y parece que entre sustancia y sustancia les queda tiempo para elaborar Rocks – 1976, si no el mejor disco de Aerosmith, sí uno de los destacados de toda su amplia discografía.-



Combination



ROCKS.- Junio de 1976.-

 Es probablemente el otro gran Lp de la banda, el que mejor define su estilo y tal vez una de las influencias en grupos posteriores como Guns´N´Roses. Es un álbum de preciso rocknroll metalizado  y boogie julandrón, alimentado con alto voltaje y unos estribillos que te chulean sin compasión.
 Riffs crudos y sabrosos sobre un colchón de bajo y batería capaz de amortiguar los saltos más osados y los chillidos en ocasiones algo histéricos de Steven Tyler, para abrir boca, nunca mejor dicho, en Black In The Saddle. Rats In The Cellar es sin duda una de las composiciones más veloces y energéticas de Aerosmith con unas guitarras contundentes y un veloz sonido de callejones calientes que le imprime Steven Tyler a su armónica. Será Joe Perry quien tome el mando en Combination, creando a la postre parte del sonido más característico del grupo.
 Hay varias canciones en esta línea de rock rápidos, fuertes, Sick As A Dog, aquí predominan unas ciertas armonías más pop sin dejar nunca de lado que las guitarras eléctricas aúllen a sus anchas. Nobodýs Fault desarrolla unos patrones rítmicos pesados, Joe Kramer esté efectivo y me hace recordar la pesada percusión que imprime a sus temas John Bonham, de Led Zeppelin. El funky bailón, de calles oscuras y noches sin luna aparece de nuevo en Get The Lead Out, voz forzada de Tyler y armónica demoniaca.
 Características del rock ejecutado en los 70 es el sonido que Aerosmith pueden hallar en canciones como Lick And A Promise. Si cierras los ojos rápidamente se te van a esa época de coches chocones, noches de fiesta y máquinas tragaperras con juke-box en una esquina donde dé a poquitos alguien coloca unas monedas y salta un single.
 Tiernas baladas de partir el corazón entrelazadas en las madejas de rock contundente, pero es que el funky lo desarrollan muy bien, en Last Child están tremendos, con unos melancólicos arpegios de guitarras y Brad Whitford con simples riffs a las 6 cuerdas. Home Toning cierra el Lp, composición de Steven Tyler, canción que abre brecha a mí entender de futuros temas, por ejemplo Queen exploró dicho sendero. A fin de cuentas es un lento en toda su extensión con aristas de guitarras vacilonas.






Cheese  Cake



Envueltos en platino.-  El éxito del álbum incitó la reedición de un sigle: Dream On que alcanzó el puesto 10 en 1976, y aumentó las ventas de los primeros dos álbumes de la banda. Como a continuación editaron Rocks, doble platino y ventas millonarias y nº 3 en álbumes ¿quién le ponía el cascabel al gato? 
 Entre giras y tours Aerosmith se tiran 8 años en la carretera que pasa factura a sus cuerpos, las relaciones personales entre ellos y adyacentes, a la compañía discográfica que siempre quiere más y les debe de exprimir hasta la última gota; a la calidad de sus discos que empieza a descender hasta llegar al consabido directo, esta vez en forma de doble disco con el título de Bootleg – 1978 aunque un año antes lanzaron el olvidable Draw The Line – 1977 carente de la magia y sonido contundente con el que nos había obsequiado hasta ahora.
 Tonterías varias entre ellas el aceptar participar en la versión cinematográfica de Sgt. Pepper Lonely Hearts Club Band aportando una canción: Come Together de The Beatles. No eran los únicos, basta echar un vistazo al catálogo de semejante engendro, pero en fin, serían cuestiones de marqueting y como Aerosmith andaban subidos en la cresta de la ola, pues también se les escuchaba por ahí. Malgastar el tiempo discutiendo, hacer perder más de un millón de dólares a la compañía en averías varias de Lps que no aportaban nada y hubo que lanzar el directo, entre otras cosas para tapar el mal momento del grupo y el pirateo al que eran sometidos. Eso sí, el disco es cojonudo, las guitarras echan humo del espeso y el hatajo de canciones que desarrollan son carnosas y desprotegidas de maquillajes innecesarios, 16 temas y hasta alguna versión se marcan, como la de James Brown, Mother Popcorn.
  Ley de vida, que no perdona, Aerosmith habían dilapidado parte de su fortuna discográfica y monetaria en vicios varios, conjugando un compulsivo apetito autodestructivo con la química sexual y drogadicta del momento; a fin de cuentas los chicos malos de América surgieron de las catacumbas garageras para patentar su propia versión metálica de los maléficos Stones.
 Pese a estar rodeados de discos múltiples de platino, lo cierto es que cada nuevo Lp vendía menos, las ganancias eran inferiores, para su tren de vida claro, y el aura, esa cosa tan ambigua, como el alma, el éter… la perdieron de la mañana a la noche, y es que cuando la materia gris se les transformó en una viscosa mucosidad con residuos opiáceos y cristales alcalinos en lugar de células, aquello estuvo a punto de echar a perder a un fenomenal grupo.






Parón y marcha de Joe Perry y Brad Whitford.- Era lógico, o se mataban entre ellos o aquello se acababa encima del escenario para pantomima y crucificación general de la satánica música del demonio. Carnaza inútil a estas alturas. Totalmente destrozado por las drogas y el abandono de su guitarra principal, Perry, Steven Tyler es una pantomima de trapo que no puede resistir el empuje de la maquinaria Aerosmith,
 encima se rompe su maltrecho cuerpo en un accidente de moto. ¿Les suena de más genios heridos por las 2 ruedas? Por si fuera poco, el otro guitarrista, Whitford abandona el barco o la vida lo abandona a él, que para el caso… Todo sucede entre el final de 1979 comienzos de 1981.
 Joe Perry inicia un nuevo proyecto que no nos interesa pues él no es el protagonista de esta historia, sólo dentro de Aerosmith, y es sustituido por Jimmie Crespo, y un tiempo después a Whitford le releva Rick Dufay. El parón de los tours lleva consigo un cierto sosiego, aunque entre medias hay 2 lps mal considerados por la crítica pero que a mí me parecen interesantes: Night in The Ruts – 1979 y Rock In A Hard Place – 1982, que suman a su discografía y no restan.



No Surprize



 NIGHT IN THE RUTS .-Noviembre de 1979 .-
 Metidos en los estudios de grabación para la preparación de lo que acabaría siendo este disco, la compañía les aprieta para salir de gira y recaudar dinero ante el desembolso descomunal que estaba realizando. En parte para amortiguar gastos. ¡Craso error! Esta gente estaba para entrar en una clínica de desintoxicación, toxicómanos como eran todos ellos más la cohorte de adláteres a su alrededor, incluyendo compañeras, inician un pequeño tour en el verano que acaba en desastre y algunas peleas, pero de manera literal, con algunos de los componentes de Aerosmith y ayudantes.
 Así pues cuando regresan al estudio de grabación para Night In The Ruts, Joe Perry se abre del asunto, del grupo y de la composición del Lp. Deja varios temas acabados y grabados con sus guitarras, pero Jimmie Crespo le sustituye 1º como colaborador en la grabación y luego como miembro estable del grupo. Desde luego si la compañía de discos lo que pretendía era seguir en la brecha con Aerosmith y el tour consiguiente, justo fue lo contrario lo que consiguieron. Aun así, este Lp, secundario en su discografía y más después de publicar sus predecesores: Toys In The Attic y Rocks, es totalmente recomendable.
 Puede que Perry y Tyler no se sentaran a componer como años antes, pero hay piezas que te sacan una sonrisa y esperas rock con ganas, nada más empezar escuchar está No Surprize, en la línea típica de Aerosmith. Perry punteando y Whitford respondiendo con sus rasgueos, y descubres que la fórmula sigue funcionando. Hay curiosidades interesantes, la sección de vientos en Chiquita que conlleva una suciedad como barro llevado calle abajo por el agua hasta encontrar el desagüe. No faltan chirriantes guitarras, malvadas y sucias, slides que recorren el mástil en Cheese Cake; el toque funky en Three Mile Smile con sus cambios de ritmo, si es bien ejecutado, en directo es para soltar amarras. El buen cantante que es Steven Tyler se nota y mucho en la ejecución del blues Reefer Head Woman, sus altos son casi comparables a los de Robert Plant, toda la sección rítmica: Hamilton/Kramer, perfectos, por si faltaba algo, la ratonera armónica en verdad que nos envuelve en unos surcos muy nocturnos; sí, tal vez estemos en la mina picando. Rock and roll sin paliativos, Bone To Bone (Coney Island White Fish Boy)  con aullidos callejeros muy en la línea zeppelin. Aires de jam sesión en la versión que recrean de The Yardbirds: Think About It; el final se lo reserva Seteven Tyler para él solito y marcarse una baladita al piano, Mía.



Steven Tyler: Voz, Armónica, Teclados, Percusión Joe Perry: Guitarra Brad Whitford: Guitarra Joey Kramer: Batería Tom Hamilton: Bajo



Bolivian Ragamuffin



Aterrizaje forzoso .-  Ya se sabe lo de las desgracias, que no vienen solas. La banda siguió de gira en apoyo a Night In The Ruts con el nuevo guitarrista Jimmy Crespo a bordo, pero los tours no eran iguales, Steve Tyler andaba perdido y agobiado y supongo que no sólo por los estupefacientes en su organismo, es que aquello no funcionaba. Pero ¡ay! Siempre existen recursos, el consabido “grandes éxitos” que su compañía lanza en 1980, nada menos que despacha 11 millones de copias. ¿Quién les puede decir a esta gente que andan descarriados cuando sus cuentas corrientes están de nuevo repletas? Y ya he afirmado, su último Lp de estudio, Night In The Ruts es bueno y defendible, otra cuestión es que no sean capaces de mantenerse en pie más de dos horas y tocar correctamente en sus shows. Que Tyler se rompa la cabeza en el dichoso accidente de moto que le deja postrado 2 meses en un hospital y que Brad Whitford se acabase largando, no se sí echaba de menos a su colega Perry, el caso es que hubo frenazo en seco y 1981 no existió para Aerosmith.
 Esos meses en el infierno, o no, pues si estás todo el tiempo colgado como que no se debe de estar tan mal si insistes en persistir en ese estado, debió de servir de recapacitación, a fin de cuentas Aerosmith es una gran banda, buenos músicos, cuestiones al margen, el problema es componer de nuevo algo interesante y eso lleva su tiempo. Rock In A Hard Place venía a reivindicarles aun con los consabidos cambios en la formación, recuperar o mantenerse en el lugar que empezaban a perder a comienzos de los 80. Más duros que antes, rozando el hard en muchos momentos, se marcan un trabajo destacable, ¡ ah, solo fue disco de oro!



 ROCK IN A HARD PLACE .- Agosto de 1982.-
  Vuelta a los mandos de la producción del mago Jack Douglas y eso es nota desde el primer tema con Jailbait, inicio demoledor, muy heavy, quizás su álbum más de pistas de coches chocones, que escuchas por los altavoces de la feria reinante hasta que te preguntas quienes son, porque te “suena”. Mucho rock potente donde Jimmie Crespo se luce, probablemente sea otro caso semejante de Tommy Bolin, poco apreciado en su momento. Las piezas caen unas detrás de otra sin mucho condimento pero alimentan al oído, sin grandes diferencias unas de otras, así van cayendo como bolos: Bitch´s Brew, Lightning Strikes, Bolivian Tagamuffin, Joanie´s Butterfly, Jig Is Up
 Hay algún matiz, la balada Cri Me A River, con un tratamiento muy metálico, fuertes percusiones y muy de los 80. Prelude To Joanie donde las guitarras acústicas toman el protagonismo y dan un giro a un Lp que iba a piñón demasiado fijo; destacaría la potencia del tema que da título al disco, ese Rock In A Hard Place( Cheshire Cat), con esas guitarras arrastradas y las partes de armónica de Tyler. El final de Push Comes To Shove, un tempo medio para calmar a las fieras y dejarte en Stanby.
 Cierto que queman sus últimos cartuchos con un disco que a ratos puede ser irregular, que posea un defecto para mí, es el menos Aerosmith de todos, no posee ese sonido de los de Boston, normal si tenemos en cuenta que los 2 guitarras fundadores no están, pero no hacían más que confirmar que esta gente seguían por la buena senda y no habían perdido inútilmente el tiempo en el estudio.



Rock In A Hard Place ( Cheshire Cat )


La resurrección en los 80.- Pese a un cierto resurgimiento de la banda, había gente muy enganchada a la heroína, Steven Tyler no tenía vena por la que chutarse, pero mientras tuviese dinero no existiría problema. El asunto es que con desintoxicación o no, ni a Aerosmith les fue bien del todo en directo ni Perry y Whitford tampoco es que se cubrieron de gloria en sus proyectos en solitario; era un hecho que se tendrían que reunir, unir fuerzas y drogas y tal vez algún talento que tuviesen oculto. Si no parecía que el final de la banda era una cuestión de consumición como la leña al fuego, más a menos algunos esperábamos que alguna esquela en el Rolling Stone nos comunicara del fallecimiento de alguno de ellos, sobre todo de Tyler, aquel excelente vocalista caído en las fauces del lobo.  Pero lejos de ser realidad en algún momento se anuncia la reunificación con los 5 miembros originales: Tyler, Perry, Whitford, Hamilton y Kramer. Lo que acabaría apareciendo con el transcurso de los meses es Done Whith Mirrors, una vuelta de tuerca a los originales Toys In The Attic y Rocks, difícil, pero no imposible. Hay que puntualizar que ahora es Geffen su casa de discos, que Steven Tyler tenía recaídas sonoras con el caballo en vena. Su antigua discográfica aprovechó para colocar dos volúmenes de directos, Classics Live, y así seguir sacando tajada y más cuando Aerosmith se disponía a girar todo un año por Estados Unidos, de agosto a agosto (1985/86) promocionando su nuevo Lp: Done Whith Mirrors publicado a finales del 85. Al finalizar el tour parece que la suerte les llama a la puerta. Un grupo rapero quiere realizar una versión de su canción Walt This Way, no sólo eso, los Aerosmith colaboran con RUN CMC en dicho tema y acaba siendo un éxito, sobre todo por el video clip y su emisión en la MTV, devolviendo al grupo al primer plano y una enorme popularidad que por los muchos excesos habían perdido, sobre todo en los directos, una de sus armas fuertes.  Conscientes de su estado, como si de un comando se tratase, todo el grupo entra en una clínica de desintoxicación durante un largo periodo mientras Done Whit Mirrors alcanza el disco de oro.



She´s On Fire



DONE WHIT MIRRORS .- Noviembre de 1985.-
 Como sí de unos personajes del callejón de los gatos de Valle Inclán se tratase. En “ Nuestra Señora De París” – 1831 de Víctor Hugo, una serie de personajes malvivía en la Corte de los Milagros que entre los siglos XII y XVI  aglutinaban en ciertas barriadas de la capital francesa a pedigüeños y estafadores de toda laya, dueños curiosamente al anochecer de sus miembros y sentidos tras haber fingido durante toda la jornada ser ciegos, idiotas… vamos, dignos de caridad. Los Aerosmith rotos por sus vicios, diálisis al margen para todos y varios cientos de miles de dólares gastados en sus maltrechos cuerpos, no malvivían en lo callejones oscuros pordioseando. Eran hábiles con sus instrumentos, buenos músicos simplemente acosados por cuanto yonki anduviese cerca de ellos y de su cohorte, pero cuando dejaban un poquito de lado sus escasas convicciones de rehabilitación y se concentraban, como los mendigos y pedigüeños de Víctor Hugo al anochecer, en el estudio de grabación, hacer rock de muchos kilates. Done Whit Mirrors es un disco perdido en medio de su discografía vida llena de excesos. Un álbum poco considerado y que está entre lo mejor y más granado de sus trabajos. El futuro le aguardaba a los bostonianos uno de los mayores retornos de la historia del rock, como si ahora tuviesen controlado el asunto de toxicologías varias, egos encontrados, manías y paranoias múltiples. Como quedó demostrado en los últimos 3 años, Aerosmith es bastante más que Kramer-Hamilton y el putón vicioso de Tyler. Perry y Whitford aportan el resto y entonces, y sólo entonces, se convierten en un combo lleno de energía, talento y fuerza que son los siguientes 4 álbumes del grupo.
 Let The Music Do The Talking nos abre el apetito con esas guitarras bufando como bisontes en el Parque Nacional de Yellowstone. Rocks concisos, rocosos, herméticos; hay varios y a tener en cuenta donde el grupo brilla sin alardes vocales ni instrumentales destacables, simplemente como una excelente banda de rock and roll. A Let The Music Do The Talking se pueden unir : My Fist Your Face, Gypsy Boots, The Hop.
 La vena blues aparece en Shame On You, Kramer potente y un esforzado Tyler estirando las vocales y el cuello para alcanzar el cenit. 
 Tempos medios: The Reason Dog; la facilona Shela, probablemente endulzada para las ondas radiofónicas con edulcoradas guitarras.
 El juego de la slide a cargo de Joe Perry está interesante en She´s On Fire. La pegada de la sección rítmica semejante a la Bonham/Jones, aquí Kramer/Hamilton se esfuerzan, pero tanto la voz de Tyler como de sus compañeros están descaradamente muy influenciados por los británicos, para mí de lo mejor el Lp, sino la más destacada canción.
 Darkness cierra el álbum, rock trepidante con varios cambios de ritmo. Me parece un descarte de la época de Rock In A Hard Place, su tono excesivamente heavy muy de los 80.
 A fin de cuentas Aerosmith despacha un excelente trabajo perdido en medio de su catálogo discográfico, que de no estar atento se le puede escapar al oyente.







Let The Music Do The Talking

Abriendo la caja de Pandora.- Si las diálisis daba resultado o no el tiempo lo diría, pero su equipo de managament capitaneado por Tim Collins, se propuso que hacia la entrada de la nueva década en los 90, Aerosmith podría regresar al lugar que tenían 15 años antes. Si a eso añadimos buenas dosis de canciones distribuidos en trabajos interesantes, sean en Done Whith Mirrors o Permanent Vacation. A todo esto ayudaba los tutes que esta gente se da en directo. No hay año que no se estén pateando las carreteras de Estados Unidos, salvo excepción, así pues a finales de 1987 les encuentra sumidos en una nueva gira como promoción de su último lanzamiento: Permanent Vacacion Tour que arrancó en octubre de 1987  y llegó hasta septiembre de 1988, un año después de publicar el Lp Permanent Vacation .
 Parece que todo iba bien, incluso en el verano del 88 en una cura de humildad sin precedentes, abren los conciertos para Guns ´N´Roses, eso sí, al parecer se explica en el contrato que nada de drogas ni en los camerinos ni aledaños. Aerosmith llevaba a rajatabla el periodo de rehabilitación, al parecer la hermandad toxica había llegado a la conclusión que mejor hacer buenos álbumes y gastarse la pasta que les proporcionaban las giras y los royalties, en casas, algún capricho en forma de automóvil, eso sí, de vez en cuando un pequeño homenaje…
 Abierta la caja de Pandora con su nuevo sello Geffen Records que los sitúa de nuevo en la actualidad, lo que hubiese sido el canto del cisne con discos como Night In The Ruts o Rock In A Hard Place, se confirma encadenando buenos discos posteriores y unas giras que los colocan en lo que siempre fueron, una gran banda de rock.
 Por 1ª vez no sólo giran por Estados Unidos y Canadá, sino que por fin dan el salto a Japón, 6 shows a mediados de junio de 1988. Habría que esperar más de un año para ver a Aerosmith en Europa, ¡no…!, ni rastro de  pasar por España, para eso todavía quedaban unos añitos más, y ya tenía ganas de echarles una ojeada observando el buen momento por el que atravesaban.



Heart Done Time



PERMANENT VACATION .- Agosto de 1987 .-
 Noveno disco de estudio de la banda bien respaldado por varias canciones interesantes y una ristra de video clips interesantes, mostrando su capacidad camaleónica para los nuevos tiempos que vienen, no deseando ser un grupo más de la dorada década de los 70,¡ para nada !, Aerosmith se camufla en sonido e imágenes diversas.
 Lp si no rotundo, sí muy compacto y que describe las claras influencias del grupo a través de los años. Rock conciso: Hert´s Done Time, Permanent Vacation, Magic Touch, Girl Keep Coming Apart. Una vuelta a las raíces del blues dotándole de nuevas formas: St. John o Hangman Jury. Buscan nuevos caminos de explotación del rock, ese magnífico tema que es Rag Doll.
 Componen una ristra de canciones más que interesantes, e incluso versionan un tema  de The Beatles, I´m Down; alguna baladita: Ángel o el cierre con The Movie. Ya digo, en total 12 temas que les colocan en la catapulta de las 2 siguientes obras maestras como son Pump - 1989 y el doble Get A Grip – 1993.- Desde luego con mucho más matices y telas de araña de lo que una 1ª escucha puedes obtener, posee mucho más… cada cual debe de hallarlo, para beneficio propio por supuesto.







 Como el ave fenix.-  Todo parecía resurgir de nuevo, con un buen número de copias despachados de su disco Permanent Vacation, 5 millones para ser exactos y colocando 2 singles en los primeros puestos: Dude ( Looks Like A Lady ) y Ángel, la gira de presentanción fue un éxito.
 Les pillaba en plena forma y pese a las tentaciones de girar en 1988 con Guns ´N ´Roses ( por aquello de que compartían sello discográfico), mientras unos empezaban a lamer la gloria y los excesos, Aerosmith había evitado la caída libre y recuperaba el estrellato un poco difuso en los últimos lustros, para alcanzar de nuevo la madurez y la popularidad que ya tenían en la década de los 70.
 Pump, su siguiente disco les devuelve claramente por sus fueros, es el 1º Lp con mucha sustancia y además llega alto a las listas británicas, suceso que nunca antes acontenció. Canciones autoritarias, incluso algunas plenamente radiables. 
 Terminada la gira de Permanent Vacation Tour a comienzos de 1989 se meten en el proceso de grabación de su nuevo disco, un periodo de registrar que les llevó 6 meses desde enero a junio de 1989. Existe un documental sobre el proceso de grabación del disco: The Making Of Pump.
 Podemos observar algunas incorporaciones interesantes, trompeta en Love In An Elevator y el uso de teclados, cuestiones que ayudan a fabricar un aliño de temas la mar de interesantes.




Young Lust



PUMP .- Septiembre de 1989.-
 Rockero, alegre, demoledor es decir poco. No hay alternativas con dicho trabajo, si querían cerrar la década de los 80 por todo lo alto, lo consiguen. Pump es un trallazo, temas con rockerío y alto poderío los tenemos a patadas: Young Lust para abrir boca, un auténtica locomotora donde a Steven Tyler todavía le da tiempo a meter una armónica. F.I.N.E; o temas socarrones donde se nos aparece una sensual voz femenina, Going Down, dando los buenos días a Mr. Tyler para introducirnos enseguida en Love In An Elevator con sus más de 5 minutos de duración con largos desarrollos guitarrísticos Perry/ Whitford, más una trompeta divertida, canción que por cierto se acabará convirtiendo en un emblema para el grupo.  
 No perdemos el rock contundente : Monkey On My Back u otra canción divida en dos partes, una pequeña introducción Water Song para irse endureciendo pasados unos segundos y desarrollar Janie´s Got A Gun con profusión de teclados. Dentro de esta línea poderosa coloco también a My Girl.
 Hay algunas joyas no tan escondidas en un disco repleto de buenas canciones, pero hay indicios prometedores como el blues que es Don´t Get Mad, Get Even para irse poco a poco endureciendo y acabar en un rock contundente.
 De nuevo juegan con nosotros en dividir una canción en 2 partes, voces de indios en trance, guitarra bajita para ir cogiendo el aire, vocalización de Steven Tyler que va subiendo hasta que Kramer pone las cosas en su sitio y nos sacuden el esqueleto con un temazo, de lo mejor del álbum: Hoodo/Voodoo Medicine Man.
 Para terminar y ya viene siendo norma de la casa en los últimos trabajos, una balada What It Takes.

  • John Webster - teclados
  • Bruce Fairbair - trompeta










My Girl



 Sigan... sigan...  Durante los meses de octubre y noviembre Aerosmith están de gira por Europa con la promoción de Pump, para continuarla durante diciembre y enero por Estados Unidos. El final de año lo programan para tocar en casa, varios shows en el Boston Garden.  Posteriormente la alargarían por Japón y Australia mientras el álbum seguía cosechando éxito, ventas millonarias hasta alcanzar los 7 millones de copias, algún premio Gramy por el tema Janie´s  Got A Gun e incluso un número 1 por 1ª vez con su single Love In An Elevator.
 En esta carrera larga que mantenían y que parecía devolverles parte de la magia perdida de antaño y recuperada dado su alto nivel de composición, y ahora unido a sus tours victoriosos, también supieron sacarle partido a los famosos desenchufados que tuvieron una cierta repercusión mediática en esta década de los 90.
 Aerosmith no fue ajeno a esta moda y en agosto de 1990 participó en la MTV Unpluggeg que como documento puede servir a quien se crea muy acérrimo al grupo, o simplemente como curiosidad, eso ya depende de cada cual.
 Si todavía hubiese alguien que no contemplara la posibilidad de tener algún disco del grupo, en 1991, lanzan un triple: Pandora Box, 3 cds o casetes en los que se aloja un equilibrado extracto de sus 15 años de carrera bajo la discográfica Columbia, un total de 53 canciones donde podemos encontrar hasta material de desecho desde su primer disco Aerosmith hasta Rock In A Hard Place, inéditos y alguna demostración que quedó en el camino. De tener dinero y ganas puede ser una caja muy coqueta además de un libreto la mar de curioso.
 Como tenían el mercado inundado de discos, 1992 resultó ser un año tranquilo y sereno dentro del grupo. Sus interminables giras parecían remitir en una pausa mientras poco a poco prepararían un nuevo disco, esta vez doble que no aparecería hasta la primavera de 1993.






 Hoodoo/Voodoo Medicine Man


 GET A GRIP .- Abril de 1993.-

 Obtener el control es lo que tenía Aerosmith cuando publican este trabajo y parece una contradicción con la vida que hasta apenas un lustro antes llevaban, dilapidando sus carreras y sus fortunas. Un guiño a la dimensión de la existencia, como el inicio desbocado del álbum. Kramer arremete, golpea con furia su batería con unas guitarras de Joe Perry y Brad Whitford que echan humo; Eat The Rich no deja resquicio a ningún atajo, rock sin concesiones que siguen con Get A Grip, eructo incluido, la monumental Fever rock and roll sin cortapisas. Es muy de Aerosmith salir en los últimos discos como si de un directo se tratase, a toda pastilla para colocar al personal al borde de la paranoia más bailable, la sección rítmica marca el camino y las guitarras y la voz de Tyler le secundan. Los riffs de Joe Perry se aprecian con más deleite en Livin´On The Edge, una pequeña concesión a emisoras radiofónicas si querían pinchar algo más tranquilo, lo curioso que es una canción que acabó como emblema, pues parte de la base de las manifestaciones acontecidas en Los Ángeles durante 1992. Casi todo el disco deja poco espacio a las composiciones que no sean de Tyler/Perry, con ayuda adicional de Jim Vallace en algunas y una colaboración especial de Lenny Kravitz en Line Up.
 Cuando uno puede hacer autocrítica y saborear placeres mundanos y libres de sustancias tóxicas, está bien plasmarlo en canciones que hablan de esto. Flesh nos conmina a cosas sencillas con un tempo medio interesante. Puede pacer que una estrella de rock viva en una nube eterna y que rara vez desciende, los de Boston cuando quieren dejan las limousines y calzan asfalto por el que derretir lloros de guitarras eléctricas en un mundo que dista mucho de ser perfecto, una vez más los temas sociales quedan reflejados en Walk On Down, eso sí, nos colocan un muro de guitarras pegadizas y espectaculares. Los tonos altos, con curiosidades como el inicio de un silbato y un trote callejero como si nos persiguieran y no supiésemos bien hacia dónde dirigirnos, Shut Up And Dance nos viene  sazonada con un coro pegajoso y guitarras muy interesantes.
 ¡Ah, claro, la balada…! No puede faltar en ningún Lp de Aerosmith. Como Get A Grip es doble, tienen tiempo de colocarla donde quieran. Aquí va al comienzo de la cara C, y no desentona, Cryin´ está entre lo más granado de lo publicado por los americanos. Pueden sacar un disco sólo con estas tonadas y sería estupendo para momentos íntimos y recogidos. Coros, guitarras sostenidas y una armónica que siempre me gusta cuando Steven Tyler se anima a sostenerla en esos labios putones y verbeneros que posee, y sopla, y sopla bien. Crazy es otra cosa, una tonada rock-blues que repta por tu espalda con una voz cariñosa que quiere llevarte al vertedero de la vida, que te seduce con un Joe Perry especialmente inspirado sacando ese viejo polvo de sus cuerdas, con Tyler que saca pulmón y de nuevo su armónica para dar paso al solo final de la eléctrica. Amazing nos presenta una sección rítmica tranquila con un toque de piano a cargo de Steven Tyler, de nuevo cargan contra el abuso de las drogas, desde luego saben a lo que cantan.
 Voz en lucha con las guitarras eléctricas de Perry y Whitford, canción sostenida con un ritmo machacón jugando a ser malos, Gotta Love It, rock con bastantes matices, arrastrado. Line Up tiene invitado de postín, Lenny Kravitz, pese a ser un tema que podríamos denominar de “comercial”, no desentona con todo el disco. Estribillos y riff sostenido. Más rock sin consecuencias pero para nada despreciable en la línea Aerosmith, Can´t Stop Messin´. Las guitarras National ponen la puntilla en el limpio y diáfano instrumental que es Boogie Man.





Crazy


La larga estancia en la carretera.-  Poco a poco Aerosmith había subido mucho más alto que la década de los 70 que los vio nacer. Con discos como Get A Grip la demanda de verles en directo no hacia más que crecer, en unos meses tras el lanzamiento del álbum y sus millonarias ventas el auge de los bostonianos fue en aumento, y eso les llevó a cruzar el Atlántico en olor a multuditudes y a prorrogar el tour nada menos que en año y medio. Mucho tute para unos músicos que iban entrando en una edad de cuidarse para mantener el negocio y eso sí, fuera de todo tipo de estupefacientes si cuerdas vocales y venas por las muñecas ,querían estar en su mejor forma.
 La gira comenzó en Kansas el 2 de junio de 1993 para acabar jugando en casa, a finales de diciembre de 1994. Entre medias un largo recorrido por Estados Unidos, Europa, Japón y las novedades de Centroamérica y América del Sur. En España sólo dieron 2 conciertos en el mes de noviembre de 1993, Barcelona y San Sebastián, tuve que esperar un año para verles en directo en 1994, en junio, donde se nuevo se acercaron por aquí tanto en Zaragoza como en Madrid. En la capital del reino incluso dieron un pequeño concierto acústico promocionado por una cadena de radio, luego encima del escenario del Pabellón de Deportes demostraron toda su magnitud como grupo poderoso de rock, una muy buena actitud y estado de forma tanto a nivel instrumental como la vedette que es Steven Tyler, poderosas cuerdas vocales y gestos y saltos extravagantes incluidos.
 El grupo estaba probablemente en su mejor estado de forma de toda su ya dilatada carrera, parecían tener el alma curtida como pieles secas al sol y los pies y las manos ligeras para tocar sus instrumentos. Además los 4 últimos discos eran entre soberbios y muy buenos, lo cual no me extraña que después del tute que se dieron con la gira de promoción de Get A Grip
desaparecieran por un largo periodo de tiempo, nada sabré de ellos hasta la publicación de Nine Lives, en marzo de 1997.




Steven Tyler (voz y armónica), Joe Perry (guitarra), Brad Whitford (guitarra), Tom Hamilton (bajo), Joey Kramer (batería).

 Músico colaborador: Thom Gimbel (teclados, saxo, coros).

 Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid. 11.000 espectadores. Precio: 4.000 pesetas. Madrid, 9 junio.



 Pink



 
NINE LIVES .-Marzo de 1997 .- 
 Después de 4 años sin publicar nada, pero con una amplia gira como ya expuse,  era normal un cierto sosiego. Aerosmith publica un nuevo disco, más ecléctico que los anteriores,  con aires morunos en Taste Of India, ayudas de vientos Falling In Love, tempos medios: Hole In My Soul o Full Circle, pero sin perder los latigazos guitarreros: Nine Lives, Something´s Gotta Give, Crash, Falling Of  (éste con la novedad de que es Joe Perry quien canta). El sonido sucio y arrabalero no lo han perdido pese a encontrarse en el mejor momento de su carrera desde la publicación de Done Whit Mirrors – 1985 enlazando un buen puñado de discos y desparramando rock-blues potente en varias canciones.
 Normal que Nine Lives investigue un poco más para no repetirse sin perder las esencias que tanto les costó recuperar. Los 14 temas de este álbum hacen gala de cierta maestría, aunque hay cosas insustanciales al sonido Aerosmith. Las baladas por ejemplo, aquí nos derrochan algunas: Ain´t That A Bitch o Kiss Your Past Good-bye.
 Componer otro disco tan descomunal como Get A Grip ya no era posible. Todas las esencias quedaron ahí, pero las rendijas dejan escapar todavía buenas gotas de perfume. Ahora toca sacar un álbum entretenido y disfrutable, que ya no alcanzaría un nivel tan exagerado de fama como sus precursores, pero que, pese a tener algún momento irregular, dejaba a la leyenda en buena posición.
 El mejor tema del disco es un tempo medio que come a parte: Pink, con un ritmo sostenido bajo/batería, es Steven Tyler quien se luce desde la entrada con armónica en ristre para deleitarnos con su poderosa voz, y sacar unas estrofas deliciosas de sus labios carnosos y putones, no hace falta que imite a nadie, él tiene la suficiente personalidad y vocales para ser un gran cantante.
 También existen temas de relleno que no aportan nada, no son malas canciones, para nada, pero dentro del contexto del disco sobran, me refiero a Attitude Adjustment y la larga, más de 8 minutos: Fallen Angels con la que cierran este trabajo; más una jam-sessión con aires hindúes que otra cosa, bajando en el último tramo la calidad de un Lp más que correcto e interesante.


Steven Tyler : Voz - teclados - armónica
Joe Perry: Guitarra y voz solista en Fallin Off.
Brad Whitford : guitarra 
Tom Hamilton : Bajo
Joey Kramer: Batería









Crash


 La gira de las nueve vidas.- Siempre que un grupo de estas dimensiones se pone de nuevo en carretera, yo por si acaso procuro ir a verles, por si sucede algo inevitable. ¿Por si acaso qué? Pues por si no vuelven, alguno se extravía definitivamente del mundo de los mortales, se da de baja, cae en acto de servicio… las desgracias que se pueden acumular pueden darse de tal manera que un tour diseñado en medio mundo y cuya duración les tendría 2 años en candelero, pueden suceder demasiadas cosas, aun siendo americanos por aquello de la tecnología, los muchos medios a su alcance y la cohorte que trasladan de un sitio a otro. Mucha gente, material, y desencaminado nunca ando. Nine Lives Tour tuvo varios percances en 2 miembros de Aerosmith: Steven Tyler y Joey Kramer, lo cual les llevó a cancelar algunos conciertos.
 A poco de lanzarse el Lp Nine Lives se lanzaron a un largo y esperado tour desde mayo de 1997 a julio de 1999 y en esta oportunidad Europa abría el tarro de las esencias. Por un lado puede que cuando los vi por 2ª vez estuviesen ajustando cosas técnicas, pero los encuentro muy frescos y dinámicos, apenas 16 conciertos llevaban cuando se presentan el 15 de junio de 1997 en el Palacio de los Deportes de Madrid, último de su periplo europeo pues saltan a Estados Unidos y Canadá.  Más tarde Japón y de nuevo a USA donde Steven Tyler tiene una lesión en el ligamento de su rodilla tras caerle el micro en pleno concierto. Lo de Kramer es más pintoresco, su coche se incendia cuando se encuentra en una estación de servicio y sufre quemaduras considerables. En el verano del año siguiente prosiguen su amplio periplo por Europa, ahora sin pasar por España, regreso a Estados Unidos y Canadá y allá por 1999 de nuevo en el viejo continente donde el penúltimo concierto de este tour lo dan en Barcelona y finalizan la misma en Lisboa. Dos años de carretera, mucho trote y todavía en plena forma.
 Las millonarias ventas de Nine Lives y sus discos de platino, les mantenían en pleno auge, y probablemente es la banda número 1 en estos momentos, desde luego en Estados Unidos no hay otro grupo de esta dimensión.  Los trabajos de estudio se espacian en varios años como ya ocurrió desde Get A Grip y su siguiente disco Just Push Play no lo cataremos hasta el nuevo siglo, ya en 2001.



Something´s Gotta Give


Preparando el nuevo disco y viviendo bien.-  Admito que con la cantidad de discos que tengo de Aerosmith y sus 2 conciertos vistos, el 2º hasta se retrasó un día a causa del fútbol, ¡ que cosas pasan en este país hasta para el rock !; me encontraba más que satisfecho para un niño criado en provincias y que de medio adulto decidió que una de las 25 razones que tenía para vivir y respirar era poder desarrollar su existencia en Madrid y ver conciertos, esa magia nunca jamás bien explicada por quien acude siempre que puede y su bolsillo se lo permite a semejantes aquelarres de luz y sonido.
 Poco a poco Aerosmith se fue prodigando cada vez menos en sus maratoniano tours, no es para menos. Ya comenté muy al principio que una de las cosas por las que una banda debe de seguir juntos al margen del negocio que ahora son, una marca, será una posible amistad entre ellos y emociones personales entrelazadas, sino no se explica, pues sus cuentas corrientes están florecientes.
 Sólo tengo 2 discos más del grupo y 1 actuación a sumar a mi periplo con los de Boston. Ninguna de las cuestiones antes planteadas me decepciona, pero lo que han ido desarrollando posteriormente me parece manido.  Discos flojos, alguna recaída en forma de clínica de rehabilitación por drogas, analgésicos según los partes médicos, a cargo del díscolo Steven Tyler que en un momento determinado estuvo fuera del grupo, expulsado, así sin más por Joe Perry, el colmo que rebasó el vaso fue una caída en pleno concierto con las consecuencias dramáticas de cancelación de conciertos, mala  imagen, pérdidas económicas, en fin, esto es una industria y la maquinaria no puede parar, demasiada gente depende de tí. Además hablamos de gente ya de vuelta de todo, para qué jugar con la ruleta del destino, no
 tentemos al diablo siempre dispuesto a llevarte sin pestañear un segundo.
 Algún ejemplar de Rolling Stone que tengo hablaba de que a lo largo de la década de los 90 el cantante volvía a pasear por el lado peligroso. Tiene gracia, pasados los 50 años, pese a las negaciones del interesado, las pruebas eran evidentes en algunas cancelaciones como expliqué y accidentes inexplicables, también debo de afirmar que Tyler me pareció de cerca y de lejos que fuera del escenario es un desastre. He podido asistir al pie del escenario en un show en Madrid y pese a su potente voz, se perdía en varias estrofas y tropezaba con cables y los traspiés no sólo eran de estupefacientes, es que creo que todo lo que posee de bueno en su música los deshace en su desajustada cabeza. ¡Por eso me cae tan bien !





Trip Hoppin´


Perdidos en el laberinto mediático.-  Miren, cuando uno va a una clínica odontológica y previa confirmación e identificación de la hora de la cita suele tomar asiento una vez realizados estos hechos burocráticos. Luego, si el sitio es de postín, una dentista se te acercará y te preguntará que la cuestión es que debes de esperar un poquito, “sólo un poquito”, porque su compañera está con otro paciente. Te ofrece tomar algo, pides un Nexpreso, te lo ponen con plato, tacita, cuchara, algo de azúcar y un detallito en forma de galletita. Mientras remueves el líquido escuchas atónito la banda sonora que suena por los altavoces del hilo musical. Primero frunces el ceño como si ese acto de constricción intelectual te sirviera de concentración máxima. Pero la voz es la de Steven Tyler, tipo que has tenido a escasos metros de tu persona en algún concierto, ¿pero un momento, son Aerosmith? Las guitarras pueden ser de Joe Perry y Brad Whitford, pero a qué suenan… ah eso, a hilo musical en una sala de dentista. No puede ser te dices atónito, haces amago de preguntar a la joven con gafas que está en el mostrador muy ocupada con su ordenador. ¡Pero qué sabrá ella te dices en un acto de soberbia y de prepotencia, vete a saber, lo mismo te da sopa con hondas! Preguntas y ella sonríe y lanza las manos al aire como si le estuvieses atracando y señala a algún altavoz imaginario que existe en la sala de espera… Lo temías, pero tenías que hacerlo para ser tú mismo en todo momento y lugar.
 Sí, son Aerosmith con un disco publicado en marzo del 2001, concretamente el Just Push Play y ahora hacen pop-rock, más bien lo 1º. No sales de tu asombro cuando la odontóloga que te sirvió el Nexpreso se te acerca sigilosa con su bata blanca de la que cuelgan en su bolsillo superior izquierdo varios bolígrafos y te dice muy resuelta: “Mario, cuando quieras…” Y tú la sigues mientras continuas escuchando la voz de Steven Tyler. Si esto sucede sin anestesia local qué será cuando unos segundos más tarde te encuentras tumbado en una silla odontológica con un foco alumbrando tu dentadura y te colocan un tubito en la boca para que respires mejor. Todavía al fondo, en algún lugar, sigues insistiendo en tu cerebro que son los Aerosmith.
 Esto debió de suceder en la 1ª década del siglo XXI. Ya tenía muchos discos de los americanos pero no pude sustraerme a comprar Just Push Play donde lo mejor del disco son las fotos interiores y unas imágenes interesantes y trabajadas de los textos. Hay canciones que te pueden despistar pues empiezan bien y se dejan oír: Beyond Beautiful, con aires hindúes pero sin llegar a las cuotas de Taste Of India. Incluso Jade, si te pilla despistado y primer single del Lp. Aire inocente rockero de Trip Hoppin; psicodelia atropellada, Under My Skin; cartuchos vacíos, Light Inside. Pero hay que rascar mucho para sacar algo en limpio de este trabajo.
 Ni siquiera cuando les da su toque funky aciertan, Just Push Play, que además da título al trabajo, mezclan electrónica y un rapeo que a mí no me acaba de llegar, con lo bueno que es Tyler en estos aspectos, pues tampoco está. Todas las bandas o solistas, digamos grandes, tienen su Emocional Rescue; faltos de inspiración, álbumes hechos a retazos o sobras de otros, entendible si sacan un disco por año, pero es que Aerosmith llevaban 3 sin publicar nada nuevo. ¿Vagancia, falta de inspiración…? Como norma de la casa no faltan ni las baladas, aquí desangeladas, Fly Away From Here o Luv Lives. Algo más entonados en Avant Garden. Ahora, para despiste monumental y desaguisado Drop Dead Gorgeus, no sólo intentan y no lo consiguen, es obvio, poner tecnología punta en programación, es que Steven Tyler coge las congas y Joe Perry canta, lo cual me da que lo único destacable del asunto es que el punteo de guitarra eléctrica es del bueno de Brad Whitford.




Back Back Train


Camino del sur.- Nada acertados en su último trabajo pero eso no es óbice para que se lancen a la carretera. Currantes desde luego que lo son, en cuanto a girar y promocionar su disco ahí están de nuevo con Just Push Play Tour, como norma de la casa les mantendrá casi 2 años en directo, comenzando en junio en Estados Unidos para finalizar a 
comienzos del 2002 en Japón, todo dividido en 5 etapas. Cuentan con teloneros de lujo: Cheap Trick, Combustible y The Cult para un total de 85 conciertos, nada mal desde luego. Tras un periodo de descanso reanudan la gira que sólo incluirá USA y Canadá bajo el epígrafe de Girls Of Summer Tour, desde agosto a diciembre del 2002 en un total de 51 shows con llenos totales y unas ganancias brutales, al nivel de las de Led Zeppelin en los 70 y la de los Stones, que a éstos da igual la época y el disco promocional en cuestión, comen no sólo aparte y ya llevan décadas por encima del bien y del mal.
 Aquí no para la cosa, 8 meses después inician una nueva gira por Estados Unidos en agosto que les mantendrá en la carretera hasta diciembre, todo en el 2003, bajo el epígrafe de Rocksimus Maximus Tour y 59 conciertos en total junto a sus compatriotas Kiss. No me extraña que en su país sean la banda más venerada y desde luego desde sus inicios eran denominados los Stones americanos, aunque Aerosmith tiene su propia personalidad, faltaría más
 No tardan mucho en meterse en el estudio para realizar un soberbio disco de blues pasado por la batidora del grupo, adaptaciones de grandes bluesman a semejanza de lo que Eric Clapton realizó una década antes con su From The Cradle -1994. Entre tanto tour y viendo su escasez creativa en el Just Push Play se fueron a las fuentes primigenias de todo músico americano, el blues, ese eslabón imprescindible para saber de qué estamos hablando. Un retorno desde luego de la banda a las raíces de los 70 con tomas en vivo para no perder un ápice de espontaneidad, estoy escribiendo sobre Honkin´On Bobo, 14º álbum de Aerosmith y último que poseo de mi colección.
 Joe Perry en declaraciones a Rolling Stone se quejaba amargamente de sus últimos trabajos, nada satisfecho según él, estoy de acuerdo, la cosa creativa ha bajado mucho. Si en cada década han dejado un puñado de buenos discos, en los 70 Toys In The Attic, Rocks o Bootleg –Live; los 80 es su mejor época en los niveles de producción : Rock In A Hard Place, Done Whith Mirrors, Permanent Vacation o Pump; más estirados en los 90: Gret A Grip y Nine Lives, el cambio de siglo no les pilla muy allá en cuanto al viaje de las musas a sus cerebros, cuestión ampliamente compensada por su enorme cantidad de material que tenían para sus maratonianos tours. Así pues tiran por el camino de en medio y deciden revisar el viejo cancionero americano y los 5 miembros, con algún invitado ocasional, desempolvan del desván un puñado de canciones. No era nada nuevo, Joe Perry ya nos había mostrado el camino en temas diversificados por sus discos anteriores, Walkin' The DogMilk Cow Blues o Reefer Head Woman entre otras.




Jesus Is On The Main Line



HONKIN´ON BOBO .- Marzo de 2004 .-

 Anclado en las raíces negras, nada mejor que empezar con un rock and roll del gran Bo Diddley, aquí despachan la versión Road Runner, compacta, dura, enérgica, pesada en el sentido de consistente, todo un chute de adrenalina y soltar amarras con las 2 guitarras eléctricas. En este recorrido sureño nos encontramos con Jimmy Reed, la muy agradable Shame, Shame, Shame, convertida en un boogie vacilón y de tugurio de taberna para bailar a altas horas de la madrugada. ¡Una gozada, oigan! No desentona hallarse a la vuelta de la esquina con el gran Sony Boy Williamson, cuestión de tener un piano cerca porque la armónica la sacamos del bolsillo y aquello se convierte en una fiesta de órdago, Eyersight To The Blind. Uno no sabe con qué quedarse con lo escuchado hasta ahora como niño en una juguetería. Ni aun con el serio Big Joe Williams se quedan cortos, para mí un blues acelerado y archiconocido más cerca de la versión que tengo del fiera de Detroit Ted Nugent y su directo de 1977, que la versión original, claro es Baby, Please Dont´Go.
 Un pequeño receso entre la abundancia de “marcha”. El tema de R.Shannon, Never Loved A Girl es un original de Aretha Franklin y que Aerosmith le cambian el nombre, en realidad es terminado en … Man por motivos obvios nos ofrece una arrebatadora y sutil versión de aquella pieza de soul que en el 1967 llevó a lo más alto a la incomparable voz femenina de Memphis. En manos de los de Boston el tema cede un mayor protagonismo a las guitarras a la vez que la sección de vientos se queda en un plano mucho más secundario que en la original. A partir de aquí nos hundimos en el profundo sur, la pantanosa versión de Fred McDowell cobra toda su dimensión, Black Black Train, coros femeninos, armónica ratonera y rastrera y el slide de Joe Perry traen el resto para elevarnos por encima de las nubes. ¿Qué decir del clásico de también doble homenajeado McDowell, ese temazo que es You Gotta Move, yo que pensé en el 77 que con la versión de los Stones en su doble Love You Live, estaba todo dicho? Pero hay sorpresa, no es cruda como la original del bluesman ni copia de aquel Sticky Fingers de los británicos, Aerosmith le da otro aire entre blues-rapeado en algunos instantes. Suman, añaden, que es de lo que se trata y casi la mejoran.
 Bien, añaden un tema compuesto por Tyler/Perry/Fredericksen, The Grind, y es una balada, preciosa, a la altura de cualquiera de las legendarias de Aerosmith y colocada al ladito de por ejemplo Crazy. Enorme. No desentona con el disco, enseguida Willie Dixon viene a echarnos una mano, I´m Ready, otro clásico, como si no hubiesen querido meterse en aguas más profundas y tiraran del gran cancionero y nos demostraran el fácil camino de las influencias en caso de duda. Muy dura, la verdad la adaptación, voz que nada tiene que ver con la versión más conocida de Muddy Waters, ellos le dan “otro toque”. Ahí lo dejo.
 Que observar de cerca a Steven Tyler con la armónica es todo un espectáculo, doy fe, no era para menos que algún grande, en esta ocasión Little Walker, cayese tema era cuestión de honor, Temperature, lucimiento del frotman de Aerosmith. Tradición de los grupos británicos que a mediados de los 60 invadieron los estados Unidos, la adaptación de Peter Gren y sus Fleetwood Mac, Stop Messin´Around, aquí apunto 2 cualidades añadidas, el piano del gran Jonnie Johnson y la voz y guitarra de Joe Perry, lo cual deja suelto a Steven Tyler como soplador de armónica. En directo es todo un subidón, no digo más. Finalizar sin darnos cuenta con un gospel, slide de guitarras National, coros, voces celestiales maravillosas en la adaptación de Jesus Is On The Machine, no hace falta echarle mucha imaginación y sobreponernos al miedo de ser negro en el Mississippi en el siglo XIX y recoger algodón.



Steven Tyler: Voz - Armónica

Joe Perry: Guitarra

Brad Whittford: Guitarra

Tom Hamilton: Bajo

Joey Kramer: Batería









Back, Back Train



 Las musas se evaporaron y queda la carretera.- Como la inspiración se había volatizado y sólo llegaba en pequeñas gotas, muy escasas, tras el alumbramiento del magnífico Honkin´On Bobo, donde sólo crearon una nueva canción, unido a la publicación de su anterior disco Nine Lives, todo hace indicarme que Aerosmith ha grabado todo lo gabable que tenía de calidad y que sólo un milagro en forma de musas lograrán realizar un trabajo destacable. Según mi intuición, serán un excelente grupo de rock en directo con toda su parafernalia, pero de nuevas obras creo que está todo dicho
 Honki´n On Bobo Tour  les lanza a la carretera por Estados Unidos, Canadá y Japón en 2004, 51 conciertos que abarcan 4 meses de marzo a julio; los problemas vendrían al año siguiente, ahora con el apoyo de teloneros como Cheap Trick o Lenny Kravitz, Rockin The Joint les tendría de gira desde finales de octubre de 2005 a marzo de 2006, de nuevo por USA y Canadá, pero Steven Tyler tuvo que ser sometido a diversas pruebas de garganta, al parecer necesitaba cirugía, por lo tanto sólo dieron 44 conciertos de los 61 programados.
 De sacar nuevo Lp nada de nada. Ya dije que las musas volaron y parece que definitivamente. Los problemas no acabaron ahí, Tom Hamilton su bajista, se sometió a tratamientos para cáncer en su garganta. Con el fin de realizar una recuperación completa, se canceló gran parte del Routte of All Devil Tour, en el que compartían cartel con Möntley Crüe, durante los meses de septiembre a diciembre del 2006. Entre medias Joe Perry lanzó un disco en solitario, Aerosmith publicó un recopilatorio Devil´s Got A New Disguise – 2006, que como acicate contiene 2 temas nuevos, disco más que nada lanzado para cumplir el contrato que tenían con su discográfica.




Road Runner



No por viejo dejo de tener problemas.-  Está muy claro que la época de enorme creatividad que mantuvieron durante la década de los 80 quedó atrás. Si sólo en el periodo que llevamos de siglo apenas hay un disco que llevarse al oído, el maravilloso Honkin´On Bobo, y son adaptaciones, tampoco eran tan complicado, nada espero en forma de sorpresas agradables, entiéndase.
 Colocando a la banda al borde de la separación en más de una ocasión, siendo generosos, son 8 años los que separan Music From Another Dimension – 2012  y el álbum de versiones blues, espacio que Aerosmith se ha dedicado a girar y no pisar los estudios y todo sazonado con tensiones internas y el megaestrellato alcanzado por Steven Tyler, problemas múltiples de esguinces de rodillas en varios de los compontes de la banda, cirugías al margen y no de estética precisamente, analgésicos varios para el frotman debido a sus múltiples dolores, intentar mantenerse en el calderero cuando la industria ha evolucionado demasiado para mí, y mal claro. Los viejos cánones no sirven, y Aerosmith ahí siguen aunque ha faltado interiorizar el ritmo de su tiempo para trascender, aunque su leyenda se haya acabado fraguando en torno a sus grandes canciones de los setenta y a su exitosa resurrección comercial de los ochenta y noventa.
 Visto lo visto, o mejor oído lo escuchado, hubiese sido preferible que no publicasen absolutamente nada. No necesitan dos temas rockeros, una balada y un sonido AOR que espanta para entrar en el salón de las casas “bien pensantes”. El rock es otra cosa, y si no escandaliza o te dicen “baja eso…” es que ya no merece la pena. Y Aerosmith no debía de haber 
publicado  Music From Another Dimension, quedarse donde están y si quieren y lo desean, aunque sus finanzas son espléndidas, seguir en un tour permanente, ahí, nada que objetar. Hoy por hoy vivimos un dulce momento para el rock, con bandas nuevas día sí y día también, que innovan, evolucionan y nos dan sonidos y emplean técnicas que hasta los más veteranos van colando en su música, excepto Aerosmith, claro. Nada de volver a lo grande y  de empezar de nuevo otra carrera en ascenso como fueron capaces de realizar en los 80, escucharles hoy en día es como mis sesiones de odontología si lo que me colocan por el hilo musical es su último disco, y para ese viaje no hacen faltan tantas alforjas.






DISCOGRAFIA SELECCIONADA


TOYS IN THE ATTIC .-  1975

ROCKS .- 1976

BOOTLEG- LIVE .- 1978

NIGHT IN THE RUTS.- 1979

ROCK IN A HARD PLACE .- 1982

DONE WITH MIRRORS .- 1985

PERMANENT VACATION .- 1987

PUMP.- 1989                   

GET A GRIP - DOBLE .- 1993     

NINE LIVES .- 1997

HONKIN´ON BOBO .- 2004
























Steven Víctor Tallarico (Tyler) : 26 de Marzo de 1948. Nueva York (USA)

Anthony Joseph Pereira (Perry) : 10 de Septiembre 1950. Masschusettes (USA)

Brad Whitford : 23 de Febrero de 1952 . Winchester (USA)

Tom Hamilton : 31 de Diciembre de 1951 . Colorado (USA)

Joey Kramer : 21 de Junio de 1950. Nueva York (USA)

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